Redacción: Viena Hernández
Tegucigalpa. – Ante la falta de oportunidades y poca apertura a nuevas ideas, los hondureños son limitados en su crecimiento, ya sea como profesionales, en el emprendedurismo y la invención, una gran parte abandona el país y logra desarrollarse en el extranjero, es así como Honduras pierde no solo su fuerza laboral y de desarrollo, sino que exporta a grandes pensadores, científicos, deportistas, artistas y de otras áreas que afuera son aprovechados.
De manera permanente, las capacidades, el ingenio, el talento que podría sacar adelante a Honduras es frustrado y desperdiciado, aunque una gran parte de la población que logra migrar ha llegado incluso a hacer méritos en otros países.
La fuga de cerebros o fuga de talentos es sin duda otro de los resultados de la migración. Este fenómeno ocurre cuando personas con formación académica y profesional elevada salen de su país de origen en busca de oportunidades, principalmente son motivados por factores económicos y profesionales.
La fuga de este capital humano hacia el extranjero, provoca una pérdida de competitividad del país que la sufre, en este caso Honduras. Además, esta es más marcada cuando el país sufre crisis económicas o cuando existen sectores que no tienen crecimiento en el país.
El doctor en derechos humanos, Joaquín Mejía, analizó en conversación con Criterio.hn que, la fuga de cerebros tiene varias causas, algunas son personales y otras estructurales.
“La fuga de cerebros forma parte del derecho humano de la migración, que la gente quiera salir del país por las razones que sean, pero en países como Honduras hay causas que son estructurales, como la falta de oportunidades, una de las causas más importantes”, describió Mejía.
Evidentemente la falta de oportunidades engloba a todas las demás causas, puesto que una persona con la formación adecuada y con todas las capacidades técnicas puede ocupar puestos de determinados rangos, pero el mercado laboral en Honduras encuentra solo puestos inadecuados a su perfil, entonces las personas optan por buscar esa oportunidad afuera.
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HONDURAS DESPERDICIA TALENTOS QUE RESALTAN EN EL EXTRANJERO
Es común, en las caravanas migrantes, escuchar testimonios de hondureños que se convirtieron en ingenieros, arquitectos, pedagogos, artistas o que se desarrollaron en un sinfín de disciplinas o carreras técnicas y universitarias que actualmente brillan en el extranjero. Otros, pudieron incluso terminar de estudiar en otros países y convertirse en personas destacadas.
En tanto, el sociólogo y catedrático universitario, Armando Orellana, explicó a Criterio.hn que, está situación envuelve a muchos ciudadanos que cuentan incluso con nivel de posgrado o doctorado, quienes resaltaron en las ciencias, las matemáticas y en las artes.
“Tienen que recurrir a la migración, buscar esas oportunidades que en la sociedad hondureña no se le dan, esto está determinado por la lógica del sistema capitalista dependiente, esa política neoliberal que no genera las opciones y alternativas en el mercado local”, enfatizó Orellana.
La fuga de capacidades y talentos humanos, se relaciona también con el tema económico, pues en muchas ocasiones las retribuciones económicas no corresponden con las capacidades de la población que se ha vuelto profesional.
No obstante, las mismas instituciones del Estado han permanecido plagadas de la cultura política clientelar patrimonialista, convirtiendo las instituciones en los últimos años en propiedad particular de organizaciones políticas o de partidarios y, sobre todo, de los grupos de poder allegados al crimen, razonó el analista social.
A lo anterior se suman los efectos de los intereses de esas élites de poder, provocando fuertes desigualdades en la sociedad, en relación a esto, Joaquín Mejía, apuntó: “Puede haber otras situaciones vinculadas con la crisis política, como las que ha habido en Honduras, desde el golpe de Estado se vive una crisis política permanente en violaciones a derechos humanos. Si pudiéramos contar cuánta gente con talento dejó el país por esa crisis política y económica que vivimos”, dijo el defensor de derechos humanos.
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Uno de los puntos graves sobre esta problemática, es el costo que tiene para el país. El Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales y la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), publicó un estudio de análisis de 1996 a 2010, para descubrir por qué migraron en ese tiempo más de 25 mil profesionales, lo cual costó a Honduras más de 17 mil 670 millones de lempiras a Honduras, compartió Mejía.
La inseguridad y falta de políticas de apoyo son otro aspecto que impulsa la fuga de cerebros, además de las alternativas ventajosas a las que se puede aspirar en otras naciones del mundo. Orellana, comentó que conoce casos de hondureños profesionales que laboran no solo en Estados Unidos, China, Japón, Corea, Kuwait, Dubái, otros que se convirtieron en médicos en Cuba y hay casos de muchos que trabajan en España.
Ante ese panorama, sería idóneo que existiera realmente voluntad política para propiciar que esa inversión se quedará en el país, como pasa en México o Ecuador, donde disponen de políticas de retorno, generándose las condiciones institucionales y económicas.
“Es necesario que se termine la endogamia, las argollas y se priorice la investigación en la UNAH, porque si se cree que la gente va a retornar solo por dinero, creo que está equivocada, la gente quiere espacio institucional donde realmente existan sistemas de méritos para permitir el ascenso profesional y hagan aportes al país”, puntualizó el también investigador, Joaquín Mejía.
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Tengo algunos años de experiencia y me encanta practicar el periodismo incómodo que toque los tinglados del poder, buscando cambios en la forma de gobernar y procurar el combate a la corrupción, develando lo que el poder siempre quiere ocultar. Ver todas las entradas