Hernández

Entérese que es y cómo se gesta la ilegal candidatura de JOH a la Presidencia de la República

Por: Redacción CRITERIO

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El presente es un trabajo del ERIC-SJ, elaborado por Joaquín Mejia Rivera,  que hoy reproducimos y adecuamos en Criterio.hn tratando de dar luces al pueblo hondureño e internacional sobre la ilegal reelección del presidente de Honduras Juan Hernández

  1. Una medida ilegal e ilegítima

Uno de los temas más discutidos en los últimos meses es el de la reelección presidencial. La Corte Suprema de Justicia ha dado vía libre para que el actual Presidente pueda presentarse de nuevo a las elecciones y volver a ser elegido. Y el Gobierno y sus voceros dicen que la reelección es legal, pues obedece a una decisión de la Corte Suprema.

Antes que todo, es necesario aclarar que lo que parece legal no siempre es legítimo. Pensemos, por ejemplo, en las leyes que los nazis redactaron para encarcelar y asesinar a los judíos; o en las que amparaban a los españoles en tiempos de la conquista para quitarle sus tierras a los indios. Esos actos eran legales, pues había leyes que los permitían, pero no eran legítimos. En otras palabras, no eran justos.

A continuación vamos a analizar por qué la sentencia que permite la reelección presidencial en Honduras no es legal ni legítima. Es una sentencia injusta, que debilita la democracia y nos vuelve más vulnerables ante quienes manejan a su antojo el Estado, sin pensar en el bien común.

  1. Reiterados ataques a la democracia en Honduras

En primer lugar, es importante tener en cuenta que no llegamos a este punto por pura casualidad, ni de un día para otro. Juan Orlando Hernández empezó a acumular poder desde el mismo día en que fue escogido presidente del Congreso Nacional, allá por el año 2010.

No hay que olvidar que, en los últimos ocho años, la democracia hondureña ha sufrido al menos tres ataques muy serios. Las consecuencias son un grave deterioro de los derechos humanos y el debilitamiento de las instituciones de la República, lo que significa, en la práctica, más vulnerabilidad para la población.

La primera de estas arremetidas contra el Estado de derecho, la más impactante y directa, fue el golpe de Estado de junio de 2009, que expulsó del poder y del país al expresidente Manuel Zelaya. Esta ruptura del orden constitucional fue un punto de quiebre para nuestra frágil democracia, que desde entonces quedó mal herida.

Pero la cosa no acabó ahí. En 2012, siendo Juan Orlando Hernández presidente del poder legislativo, el Congreso destituyó, de forma ilegal, a cuatro magistrados de la Corte Suprema de Justicia, y nombró a otros que eran partidarios de su propuesta sobre las ciudades modelo.

De este modo, se violentó abiertamente la separación de poderes sobre la que se asienta un Estado democrático. Las consecuencias de este suceso también fueron desastrosas porque, desde entonces, el poder ejecutivo controla el poder judicial.

El tercer y último episodio de esta serie de graves alteraciones del orden constitucional son las maniobras para hacer posible la reelección presidencial de Juan Orlando Hernández.

Estos hechos no están desconectados entre sí. En realidad, obedecen a una misma lógica. Los mismos actores que dieron el golpe de Estado en 2009 y que irrespetaron la separación de poderes en 2012, están ahora defendiendo con uñas y dientes la reelección presidencial.

Además, acallan toda posibilidad de diálogo. Cuando surgen voces criticando la reelección y exigiendo respeto a la Constitución, su único argumento es decir que la Corte Suprema ya se pronunció, que es cosa juzgada y que ya no hay más que discutir.

Pero la reelección, tal como la ha aprobado la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema, es una clara violación de la Carta Magna. Por tanto, es ilegal e ilegítima. En otras palabras, una traición a la soberanía popular, que reside en el pueblo.

  1. Los derechos políticos, pilar de la democracia

Uno de los elementos esenciales de toda democracia son los derechos políticos de la ciudadanía. Los derechos políticos son básicamente dos: el derecho a ser elegido y el derecho a elegir.

De estos se desprenden normas y procedimientos que cada país dispone de acuerdo a su historia y a sus necesidades para, entre otras cosas, celebrar elecciones libres y democráticas donde la ciudadanía escoge a sus representantes. Y para que las elecciones sean libres y se ajusten a las condiciones de una democracia, tienen que darse al menos tres características: autenticidad, periodicidad y universalidad.

La autenticidad se da cuando hay condiciones adecuadas en las que la ciudadanía no se siente presionada ni coaccionada para ejercer sus derechos políticos con total libertad. Es decir, para presentarse a un cargo de elección popular o para votar por el partido y la persona que prefiera.

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La universalidad se refiere a que todos los ciudadanos y las ciudadanas pueden participar en la elección: tanto para ser elegidos como para elegir. Hay algunas excepciones a este principio de universalidad. Por ejemplo, cuando una persona ha sido privada de libertad por cometer un delito, no puede votar ni ser electa.

