Tegucigalpa. – A pocos días de las elecciones, el proselitismo sigue desempolvando sus viejos artilugios para conseguir la mayor cantidad de votos disfrazados de asistencia social.
El gobierno de Honduras es experto en recurrir a esas prácticas que coadyuven a mantener en el poder al Partido Nacional y en esta ocasión mediante la dotación de un nuevo bono de 7,000 lempiras para asistir a 234,579 hogares, es decir, 1,142,400 personas que vivan en comunidades afectadas por los fenómenos naturales producto del cambio climático.
La ayuda surge a un año del paso destructivo de los huracanes ETA e IOTA, cuando la situación de Honduras estuvo en estado de emergencia y se estimó un impacto de más de 52.099 millones de lempiras, según datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
La medida entró en vigor el 1 de octubre pasado con la publicación en el diario La Gaceta del Decreto PCM-103-2021 que contempla el “Bono de alivio a familias vulnerables afectadas por fenómenos naturales producto del cambio climático”, que se adhiere a la plataforma “Vida Mejor”, que maneja la Secretaría de Desarrollo e Inclusión Social (SEDIS)
La bonificación es parte del contrato de préstamo número 2282 suscrito el 20 de agosto de 2021 entre el gobierno de Honduras y el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) por un monto de US$ 70 millones (unos 1,680 millones de lempiras).
El decreto gubernamental no especifica las comunidades que serán beneficiadas con la ayuda, se limita a indicar que será la SEDIS la responsable de “los lineamientos operativos como ser la identificación de hogares elegibles, selección del hogar, entrega del beneficio y selección geográfica para la transparencia en el uso de los recursos”
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El gobierno de Juan Hernández ha sido denunciado e incluso investigaciones de la MACCIH establecieron en el pasado reciente que varios proyectos sociales habían sido utilizados por organizaciones no gubernamentales para drenar fondos del Estado e instancias de sociedad civil han registrado que el clientelismo político es disfrazado por asistencia social, por el Partido Nacional en tiempos de campaña electoral.
En consonancia con las denuncias, el pasado 26 de octubre, se aprobó mediante Decreto Ejecutivo PCM 118- 2021 la ampliación presupuestaria al ente del gobierno encargado de ejecutar los proyectos sociales con la supuesta finalidad de entregar a 170,000 hogares un bono único de 7,000 lempiras bajo el Bono Vida Mejor “Bicentenario”.
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“Por el tema de campaña electoral están poniendo en marcha los mecanismos clientelistas de los programas sociales”, dijo escuetamente a Criterio.hn el economista del Foro Social de la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (Fosdeh), Ismael Zepeda.
“Casualmente a días para “celebrar” un año de los huracanes Eta e Iota el gobierno se “acuerda” de las familias impactadas con un “bono climático”, escribió en su Twitter Zepeda.
Honduras fue en la última década el segundo país del mundo con mayor afectación al cambio climático, un fenómeno que provoca falta de agua, cambios en la producción de alimentos y aumento en los índices de mortalidad por falta de víveres, inundaciones, tormentas, sequías y olas de calor.
La Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) en Honduras estimó que alrededor de 1.2 millones de hondureños se encuentran en la fase tres en la Clasificación de Inseguridad Alimentaria por Fases (CIF). El mayor impacto lo ubicaron en los municipios del denominado Corredor Seco.
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Al anunciar el préstamo el presidente ejecutivo del BCIE, Dante Mossi, destacó “con esta iniciativa reafirmamos nuestro compromiso de continuar trabajando por mejorar la calidad de vida y bienestar de las familias centroamericanas al dar respuestas rápidas a las situaciones más críticas con iniciativas para cubrir necesidades básicas a familias vulnerables y que incentiven la reactivación de la economía nacional”.
Pero, para Magdaleno Flores, presidente del Consejo Indígena Lenca de Reitoca, un municipio ubicado en el sur del departamento de Francisco Morazán, una de las zonas más afectadas por el cambio climático, este tipo de bonificación nunca llega a los sectores necesitados y es solo un espejismo para comprometer a las personas más vulnerables con el ejercicio de su voto.
“Ninguna de las personas que trabajan en la defensa de los bienes comunes, de los derechos humanos reciben bonificación, sí sabemos que llegan bonos y ayudas, pero solo lo hacen con personas que están dispuestas a apoyar el Partido Nacional”, dijo Flores al contar la experiencia que se vive en su comunidad, a más de 80 kilómetros de Tegucigalpa.
El líder comunitario denunció que en realidad no se está apoyando a las personas para que mejoren su calidad de vida y que este tipo de ayudas solo aparecen en años de elecciones, como está ocurriendo en Reitoca donde hace unos días llegaron empleados del gobierno a repartir dinero en efectivo, en cantidades que oscilaban entre 7 mil a 20 mil lempiras. Pero este monto se entrega de manera selectiva, aclaró.
En la mayoría de los casos la ayuda ni siquiera refleja los altos presupuestos que se han aprobado para bonos solidarios como Vida Mejor o el actual bono climático. La ayuda, dice Magdaleno, es tan superficial que a las personas de su municipio solo les proporcionan entre dos a tres láminas de zinc.
“Le dan del zinc más barato y más delgado, eso es puro engaño que le hacen a la pobre gente y lo hacen totalmente político. Le piden su tarjeta y lo anotan después de que usted compromete el voto con eso, así lo trabajan”, aseveró.
El artículo dos del PCM señala que el “bono climático” tiene como meta atender hasta un máximo de 234,579 hogares seleccionados, con una única transferencia monetaria de 7,000 lempiras por participante.
Este bono que está adherido al programa asistencial “Vida Mejor”, debe manejarse con transparencia, reza el artículo siete del decreto PCM que manda a la Secretaría de Estado en el Despacho de Transparencia a acompañar todo el proceso de materialización de entrega, como veedores para que toda la información sea de conocimiento de la población, a través de los portales de transparencia.
Pese a que el nuevo esquema de asistencialismo está vigente desde hace más de un mes, los portales de transparencia, específicamente el de la Secretaría de Transparencia y de la Secretaría de Desarrollo e Inclusión Social (SEDIS) no cuentan con información sobre el tema.
Un comentario
J. Orlando y sus SEDIS, son tan descarados, inutiles y faltos de criterios para ayudar a que entre todas salgamos de estas honduras de corrupcion y miseria, que nos gustaria verlos a ellos pidiendo limosna en una de nuestras calles, mientras nosotros les damos un sanwich de mortadela con mostaza.