Tegucigalpa.- El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH) denunció mediante una conferencia de prensa que «desde las más altas esferas gubernamentales existía una estrategia muy fina para ejecutar» a la doctora Ligia Ramos, quien además es fiscal del Colegio Médico de Honduras (CMH).
En compañía del Colegio de Pedagogos de Honduras (COLPEDAGOGOSH), COFADEH compartió que la información fue revelada por una fuente creíble y confidencial. Además, vincularon la orden a las declaraciones públicas hechas por Ramos en relación con la situación actual del sector salud, los hospitales y la falta de diligencia en la obtención de las vacunas para contrarrestar los efectos del covid-19.
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La organización compartió que la galena, quien además es presidenta de la Asociación de Médicos del Instituto Hondureño de Seguridad Social (AMIHSS), en Tegucigalpa, es perseguida desde 2015 cuando integró el movimiento de los indignados por los actos de corrupción en el Seguro Social. Estos actos de acoso contra su seguridad se incrementaron en 2019 con las movilizaciones de la Plataforma de Salud y Educación, donde era la vocera del movimiento y la inseguridad se extendió a lo largo de 2020.
Asimismo, revelaron que la médica recurrió en varias ocasiones a denunciar las violaciones de derechos humanos en su contra a la Fiscalía de Derechos Humanos y al Comisionado Nacional Derechos Humanos (CONADEH), instancias de las que no recibió respuesta.
Debido a lo expuesto, tanto El COFADEH y el COLPEDAGOGOSH solicitaron a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que otorgue medidas cautelares y ordene al Estado, que adopte las medidas necesarias para garantizar los derechos a la vida, integridad personal y salud emocional de la beneficiaria y su núcleo familiar.
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La directora del COFADEH, Berta Oliva, declaró: «Estamos convencidos que ella no se ha ido porque quería irse al exilio. Nadie que quiera a su país, quiere irse al exilio. Las condiciones de su país es que hacen que la gente emigre y se vaya al exilio. Ella ahorita no está en condición de exiliada, sino que está en condición de resguardada».
El presidente del COLPEDAGOGOSH, Edwin Hernández, remarcó: «La doctora Ligia Ramos no fue amenazada a muerte, estaba sentenciada a muerte». Asimismo, agregó que «no es justo que la gente que lucha en la matria, que lucha por nosotras y por nosotros tenga que salir del país por sus posiciones políticas».
No voy a renunciar a mis derechos: Ligia Ramos
La doctora Ligia Ramos, quien recientemente optó a una candidatura a una diputación por la alianza Unidad Opositora de Honduras (UNOH) dijo a los medios presentes -a través de una video llamada- que recibió información de que su vida corría peligro inminente por dos vías diferentes y que la orden había sido dada el día anterior.
La galena reveló que esto ocurrió hace casi tres semanas. «Me interrumpieron mi vida de forma abrupta, pero estoy viva. Yo le agradezco a las personas que me notificaron. Estoy segura de que si me hubiera quedado hubiera pasado algo con mi vida».
La fiscal del CMH contó que desde hace seis años sufre amenazas de muerte, persecución y amedrentamientos, pese a todo llevó su vida de forma tranquila. Sin embargo, la información que recibió hace tres semanas «fue lo suficientemente importante para que yo tomara la decisión de salir».
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Además, aclaró que si bien aceptó una candidatura a un cargo de elección popular esto no motivó la denuncia, sino más bien es una decisión tomada para «regresar lo más pronto posible a mi país» de forma segura, continuar luchando y poder seguir con sus actividades como médico y como oposición.
«No quiero que se me quite mi derecho de circular en mi país, que se me quite el derecho de expresarme libremente y de seguir luchando por lo menos por tener una salud pública que se merece la población. No voy a renunciar a esos derechos», puntualizó.