La periodicidad significa que nadie puede quedarse en el poder sin un límite preestablecido y acordado socialmente. En otras palabras, el derecho a ser elegido puede limitarse, si así lo establece la Constitución de un país siempre que no se restrinjan los derechos políticos básicos

Los artículos pétreos de la Constitución

Honduras, como cualquier país democrático, se rige por leyes que todos debemos cumplir. Por supuesto, estas leyes pueden cambiar a medida que la sociedad cambia. Pero los artículos de la Constitución, que es la madre de todas las leyes, no pueden modificarse tan fácilmente.

Incluso hay algunos que —por ser fundamentales y constituir los cimientos de nuestro ordenamiento jurídico—, no pueden reformarse sin que se pronuncie el pueblo soberano: son los llamados artículos pétreos.

Para entender bien qué son los artículos pétreos, hay que distinguir entre poder constituyente y poder constituido. El poder constituyente es el pueblo soberano, del cual emana toda autoridad. El poder constituido son las instituciones que nos representan; o sea, aquellas que ostentan el poder en nuestro nombre. Por ejemplo, el Congreso Nacional, el Gobierno o la Corte Suprema son poderes constituidos.

Según la Constitución, las cláusulas o artículos pétreos solo puede cambiarlos el poder constituyente; es decir, el pueblo. Y la no reelección del Presidente de la República es un artículo pétreo de nuestra Constitución. Por tanto, lo lógico es que se abriera un debate amplio, que se consultara a la ciudadanía, y que esta tuviera la última palabra.

La sentencia tramposa de la Corte Suprema

La Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia declaró que el artículo constitucional que prohíbe la reelección presidencial no debe aplicarse. Para ello argumentó que este artículo limita los derechos políticos reconocidos en los tratados internacionales de derechos humanos, como la Convención Americana.

Sin embargo, este es un argumento falso. Sucede que en materia de derechos políticos, la Convención Americana no impone cómo se debe votar o ser electo en cada país. La Convención solo da orientaciones generales sobre los derechos políticos que todos los países de América deben promover y respetar.

A partir de esas orientaciones, cada país debe redactar sus propias leyes de acuerdo a su contexto y sus necesidades históricas. En otras palabras, los derechos políticos son los mismos para todas las naciones, pero cada país tiene su propia realidad y debe adaptarlos a la misma.

¿Cómo hacer esta adaptación? La Convención sugiere lo que se llama un test tripartito. Este test tiene como finalidad que, cuando se propone una restricción a un derecho político, como es el caso de la reelección, se valore tres cosas: su legalidad, su necesidad y su proporcionalidad. En resumen, la Convención recomienda que, cualquier cambio que se haga, se adecúe a la realidad de cada país.

Y nuestra realidad es la de una larga historia de autoritarismo, ingobernabilidad y violencia política. Es por ello que Honduras, al igual que otros países de la región, prohibió la reelección presidencial desde 1907, como una vacuna contra el despotismo y la tiranía, que tanto daño han hecho a Centroamérica. Desde entonces, para los países centroamericanos, ha sido importante garantizar la alternabilidad en el poder.

Así, no es una casualidad ni un capricho que nuestra Constitución prohíba la reelección. Quienes aprobaron la Constitución en 1982, lo hicieron así porque conocían nuestra realidad, querían preservar la democracia y evitar que nadie tuviera la tentación de perpetuarse en el poder.

En otras palabras, el Estado de Honduras tiene la potestad de prohibir la reelección como para admitirla. Todo depende de lo que convenga según nuestras necesidades históricas.

Pero, repetimos: para cambiar una norma tan importante, es necesario que se pronuncie el poder constituyente. O sea, que el pueblo diga la última palabra.

  1. La obligación de alternar el poder

El artículo 4 de la Constitución de la República establece que la alternabilidad en el ejercicio del poder ejecutivo es obligatoria.

Esto quiere decir que, incluso si admitiéramos la reelección y diéramos por bueno el fallo de la Corte, el único ciudadano que precisamente no podría presentarse como candidato sería el actual presidente, pues este artículo lo inhabilita para estar dos periodos seguidos.

El artículo 4 no ha sido anulado por la Corte Suprema, de manera que, como ha dicho el Dr. Edmundo Ore-llana:… aunque aceptáramos el absurdo de que la sentencia de marras es legal, tendríamos que convenir, entonces, que el único que no puede postularse como candidato a presidente es el actual presidente, porque se lo impide el principio dela alternabilidad en el ejercicio de la presidencia.

Conclusión

En resumen la Corte Suprema de Justicia, el Congreso Nacional y el Tribunal Supremo Electoral, están actuando de forma ilegal e ilegítima, puesto que se están atribuyendo poderes para los cuales no están facultados.

Como hemos visto, la reelección presidencial solo sería posible si la aprobara el pueblo hondureño por medio de un plebiscito.

De acuerdo con el artículo 25 del Código Penal, el Ministerio Público debería perseguir y acusar a los funcionarios responsables de esta violación por traición a la patria, abuso de autoridad y violación de los deberes de los funcionarios.

Sin duda, nos encontramos en un momento plagado de autoritarismo. Solo una ciudadanía activa, crítica y consciente de sus derechos, podrá detener “la dulce dictadura” que comenzó a instaurarse desde 2009 y que, a todas luces, se va convirtiendo se va convirtiendo en una dictadura en toda su crudeza.

