CIMEQH alerta sobre negocios turbios entre telefónicas privadas y Conatel

La organización gremial advierte sobre la enajenación del espectro radioeléctrico y las telecomunicaciones

Por: Redacción CRITERIO

redaccion@criterio.hn

Tegucigalpa. –El Colegio de Ingenieros Mecánicos, Eléctricos y Químicos de Honduras (CIMEQH) ha levantado su voz de alarma ante posibles pactos pocos transparentes y transgresiones a la ley que estarían beneficiando a las empresas que prestan el servicio de telefonía móvil o celular en contra de los intereses de los hondureños.

La organización gremial hizo la advertencia en relación al Decreto 33-2020 que contempla le Ley de auxilio al sector productivo y a los trabajadores ante los efectos de la pandemia provocada por el Covid-19”, aprobada en el Congreso Nacional  el 2 de abril, mediante la cual ese poder del Estado  facultó a la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) para que, a su libre criterio modifique los contratos suscritos con los operadores de telefonía celular, trasladando de esta manera una facultad exclusiva  del Poder Legislativo a una institución del Poder Ejecutivo.

Lea además: Honduras colapsada: Congreso autoriza deuda por $ 2.500 millones para ampliar contrataciones directas

La medida adoptada en el Poder Legislativo a petición del Poder Ejecutivo, fue argumentada como una necesidad ante la pandemia por el coronavirus, Covid-19 y beneficiará a las empresas transnacionales TIGO y CLARO, que son las que gozan de un ologopolio en la telefonía celular.

El CIMEQH señala en un comunicado que “ninguna autoridad tiene más facultades que aquellas que expresamente le otorga la ley. Las atribuciones del Congreso Nacional están taxativamente establecidas en el artículo 205 de la Constitución de la República y estas son indelegables”, dice el gremio de profesionales.

De esta manera el CIMEQH denuncia que la normativa autoriza que la modificación de contratos se haga de acuerdo mutuo entre las empresas de telefonía celular y Conatel, “excluyendo a otros posibles ofertantes, como si se tratara de un contrato  sin trascendencia en la vida nacional, sin hacer una valoración previa del espectro radioeléctrico en las actuales condiciones de mercado, por lo que demandamos que para realizar dicha valoración se integre una comisión técnica, en el que el CIMEQH y la sociedad hondureña estén representados”.

En aras de la transparencia el CIMEQH exige a Conatel lo siguiente:

1.-Que aclare en qué consiste el Plan Nacional de Banda Ancha.

2.-Que precise cuáles son la condiciones que se modificarán en los nuevos contratos, respecto a los contratos ya existentes.

3.-Que detalle concretamente cuáles serán los beneficios que recibirá el pueblo hondureño como consecuencia de la modificación de los contratos sobre todo la disminución de la tarifa telefónica y de qué manera se atenderán las demandas del servicio en los lugares más apartados del país.

4.-Que se indague cuánto percibirá el Estado durante la vigencia de los contratos y para qué serán desinados estos fondos.

5.-Limitar la vigencia de la modificación de contratos al tiempo que dure la emergencia, para no enajenar o hipotecar el futuro del espectro radioeléctrico y de telecomunicaciones.

Comunicado – Decreto 33-2020 pic.twitter.com/AiRTq4BpjU

— CIMEQH (@CIMEQH) April 9, 2020

RATIFICACIÓN

En virtud que la adjudicación de los nuevos contratos sobrepasará el actual periodo de gobierno, el CIMEQH recuerda que la Constitución de la República establece que debe existir la ratificación por parte del Congreso Nacional.

“Debe no cumplir con estas exigencias, quedará claro que, la coyuntura de la pandemia está siendo aprovechada para negociar y adjudicar los contratos en provecho propio de los que van a negociar y no en beneficio del pueblo hondureño al ceder el espectro radioeléctrico en condiciones desventajosas para Honduras y que el propósito del Decreto 33-2020 es amarrar los contratos con las empresas de telefonía celular, cerrando las puertas a la participación de nuevas empresas que puedan ofrecer mejores condiciones y la apertura de una competencia positiva”, concluye el CIMEQH.