Tegucigalpa. Tras las votaciones generales del 28 de noviembre en Honduras, el conservador Partido Nacional recibió el voto de castigo de la mayoría de ciudadanos dejando fuera del Congreso Nacional a principales diputados señalados en corrupción y crimen organizado.
En las elecciones de 2017, el Partido Nacional logró tener 61 diputados en el Poder Legislativo que le permitió ejercer control sobre el Congreso Nacional y aprobar leyes nocivas en contra de los intereses de la nación centroamericana como la Ley de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE) que no es más que la venta del territorio y la soberanía nacional así como la Ley de Secretos y el nuevo Código Penal.
Unos 33 diputados del Partido Nacional sufrieron el voto de castigo de la ciudadanía que acudió de forma masiva a ejercer el sufragio logrando así que el Partido Nacional perdiera las elecciones y el poder de la nación tras doce años de gobierno.
SINDICADOS EN CORRUPCIÓN FUERA DEL CONGRESO
Dentro de los nombres que sobresalen de los diputados nacionalistas que no continuarán en el Congreso y que fueron sindicados en corrupción está la diputada por Cortés, Welsy Vásquez, acusada por la extinta Misión de Apoyo Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (MACCIH) en el caso conocido como Arca Abierta señalándola de malversar recursos de Estado por más de 21 millones de lempiras.
El actual presidente del Congreso Nacional y exprecandidato presidencial, Mauricio Oliva, acusado por la MACCIH de drenar fondos públicos y utilizarlos para gastos personales, logró que su partido lo incluyera en los diputados al Parlamento Centroamericano que le otorga inmunidad.
Uno de los principales jóvenes caudillos del Partido Nacional que logró ser ungido como presidente de esa institución política es David Chávez, sindicado por el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) de corrupción cuando fungió como director del Instituto Nacional de Formación Profesional (Infop), asimismo el equipo de Criterio.hn junto a una coalición de medios realizó dos investigaciones en las que se desnuda los negocios oscuros y la red empresarial de Chávez.
A la lista se le suma Waleska Zelaya, diputada por Francisco Morazán, señalada por el CNA, junto a su esposo, por sobrevalorar precios de mascarillas para la emergencia de la COVID-19, además, su esposo ha sido beneficiado con contratos con el Estado incumpliendo la Ley de Contratación del Estado en su artículo 15.
También el diputado de El Paraíso, José Celín Discua Elvir, acusado en el caso Arca Abierta y señalado por Estados Unidos como un funcionario corrupto del Triángulo Norte de Centroamérica en la Lista Engel y la diputada de ese mismo departamento, Sara Medina, acusada por la Unidad Fiscal Especializada Contra Redes de Corrupción (UFERCO) por falsificar documentos públicos y promover la impunidad.
Asimismo, el diputado por Intibucá Elden Vásquez, acusado de lavado de activos en el caso Pandora desviando fondos destinados a proyectos agrícolas y sociales y enlistado por los Estados Unidos como un diputado corrupto del Triángulo Norte.
El diputado Renán Inestroza también quedó fuera del Congreso Nacional, aunque en Honduras no ha sido señalado en corrupción por parte del Ministerio Público, una investigación de Univisión lo vincula de ser parte de una red para drenar fondos públicos por medio de oenegés.
La acusación del Ministerio Público le pasó factura al diputado Reynaldo Ekónomo pues fue sindicado de corrupción cuando fungió como director del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) en el departamento de Cortés, de igual forma se le vincula con el narcotráfico y recibir sobornos de narcos a cambio de protección.
Miguel Edgardo Martínez, diputado por Comayagua, es uno de los congresistas con más acusaciones de corrupción ya que está implicado en el Caso Pandora y forma parte de la Lista Engel.
Por el departamento de Lempira, figura Juan Carlos Valenzuela parte de los acusados en el caso Arca Abierta y miembro de la registro de funcionarios corruptos de Honduras por parte de Estados Unidos.
