Agente de la ATIC asesinada en Santa Rosa de Copán investigaba el cártel de occidente

Por: Redacción CRITERIO

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Tegucigalpa.-Sherill Yubissa Hernández Mancía, la jefa regional de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), asesinada el 11 de junio de 2017 en la ciudad de Santa Rosa de Copán, investigaba el narcotráfico del occidente de Honduras al momento de su trágica muerte.

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Su caso fue manejado desde un principio por el director de la ATIC, Ricardo Castro, como un suicidio. Sin embargo, la entonces directora de Medicina Forense, Julissa Villanueva, alegó mediante pruebas científicas que se trataba de un asesinato, ya que el crimen se cometió con alevosía y ventaja.

En una entrevista con CRITERIO la exdirectora de Medicina Forense reiteró este lunes que ella fue separada de su cargo por haber demostrado la verdad sobre este misterioso caso que desde un inicio fue manejado como un suicidio por el director de la ATIC, Ricardo Castro.

“La gota que derramó la jarra obviamente fue el caso de la joven Sherill Yubissa, la cual asesinaron con alevosía y ventaja después que era una joven que no más hacía su trabajo y que se involucró obviamente en la investigación de casos de alto impacto como lo es narcotráfico. ¿Narcotráfico de dónde? de occidente, quién no sabe qué es lo que está pasando en occidente, por favor…”, expresó Villanueva.

La muchacha ingenuamente identificó algunas situaciones que la pusieron en riesgo y que por supuesto dio a conocer a sus jefes inmediatos, dijo Villanueva, al tiempo que vaticinó que la investigación de este crimen tarde o temprano saldrá a flote.

El caso de Sherill Yubissa Hernández Mancía, ha sido manejado como un suicidio por el director de la ATIC, Ricardo Castro. Sin embargo, en julio de 2017, Villanueva, fungiendo como directora de Medicina Forense estableció que la joven agente fue asesinada con alevosía y ventaja.

Villanueva apuntó que el hecho de denunciar bandas de exterminio y cuerpos ejecutores de sicarios ligados a la ATIC, generó la incomodidad en el Ministerio Público, a tal grado que hicieron creer a la opinión pública que ella había emprendido una campaña en contra de la institución.

Manifestó que sobre el caso de la joven agente se registró una serie de irregularidades en la escena del crimen y de situaciones que estaban generando “un vicio necio en la investigación de una Agencia Técnica de Investigación que quiere investigar la muerte de una compañera de ellos”.

Amplio que los agentes de la ATIC no podían investigar la muerte de su compañera porque no existe objetividad.

La forense se interrogó por qué el director de la ATIC manejó el caso con hermetismo y por qué dio la orden a los fiscales regionales para que investigaran la muerte.

Insistió que fue Ricardo Castro quien dio la orden que fuera la ATIC que fuera la única institución que trabajara en el caso.

“Querer hacer parecer un suicidio, me parece que eso fue una canallada”: Julissa Villanueva, exdirectora de Medicina Forense, sobre el crimen de la agente de la ATIC, Sherill Yubissa Hernández Mancía.

Días después de que Villanueva informara oficialmente que el caso era un homicidio, ella y otros empleados de Medicina Forense, fueron amenazados a muerte, según consta en una denuncia presentada en el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh).