Tegucigalpa.- Honduras es uno de los países con menor índice de inversión extranjera en la región, debido a la inestabilidad social ocasionada por las crisis que ha arrastrado con el paso de los años luego del golpe de Estado de 2009.
Los datos presentados el primer trimestre del año en inversiones extranjeras sigue siendo bajo en comparación con Costa Rica y Guatemala.
“La principal observación es que Honduras, lamentablemente, sigue siendo un país poco atractivo para las nuevas inversiones de capital en el país porque no se ofrece un clima de negocios estables”, detalló el asesor del Foro Social de la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras, Obed García.
García agregó que las intervenciones en los contratos de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), genera desconfianza, además, el incrementó del capital, presentado a principio de año, es gracias reinversión de utilidades y cuando se contrasta con el ingreso de nuevos capitales, se registra una salida de nuevos capitales por al menos de 113 millones de dólares.
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Otro factor que influye es el riesgo país, es decir, Honduras no ha tenido una buena estabilidad social después del Golpe de Estado de 2009 y elecciones de dudosa reputación.
“Desde el 2009 se creó una condición bastante difícil con una inestabilidad social derivada de una inestabilidad política, esa posición no ha podido cambiar porque lejos de eliminar la parte complicada de la inestabilidad se ha acrecentado la problemática, por ejemplo, lo fraudes en las elecciones”, detalló el economista Fredy Tejada.
De la estabilidad social depende que los reglamentos se respeten y garantiza que existan condiciones favorables para una rentabilidad aceptable en su inversión o retorno de la inversión, además, el deterioro del sistema educativo también es un factor que afecta la inversión porque no se cuenta con profesionales capaces para desenvolverse en áreas tecnológicas.
“Tenemos bastantes jóvenes que en su mayoría no están preparados o bien capacitados para asumir retos que requiere la inversión actual, por ejemplo, el conocimiento en aspectos tecnológicos”, destacó Tejada.
Por otra parte, el gobierno no ha desarrollado una política de atracción de inversiones ni estrategias, por el contrario, han complicado el panorama para futuros contratistas,por ejemplo, el cuestionable proyecto de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE), que no ofrece ningún tipo de transparencia.
Tejada agregó que este proyecto cuenta con contratistas de dudosa reputación, esto ha ocasionado que Honduras tenga una baja inversión y, a esto se suman, los casos de corrupción.
Expertos mencionan que antes se contaba con una inversión entre 1,100 y 1,200 millones de dólares. La desconfianza de los entes económicos también es motivo de la incertidumbre que existe en el proceso electoral y la debilidad institucional.
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“Es necesario establecer la gobernanza en todas las instituciones para que exista un mejor compromiso, mayor tran
sparencia, más responsabilidad de quienes las dirigen y que la toma de decisiones favorezcan los intereses de todos los ciudadanos y no solo los intereses particulares”, agregó la expresidenta del Colegio de Economistas de Honduras, Liliana Castillo.
La economía en Honduras se sostiene gracias a las remesas a esto se le llama la economía de la demanda interna porque el 90 por ciento de esas remesas se destinan a satisfacer las necesidades básicas de la población.
Castillo mencionó que Honduras necesita un capital fresco, es decir, que otra empresa o las mismas empresas que han constituido el país traigan un nuevo capital y no el mismo que han obtenido de utilidades.
Por su parte, el economista del Fosdeh, Ismael Zepeda, las complicaciones de la apertura de negocios, el tema burocrático y la revisión de documentos de inversionistas extranjeros desde el índice de competitividad que muestra parte de la infraestructura y evalúa costos de tiempo son elementos que demuestran la debilidad que tiene un estado.
“A pesar de tener condiciones favorables como la ubicación, zonas industrializadas, el tema del aeropuerto, además, Honduras es el país de la región con más gastos tributarios, es decir, exoneraciones fiscales, pero por temas de institucionalidad y el estado de derecho mismo vamos a seguir estancados”, finalizó Zepeda.
