Feministas entregan Ley Contra la Violencia y piden uso de PAE a gobierno de Xiomara Castro
Redacción: Viena Hernández
Fotos y edición: Jorge Burgos
Tegucigalpa. – Desde muy temprano las calles de Tegucigalpa se llenaron de mujeres enérgicas, con rostros alegres y sonrientes, su espíritu de guerra y lucha hacía juego con el ardor imponente del sol de verano, y los gritos de las consignas hacían eco con el viento y la música de trova que retumbaba en la conmemoración del Día Internacional de la Mujer.
Frente al Ministerio Público, mujeres de distintos movimientos y organizaciones hicieron un plantón desde las 8:30 de la mañana reclamando al ente por los femicidios y la falta de investigación. Los colores lucieron más vivaces que nunca, como si fuera evidente que hay nuevas esperanzas.
A pesar del panorama atroz que acecha cada día a la mujer hondureña, ellas parecían tener más deseos de exigir sus derechos, porque “el siglo de las mujeres es aquí y ahora”, se leía en una de sus pancartas.
En la parte del estacionamiento formaron un altar con flores blancas y amarillas, las mujeres , exigieron a los entes de justicia combatir la impunidad que ha permitido la violencia y los abusos en la vida de todas las mujeres hondureñas.
Con beligerancia, la coordinadora de la organización, Carmen Castro, tomó su micrófono y habló a la vez con Criterio.hn; se mostró preocupada, al mencionar que en Honduras las mujeres son asesinadas como si se tratara de un país en guerra.
El Observatorio de Violencia Contra las Mujeres del Centro de Derechos de Mujeres (CDM), contabilizó 61 muertes violentas de mujeres hasta el ocho de marzo de 2022.
La reacción de Castro fue inmediata, “la vida de la mujer debe ser respetada, y debe indemnizarse a las familias de las víctimas”, dijo y, además, exigió proteger a los niños que quedan huérfanos, atenderlos psicológicamente, porque incluso han matado a sus madres frente a ellos y deben vivir cada día con esa fatal escena en sus pensamientos.
Las mujeres son parte de la unidad familiar, tienen hijos, padre y madre, su familia queda destruida y desarticulada, con mucho dolor y sin atención, cuando el Estado está obligado a responder y los entes de justicia a investigar y esclarecer cada feminicidio.
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IMPUNIDAD, CULTIVO DE VIOLENCIA
El observatorio de los derechos humanos de las mujeres del CDM, desglosó nueve tipos de agresiones que sufren las mujeres cada día en Honduras, un país caracterizado por el machismo y marcado por delitos graves contra la mujer.
Todos son de gravedad, pero los más relevantes son los que se acompañan de mayor violencia, resaltan que, en su mayoría, el 53 por ciento fueron feminicidios y, el 29 por ciento, fueron víctimas de violación sexual.
“Hasta en tu casa te sentís insegura”, remarcó Castro, quien mencionó que las mujeres deberían salir de sus casas sin temor, a eso sumó, los casos olvidados de jóvenes que aparecen muertos dentro costales o lanzados en solares baldíos.
Recordaron el feminicidio de Keyla Martínez, quien falleció bajo custodia de la Policía Nacional el seis de febrero de 2021, de nuevo, exigieron investigación, justicia y rendir un informe detallado de los hechos reales del caso.
Varios números menos, pero igual de preocupante, es que el seis por ciento fue violada y también víctima de feminicidio, otro seis por ciento de las mujeres siguen bajo amenaza por intento de homicidio.
El tres por ciento sufrieron lesiones físicas y el dos por ciento murió durante un homicidio múltiple. Entre las últimas cifras de mujeres, el uno por ciento, ha sufrido actos de lujuria y otro uno por ciento están desparecidas.
“La impunidad es el caldo para el cultivo de la violencia”, dijo la defensora de los derechos de la mujer, y añadió que las autoridades están obligadas a dar respuesta porque son servidores del pueblo.
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SEMANA DE ACUERDOS Y ELIMINAR PROHIBICIONES
Todos los organismos y movimientos femeninos tenían como destino conglomerarse frente a Casa Presidencial, el morado en su vestimenta hizo recordar las luchas, representa feminismo, justicia y dignidad, se remonta a inicios del siglo XX, afín a las sufragistas, mujeres que exigieron el derecho al voto.
Pero según la historia el uso del morado recuerda el ocho de marzo de 1908, día que marcó la lucha sindical y la historia del trabajo, cuando más de 120 mujeres murieron calcinadas en el incendio provocado de la fábrica Cotton, en Nueva York, Estados Unidos, cuando se declararon en huelga, se dice que el humo que salía era morado debido a las telas quemadas.
Las mujeres una vez más demostraron que en unidad se ganan las batallas, colocaron sus puestos de atención sanitaria para: pruebas rápidas de VIH, actividades para niños, asesoría legal, salud mental, entre otros.
