Tegucigalpa. –El diputado del oficialista Partido Libertad y Refundación (Libre), Marco Eliud Girón ratificó la creación de una bancada disidente a lo interno del Congreso Nacional bajo el liderazgo del diputado Jorge Calix, decisión que podría encaminar a nuevas crisis política a las puertas de la elección de los nuevos magistrados de la Corte Suprema de Justicia.
Girón detalló este jueves en medios de comunicación que alrededor de una veintena de diputados rojinegros concluyeron conformar una bancada paralela a la del Partido Libre, pero adherida a los lineamientos partidarios y en respaldo del gobierno de Xiomara Castro.
“Vamos a estudiar a profundidad los decretos que envíen los sectores, puede ser que en la mayoría de los casos votemos como lo hemos estado haciendo los 50 diputados de Libre, pero ahora, en algunos casos, nos abstendremos”, aseveró.
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Cálix será quien lidere la bancada de diputados insurgentes y su agenda respondería a presionar al gobierno para lograr la inclusión en el gobierno de los colectivos de base del partido y que se cumplan sus exigencias de empleo.
“Esta bancada permanece dentro de las filas del Partido Libertad y Refundación y vamos a apoyar la gobernabilidad del gobierno de Xiomara Castro”, arguyó Girón.
Ante la interrogante si reconocerán a Luis Redondo como presidente del Congreso Nacional, Girón detalló que serán los “organismos competentes” quienes deberán determinar su legitimidad o legalidad.
El diputado responsabilizó al expresidente, coordinador del Partido Libre, asesor presidencial y esposo de Castro, José Manuel Zelaya Rosales de ser el promotor de la división dentro de la bancada que era conformada por 50 diputados y ahora se fraccionará con la bancada de los disidentes.
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ELECCIÓN DE NUEVA CORTE Y FISCAL GENERAL ARRASTRARÁN NUEVA CRISIS
Posterior a la segunda quincena del mes de junio, el Congreso Nacional iniciará la convocatoria a la Junta Nominadora para la selección de candidatos a magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), se reformará la normativa de selección que concluirá con los 45 nominados para que sean los diputados quienes elijan mediante votación a los 15 que integrarán el Poder Judicial. Este proceso deberá concluir el 25 de enero de 2023 con la elección de los magistrados para el periodo 2023-2030.
La división entre los diputados de Libre surge en medio de la coyuntura para definir la elección de los magistrados y otros cargos como el fiscal general y adjunto lo que analistas consideran como medidas de presión para alcanzar cuotas de poder.
“Se están posicionando para negociar magistrados, todo mundo quiere sus magistrados porque le dan posibilidad de impunidad o tener cuotas de recurso humano en el Poder Judicial, hay muchos intereses de los partidos políticos. Pueden negociar, si les garantizan un par de magistrados, estos diputados disidentes se sienten excluidos, ellos ya no ven una unión, ven la posibilidad de tener sus cuotas”, expuso Lester Ramírez, director de gobernanza y transparencia de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ).
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Para el director del Instituto Holandés para la Democracia Multipartidaria (NIMD por sus siglas en inglés), Luis de León, se augura una crisis en caso que las fuerzas políticas representadas en el Congreso Nacional no logren subsanar sus divisiones de cara a la elección de magistrados.
“Una crisis si no se logran ponerse de acuerdo internamente en el corto plazo y después entablar un diálogo multipartidario. La elección de la Corte Suprema de Justicia va a ser una crisis. Es evidente que va a haber una repartición, Libre va a querer la mayor cantidad de magistrados, el Partido Nacional y los Liberales van a querer lo suyo y por qué, PSH (Partido Salvador de Honduras) no los suyos”, considera.
De León deja entrever que la división en el partido de gobierno se está dando coyunturalmente, pero advierte que “no podemos descartar cómo funcionan los políticos hondureños” que pueden elaborar crisis.
“Lo que es un hecho es que la elección de los magistrados es la puerta a solventar los problemas de la democracia hondureña o llevarnos a una crisis”, cerró.
RESURGEN FACCIONES DE INSURGENTES
Antes de las elecciones generales de noviembre de 2021, la presidenta Castro, en ese momento candidata presidencial, pactó una alianza de hecho con Salvador Nasralla candidato presidencial del PSH quien declinó a su pretensión política y se unió a la planilla del Partido Libre con la finalidad de derrotar al conservador Partido Nacional.
Nasralla pactó apoyar la candidatura de Castro a cambio que, en caso de ganar las elecciones, un diputado de su partido político sería ungido como presidente del Congreso Nacional.
Castro logró ganar las elecciones de forma contundente y puso fin a doce años de gobierno del conservador Partido Nacional. El Partido Libre alcanzó 50 escaños dentro del Poder Legislativo mientras que el PSH 10, no obstante, 22 diputados rojinegros desconocieron el acuerdo y promovieron al diputado Cálix para ser el presidente del Congreso.
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Esto generó que en paralelo se instalaran dos Juntas Directivas, una que presidió el diputado Luis Redondo, ungido por Nasralla y respaldado por Castro y la otra al mando de Cálix ,quien contó con el respaldo de los diputados del Partido Nacional y la mayoría del Partido Liberal a quienes siempre consideró parte del crimen organizado y el narcotráfico, pero que se convirtieron en sus aliados.
Las autoridades del Partido Libre determinaron expulsar a los disidentes y Redondo tomó posesión de la sede del Legislativo, mientras Cálix se impuso desde la virtualidad, práctica a la que recurrió de manera arbitraria el Partido Nacional para aprobar, reformar o derogar leyes bajo el pretexto de la pandemia de la covid.
Mientras la crisis se mantuvo por varios días, Zelaya Rosales, desde Casa Presidencial, logró llegar a acuerdos con los diputados disidentes y con Cálix, quien declinó a sus anhelos de regir el Congreso y todos retornaron a las filas del partido.
Por su parte los diputados nacionalistas y liberales se vieron obligados a regresar al Congreso y sesionar al mando de Redondo.
Con el anuncio efectuado hoy por el diputado Marco Eliud Girón, la facción de disidentes renace, pero será hasta la próxima semana que se definirán más posturas sobre los temas de país y quiénes serán los integrantes de la bancada.
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