carretera en la Biosfera del Río Plátano

COLPROFORH se pronuncia en contra de carretera en la Biosfera del Río Plátano

 

Tegucigalpa. – El Colegio de Profesionales Forestales de Honduras (COLPROFORH) a través de un pronunciamiento, manifestó su posición para frenar la destrucción de los bosques en la Reserva del Hombre y la Biosfera del Río Plátano, la Reserva de la Biosfera Tawahka Asangni y el Parque Nacional Patuca que representan la extensión continua más grande de áreas protegidas en Honduras.

El COLPROFORH condena el proceso sistemático y acelerado de la destrucción de los recursos forestales existentes en la Reserva de la Biosfera Tawahka Asangni, el Parque Nacional Patuca y la Reserva del Hombre y la Biosfera del Río Plátano y en el resto del territorio cultural de La Moskitia hondureña.

También, reclama al Estado de Honduras que a través de sus instituciones competentes pongan un alto de inmediato a la construcción de la carretera que amenaza la Reserva de Biosfera que es un patrimonio mundial, procediendo a su inhabilitación para ser transitada.

Señala que la construcción de la carretera es ilegal porque no cuenta con los permisos respectivos y que existe la amenaza de que esta carretera se convierta en una vía para facilitar el tráfico ilegal de recursos naturales y drogas. 

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Por otra parte, cuestiona al Estado de Honduras acciones inmediatas para reactivar con prontitud la subcomisión interinstitucional de titulación, ampliación, saneamiento y protección de los territorios y recurso naturales de la región de la Moskitia hondureña, que se conoce como “subcomisión Moskitia” y que estas instituciones no han cumplido con sus responsabilidades, por lo tanto, demandan que cumplan con sus funciones.

De igual manera, piden al Estado de Honduras respetar los acuerdos y tratados internacionales; y el fortalecimiento de las instituciones responsables de la aplicación de la legislación nacional e internacional que protege la Reserva del Hombre y La Biosfera Río Plátano como patrimonio de la humanidad.

Exigen que la Fiscalía del Ambiente actúe de oficio para investigar quienes son los causantes de los daños y proceda con base a la ley. Entre otros la apertura de la carretera sin los correspondientes permisos de ley, la participación de colonos como representantes ilegítimos de las organizaciones de los pueblos antes mencionados que facilitaron la apertura de la carretera, los invasores de tierras pertenecientes a los Concejos Territoriales, entre otros.

Además, piden que la Subcomisión Moskitia inicie un proceso para para el completo establecimiento de oficinas locales de sus secretarías de Estado respectivas, para garantizar la presencia institucional y desarrollar la gobernabilidad respectiva.

De la misma manera, solicitan a la cooperación internacional su total respaldo al pueblo hondureño en la lucha por salvaguardar las riquezas ancestrales, culturales y naturales; e instan al Estado de Honduras apoyar de manera complementaria, armonizando con las prioridades de país y la cooperación.

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De igual forma, en el pronunciamiento denuncian que sus agremiados se encuentran altamente amenazados por el ejercicio de sus funciones, tanto como empleados de instituciones de gobierno como de organizaciones no gubernamentales, así como del sector privado. A tal grado que en el 2014 fue asesinado el colegiado José Alexander Gonzales Cerros por oponerse a los daños que se estaban ocasionando en la biosfera, caso por el cual, aun no se ha hecho justicia por parte del Estado de Honduras y de igual forma, Jorge Emilio Salaverri Henríquez recibe amenazas por denunciar los daños en esta reserva.

Por último, exhortan a los pueblos originarios que coexisten en La Moskitia y que ancestralmente han vivido en armonía con la naturaleza para que puedan trasladar estos valores a las nuevas generaciones; asimismo, que sus organizaciones se mantengan unidos y vigilantes y prestos a denunciar los atropellos hacia sus recursos naturales que amenazan sus medios de vida.

  • Jorge Burgos
    Tengo algunos años de experiencia y me encanta practicar el periodismo incómodo que toque los tinglados del poder, buscando cambios en la forma de gobernar y procurar el combate a la corrupción, develando lo que el poder siempre quiere ocultar. jorgeburgos@criterio.hn

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2 comentarios

  1. En las reservas, donde la densidad de población humana es muy baja, y la población forestal o animal es muy alta, talar árboles para construir una pista de descarga de cocaína, un laboratorio de cocaína o sembrar cocaína, es un asunto que o se silencia o envía a los denunciantes al jardín del eterno descanso, en esto no hay militares o fuerzas policiales que lo detengan. A no ser que sean del «otro» cartel o competencia.
    Talar árboles maderables para su venta ilegal, siguiendo el mismo método que la cocaína, es muy similar al anterior.
    ¿Que más se puede decir?.

  2. Conocemos estos lugares, desde las Marias hasta Wawina, Wampusirpe, Krausirpi, dos Rios Plátano-Patúca (y afluentes) que son lugar de asentamiento de culturas muy antiguas, la ambición desmedida de unos; la pobreza, intimidación, creación de ignorancia de los otros, sumado a la corrupción y desidia del gobierno, que antes que a su población, objeto de sus servicios e inversiones, atiende los favoritismos partidistas, ávidos de ganancias y preeminencia social, para sacarle también ganancia económica, todos se han juntado como en la tormenta perfecta.
    Si hay una palabra que define lo que sucede allá es MIEDO.
    Miedo a denunciar.
    Miedo a informar.
    Miedo a hablar del tema.
    ¿Creen ustedes que con el actual *ILEGAL* y corrupto gobierno, que se ha tapado los ojos a la corrupción, porque son ellos los involucrados, se solucionara el problema?, ningún corrupto reconocerá que lo es, por tanto les decimos que NO cambiara nada, en todo caso un maquillaje, quizás sí.
    Si, hablaran bonito, esto sí, la gente quedaran satisfechas con largos e incomprensibles discursos, que a la postre dirán, que bien hablan, al regreso irán comentando, son unos mentirosos, toda la vida han hecho lo mismo.
    Mientras tengamos la situación política actual, donde la nota dominante es la corrupción, no esperemos ningún cambio.
    ¿Acudir a las fuerzas armadas?, no solucionara el problema, recuerdan las noticias que salieron hace ya años que se iban a enviar efectivos militares a Gracias a Dios para cuidar de los bosques, si efectivamente parece que llegaron, porque cuando uno visita Gracias a Dios, los ve enseguida, pero para que, nadie lo sabe.
    No es muy alentadora la situación y no promete cambios reales.
    Y no se ha tocado el tema de los colonos que han iniciado la mezcla poblacional en detrimento de la nativa, otro tema de interés. Hemos observado también que en los hogares mixtos se habla español no el misquito. La historia colonial no ha terminado aun en América Latina.