Por: Redacción CRITERIO.HN
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Tegucigalpa. En el 224 aniversario de la presencia del pueblo Garífuna en Honduras, la Organización Fraternal Negra Hondureña (OFRANEH), ratificó que no hay nada que celebrar y manifestó que las amenazas «de un tercer destierro violento e intencional» por parte del Estado de Honduras para favorecer intereses económicos continúa.
El comunicado publicado a través de su cuenta en Twitter señaló que «en los últimos 3 años más de 40 garífunas han sido asesinados y otra gran cantidad abandonaron sus comunidades por la violencia generalizada, amenazas, criminalización y persecución en su contra».
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Ante el incremento de agresiones contra el pueblo Garífuna, exigen el cumplimiento de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos a favor de las comunidades del Triunfo de la Cruz y Punta Piedra; un alto a las amenazas, persecuciones, criminalización y judicialización de las lideresas y líderes que defienden el territorio; así como un alto a los desplazamientos forzados.
Igualmente, rechazan la presencia militar en sus territorios bajo el argumento de «lucha contra el narcotráfico» que persigue como fin la militarización de sus comunidades y que finalmente deja una «estela de asesinatos, intimidación y terror en las comunidades, con el objetivo de apropiarse de los territorios y sembrar violencia» en las comunidades, lee el documento.
Exigen el retorno con vida del presidente del Patronato de Triunfo de la Cruz y miembro de la OFRANEH, Snaider Centeno, así como de Suami Mejía, Milton Martínez y Gerardo Trochez, quienes son víctimas de desaparición forzada, desde el 18 de julio de 2020, sin que a la fecha se de una respuesta concreta y especifica por parte del Estado sobre la investigación y búsqueda.
Además, reafirman su derecho de defender y permanecer en sus territorios. «Nuestra lucha por la defensa de nuestros territorios ha estado presente desde el 12 de abril de 1797, mucho antes de la independencia de Honduras en 1821. Por tanto, hoy más que nunca, reivindicamos nuestro derecho de pertenencia y propiedad colectiva de nuestros territorios ancestrales».
Finalmente, alertan a la comunidad internacional y entes veedores de derechos humanos sobre «el genocidio sistemático del que es víctima el pueblo garífuna, por parte del Estado de Honduras». El comunicado cierra aseverando que «hoy no celebramos, luchamos y resistimos ante el racismo estructural e institucional».
GARÍFUNAS TAMBIÉN TIENEN VOZ
Durante las actividades conmemorativas por el 224 aniversario de la presencia Garífuna en Honduras, miembros de esta comunidad en San Pedro Sula denunciaron que no se les permitió desarrollar las mismas ni en el Parque Central de esa ciudad, ni frente a la Catedral San Pedro Apóstol.
El coordinador de la OFRANEH en San Pedro Sula, Merlon Lino Ruiz, confirmó a Criterio.hn que la policía municipal de SPS no les permitió colocar pancartas al interior del parque y que personal de la Catedral les impidió permanecer frente a la fachada del templo.
Tras la doble negativa, quienes participaban en la actividad recurrieron a ejercer su libertad de expresión en la Tercera Avenida. «Nosotros como Garífunas tenemos voz. No se nos está escuchando un 12 de abril lo que estamos clamando. No tenemos nada que celebrar, lo que vivimos son secuestros, desalojos territoriales y personales, familiares, asesinatos, muerte, injusticia, un montón de cosas han estado sucediendo con la vida del Garífuna».