Una de las pancartas que agitaba una de las mujeres, decía: “¡Queremos ser niñas no madres!”, en ese momento, casi a las 11:00 de la mañana, las integrantes del movimiento feminista ingresaron a Casa Presidencial para reunirse con la primera mujer presidenta Xiomara Castro.
Las designadas fueron Jinna Rosales de Acción Joven, Ana Ruth García de Ecuménicas por el Derecho a Decidir y Regina Fonseca del Centro de Derechos de Mujeres (CDM), ellas entregaron un proyecto de ley integral contra la violencia hacia las mujeres.
También presentaron un protocolo de atención integral a víctimas y sobrevivientes de violencia sexual para su aprobación y su implementación por parte de la Secretaría de Salud, además de las firmas de apoyo ciudadano a la derogación de la prohibición de la anticoncepción de emergencia(PAE).
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DERECHO A DECIDIR
Entre baile, risas y selfies, las mujeres esperaban que esta reunión se desarrollara con éxito, ellas comentaban que es un gran inicio ser recibidas por la presidenta y destacaron que no se habían sentido tan acogidas por el gobierno como en este día.
Sin embargo, la coordinadora del Observatorio de Centro de Mujeres, Helen Ocampo, lamentó conmemorar el Día Internacional de la Mujer, con la marca de 61 feminicidios en lo que va de 2022, siendo el segundo país de Centroamérica con mayor índice de violencia, solo después de Guatemala.
“Las mujeres estamos en condiciones de alta vulnerabilidad por la impunidad ante cualquier caso de violencia”, entre estas la psicológica, doméstica, hasta llegar a la muerte violenta, de la última, la mayoría, en Francisco Morazán donde se reportan 15 y nueve en Cortés.
En los últimos 10 años las mujeres jóvenes, entre 20 y 29 años, representan la mayoría de mujeres asesinadas.
Las estadísticas del CDM, señalan que, al finalizar el mes de enero de 2022 el Sistema Nacional de Emergencia (911) registró tres mil 216 denuncias de violencia doméstica y cuatro mil 965 denuncias de violencia intrafamiliar.
El 911, aunque registra muchísimas denuncias ya sea de testigos de violencia o de quien la sufre, al redireccionar las llamadas de emergencia a la Policía, dijo que a veces reaccionan con agilidad, pero durante el encierro por pandemia los casos se dispararon y no se actuó de oficio.
En Honduras existe 95 por ciento de impunidad y las condenas por feminicidios son muy pocas.
El Día Internacional de la Mujer, según explicó Helen Ocampo, es para conmemorar y exigir cambios para reducir y erradicar las muertes a mujeres.
El hogar es la primera escuela y las iglesias no deberían intervenir, sobre todo, de forma tan radical cuando se trata del derecho a decidir de las mujeres, sino fomentar la autonomía que cada una tiene sobre sus cuerpos.
Al gobierno le recordaron cumplir las promesas de campaña, despenalizar la PAE y atender los proyectos feministas y de la comunidad LGBTIQ+.
Las amigas de décadas, Wenceslaba Urbina y Ofelia Varela, contaron a Criterio.hn que se sienten incluidas, con las puertas abiertas y aplauden que estén dando indicios de permitir la participación de las mujeres.
Ambas se hicieron análisis médicos afuera de Casa Presidencial, forman parte de Mujeres Guerreras, integrado por más de 200 mujeres a nivel nacional.
Recuerdan que llegaron bajo la iniciativa de Blanca Flores quien impulsó los proyectos sociales de mujeres en la organización.
Ellas son testigo de la llegada mujeres que han sufrido distintos tipos de agresión. “Ahora hay más violencia que en aquellos tiempos”, intervino Urbina, quien compartió que su esposo nunca fue violento con ella, pero observa jóvenes parejas que desde el noviazgo conviven en violencia porque fueron criados bajo ese círculo.
En la mayoría de los casos se desconoce al agresor, la mayoría de denuncias, hasta el 31 de enero, 938 son por violencia doméstica en el departamento de Francisco Morazán y 1,369 de violencia intrafamiliar en Cortés.
Los instrumentos para atacar y quitarle la vida a las mujeres más utilizados por los victimarios son las armas de fuego y, en segundo lugar, utilizan las armas blancas.
Urbina, de 75 años, dijo que las mujeres merecen respeto a sus derechos, justicia y deberían decidir cuántos hijos dar a luz porque así se les garantizan mejor calidad de vida y educación. A su vez, remarcó que una mujer violada debería tener derecho a abortar, sobre todo, cuando la agredida es una niña.
En el calor del mediodía, las mujeres continuaron reunidas y animosas, entre ellas siguieron conversando de las expectativas que tenían a corto y largo plazo, se escuchaban comentarios sobre “¡ahora sí, el futuro es feminista!”.
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