  • Emy Padilla
    Me encanta desafiar el poder y escudriñar lo oculto para encender las luces en la oscuridad y mostrar la realidad. Desde ese escenario realizo el periodismo junto a un extraordinario equipo que conforma el medio de comunicación referente de Honduras para el mundo emypadilla@criterio.hn

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17 comentarios

  1. No hay duda que la corrupción en Honduras llego a su punto culminante, LOS LADRONES se han apoderado de el país, y el líder de esta banda de ladrones que se escuda en un partido politico es el mas corrupto de la historia de Honduras, imposible que se llegue mas lejos en corrupción que este grupo de cerdos y ratas malparidos, sin duda son ratas y cerdos nacidos de ratas y cerdos.

  2. Así es como dicen arriba solo los imbeciles van a votar por ese ladron corrupto y si lo hacen ganar en sus conciencia caerá y si llegamos a ver los listados de quienes fueron los deberían de perseguir por traidores igual que el hdp de Joh

  3. pues es bien logico en honduras no mas dice rusia isquierdismo,,salen como si el diablo se los esta llevando,,porque por la maldita ignorancia,,muchos paises de isquierda an sido mas beneficiados que cuando an estado con gobiernos al lado del imperialismo,,en honduras nos an hecho curtidos en meternos ,ala hueva que estados unidos es la solucion y el rescate en cual ellos mismos nos an metido,,a lo que se yo nunca en la vida OH emos vivido bajo un gobierno isquierdistas,,,pero si vemos las logica,porque esas malditas familias que SON 16 Y QUE DOMINAL AL PAIS POR CASUALIDA MALDITOS PALESTINOS DE MIERDA QUE dicen amar al pais esos oligarcas porque PUTAS MANDAN A SUS MUJERES EMBARAZADAS A PARIR A ESTADOS UNIDOS,,SI ES VERDAD ESTAMOS DOMINADOS POR ESTADOS UNIDOS POR HIJOS DE PUTAS QUE UTILIZAN A MI PAIS POR SUS INTERECES MESQUINOZ,,PORQUE NI SOS PROPIOS HIJOS PORQUE NI NACEN EN HONDURAS EL DINERO ES TANTO QUE LES DA VERGUENZA QUE LOS LLAMEN HONDURENOS SOLAMENTE SI ES POR SS INTERECES NACEN EN HONDURAS, ESOS SON LOS MALDITOS PALESTINOS ESOS QUE LE EH EMOS DADO TODO POR SU MALDITA GUERRA DE RELIGION,,QUE SE VAYAN ALA PUTA MADRE PALESTINA QUE ELLOS SERAN CULPABLES SI EXIETE UNA GUERRA CIVIL EN HONDURAS,,DESPUES QUE NO SE ARREPIENTAN Y QUE SUS GENERACIONSE NO SE ARREPIENTAN DE SUS GENES MALIGNOS EN EN SUS ANTECEDORES NOS AN METIDO

  4. Solo miércoles Salvador sabe hablar este animal porque hombre le queda muy grande y ese nombre siempre tiene una mentira que decir. La verdad es que si este hombre llegaria al poder seria pura brujeria porque quien va a querer esta porqueria de presidente y si siempre cambia lo que dice nada creible tiene. SÓLO BASURA HABLA ESTE «TRASTORNADO DE «M» Presenta pruebas contundentes, sólo de eso hablan, enganchando a un montón de bayuncos¡ Que no tienen la capacidad de darce cuenta que estos parásitos se mueren por el poder. Pobre país con estos partos. y de chascada dudosos de su personalidad. Es lo que ha hecho la Nasralla siempre criticar, criticar y el en los cuarenta años de comediante nunca a hecho nada por el pueblo Hondureño. El plan presentado por JOH basado en 7 ejes, es de desarrollo y crecimiento para el país. Sr. Nasrralla, proponga cosas y hechos relevantes que ud hara en su gestion como presidente de Honduras. Brille con luz propia, el criticar, sacar a relucir los herrores de los demas es una cuestion dqno etica en una persona y juzguemos nuestros propios actos. ?????⭐⭐⭐⭐⭐ ?? ?? ?? ?? ??

  5. La desgracia mayúscula es que justamente este hombrecillo es ESTUDIOSO DEL DERECHO, junto con gente como el eterno parásito catedrático constitucionalista OSWALDO RAMOS SOTO, FERNADO ANDURAY, entre otros irrespetuosos abogados, juristas, legisladores, miembros del CAH que viven refiriéndose a la remendada Constitución de la República, desacatándola, colodándonos como el país más ignorante del mundo… jurando a pie juntillas que aman a Honduras… necesitamos unos cuantos héroes que como en tierras lejanas, se INMOLEN frente a tanto APATRIDA que lo que menos atienden es el BIEN COMUN. Causa ESTUPOR vivir rodeado de estos seres abusivos y violadores no sólo derechos humanos, sino aprovechados de la limitada instrucción que no sólo en este tema, adolece la mayoría del pueblo hondureño.