Fotos: Jorge Burgos y Patricia Méndez/Criterio.hn
Tegucigalpa.- Criterio.hn te presenta varios ángulos de lo sucedido este 15 de septiembre en las calles de Tegucigalpa y que evidencia la polarización social y política que surgió en Honduras a raíz del golpe de Estado de 2009.
A partir de la ruptura constitucional, los hondureños se han divido en dos bandos: los que apoyan al oficialismo y los que se declaran en oposición, sean estos movimientos sociales y quienes se adhirieron, a partir del 2011, al partido Libertad y Refundación (Libre), que lidera el derrocado expresidente Manuel Zelaya Rosales y su esposa Xiomara Castro, actual candidata presidencial.
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Captamos varias imágenes de la protesta de la oposición que se movilizó del bulevar Morazán hasta el parque Central, en el centro de la ciudad. Asimismo, intentamos ingresar al Estadio Nacional, donde se desolló la ceremonia del gobierno, pero los policías y militares nos impidieron el paso, al alegar que no portábamos la acreditación oficial.
Del lado del gobierno se observó un derroche y poderío armamentista, con el despliegue de toda la flota aérea de las Fuerzas Armadas y el desfile de carros, tanquetas y equipo bélico del brazo armado.
Los ciudadanos respondieron al llamado y portaron pancartas con las que demostraron su descontento al gobierno, específicamente por su desmedida corrupción.
Con un país que se vende en pedazos, con falsas promesas de desarrollo y sometido a uno de los regímenes más corruptos de la historia, ¿Honduras es independiente? Es la pregunta que cabe por las acciones de repudio ante una celebración que no convence.