Otro congresista que sale del Poder Legislativo es Román Villeda Aguilar del departamento de Ocotepeque, sindicado en el caso Pacto de Impunidad y acusado con los cargos de falsificación de documentos públicos y abuso de autoridad al modificar de forma arbitraria la Ley de Presupuesto del Congreso Nacional al igual que el diputado José Francisco Rivera aunque a este solo recibió cuestionamientos, inclusive del CNA, y no una acusación formal.
Por los señalamientos de corrupción en tiempos de la pandemia, Gabriel Rubí, fue castigado por la ciudadanía pues cuando fungió como titular del Comité Permanente de Contingencia se le acusó por realizar comprar a precios sobrevalorados y otras adquisiciones que no eran adecuadas para atender pacientes portadores del virus.
El diputado por Santa Bárbara, Rolando Dubón, acusado por el CNA por ser parte de una red de corrupción en la Secretaría de Salud por la sobrevaloración en la compra de medicamentos.
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ETERNOS DIPUTADOS NO SEGUIRÁN MÁS
Dentro del Partido Liberal figuran diputados que por más de 20 años se mantuvieron en el Congreso Nacional y que para el periodo 2022-2026 no continuarán más ocupando un curul
Uno de ellos es Rodolfo Irías Navas quien formó parte del Legislativo desde el primer Congreso Nacional tras la instauración de la actual Constitución de la República en 1982, 36 años se mantuvo como diputado y es uno de los implicados en el caso Pandora.
De igual forma, el otrora diputado Oswaldo Ramos Soto no continuará en el Congreso Nacional tras 24 años en el hemiciclo, ligado a la época siniestra en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) en la que, empleados, estudiantes y maestros eran secuestrados, torturados y asesinados.
Le sigue Óscar Nájera, del departamento de Colón, 32 años mantuvo su diputación, pero las vinculaciones con la narcoactividad y corrupción le bastaron a la población para no apoyarlo por un nuevo periodo. Es implicado de recibir sobornos de narcotraficantes a cambio de otorgar protección, parte de la Lista Engel y sancionado por el Reino Unido por corrupto.
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LA LISTA DE LOS QUE NO FIGURARON PERO FUERON PIEZA CLAVE DEL PARTIDO NACIONAL
Dentro de los 61 congresistas que eran parte de la bancada del Partido Nacional figuran varios de estos que nunca sobresalieron, no obstante, fueron pieza clave para aprobar leyes nociva contra los intereses de la nación hondureña, además de apoyar la salida de la MACCIH.
Jorge Dimitrov Lobo, hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa (2010-2014), familia señalada por Estados Unidos de ser parte de la corrupción de Honduras; aunque se volvió opositor al Partido Nacional, lo respaldó en cada línea partidaria.
A la lista se le suman el diputado por Francisco Morazán, José Villanueva conocido como “el alero”; la diputada de Choluteca, María Emérita Bardales; los diputados por Comayagua, José María Martínez y Gerardo Tulio Pineda; los diputados por Cortés, Olga Josefa, Gilberto Yearwood, Jaime Villegas, Leo Yammir Valentino; el diputado por Gracias a Dios, Rodrigo Ávila; diputados por Lempira, Samuel Armando Reyes, Salvador Valeriano Pineda; el diputado por Santa Bárbara, César Enrique Handal y el diputado por el departamento de Yoro, Marco Tulio Gámez.
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Tengo algunos años de experiencia y me encanta practicar el periodismo incómodo que toque los tinglados del poder, buscando cambios en la forma de gobernar y procurar el combate a la corrupción, develando lo que el poder siempre quiere ocultar. Ver todas las entradas
2 respuestas
«Dentro del Partido Liberal figuran diputados que por más de 20 años se mantuvieron en el Congreso Nacional y que para el periodo 2022-2026 no continuarán más ocupando un curul»
Ahí dice Liberal…
Ya era tiempo que se fueran esas Lacras cucarachas de alcantarillas