Redacción: Viena Hernández
Tegucigalpa. – La pobreza traspasa cualquier barrera, crece con una constancia casi determinante alimentada y fortalecida por la corrupción, la impunidad y factores como la extorsión, la violencia y la inseguridad. Así golpea este flagelo en Honduras a las poblaciones vulnerabilizadas, mientras los discursos de los gobiernos de turno y cooperación internacional sobre su combate, al final, no provocan ningún cambio.
Diversas fuentes consultadas por Criterio.hn, coinciden que el combate de la pobreza se ha convertido en un sermón y uno de los tantos temas sin resolver en las constantes reuniones entre gobernantes, diplomáticos de distintas naciones y hasta de los organismos financieros y de cooperación.
El sociólogo y director del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Eugenio Sosa, reveló que más de 2 millones de hogares hondureños sobreviven en condiciones de extrema pobreza.
La pobreza ha llegado al 73.6% de los hondureños y, de estos, el 53.7% vive en extrema pobreza. Esto significa que alrededor de 6 millones de habitantes vive en la precariedad.
Lea también: INE borró publicación que establecía que pobreza en Honduras es del 74%
Esta situación expone que estamos frente a numerosas familias que quedaron fuera de las posibilidades de adquirir los alimentos de la canasta básica, estando muy lejos de nutrirse correctamente para evitar enfermedades y problemas de salud.
“Los aspectos torales de la pobreza no han cambiado”, manifestó el sociólogo, al tiempo que mencionó que los recursos destinados por la presidenta, Iris Xiomara Castro Sarmiento (2022-2026), para los temas sociales se encuentran todavía en proceso de reordenamiento, por ejemplo, para el programa Red Solidaria, del cual todavía no existe una entrega masiva de ayudas, se espera que comience a surtir efecto hasta agosto.
En 2021, el economista Julio Raudales, señaló basado en los datos que proporcionaba una encuesta de hogares del INE que la pobreza había incrementado de manera acelerada, pues llegó al 59.3% en el 2019 y subió al 70% a mediados del 2021, es decir, se disparó en 11 puntos. Pero luego, en noviembre de 2021 llegó casi al 74% de la población.
La economista Lucía Vijil, dijo a Criterio.hn que ha faltado un abordaje integral de las políticas con relación a la pobreza, siendo un problema serio que no se desarrolle desde otras comunidades y solo se haga desde las principales ciudades: Tegucigalpa y San Pedro Sula.
En otras zonas marginadas del país se desestima que sus poblaciones sufren la corrupción de sus alcaldías y la falta de apoyo en los centros educativos, de salud, infraestructura y otras necesidades básicas que condicionan hasta la sobrevivencia.
Las condiciones son precarias y a esto se suma la tercerización del empleo, la imperante violencia, las maras y las pandillas y el desplazamiento forzado, siendo una de las formas en que desencadena la pobreza, pues obliga a las personas a irse de Honduras en busca de oportunidades económicas.
Lea también: 70 % de los niños de 10 años se encuentran en situación de pobreza de aprendizaje y no pueden leer y comprender un texto simple
VULNERABILIZADOS Y EN LA DELGADA LÍNEA DE LA POBREZA
Los sectores vulnerados son los que más sufren los efectos de la pobreza, es decir, los pueblos originarios, las poblaciones de diversidad sexual, las mujeres y la niñez. Sin embargo, más del 70% de la población es parte del índice de la pobreza.
Para el sociólogo César Ramos, la sociedad ha sido víctima de un sistema de acumulación de riqueza en pocas familias, dejando en la miseria a las mayorías.
En entrevista para Criterio.hn, Ramos comentó que el discurso de los organismos internacionales es confrontar los factores que repercuten en la pobreza, como lo repiten hasta la saciedad el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo, el Fondo Monetario Internacional y otros organismos poderosos del mundo.
Lea también: Mientras cada 30 horas surge un milmillonario, un millón de personas se acerca a la pobreza extrema
No obstante, se ha convertido en un discurso o un eslogan gastado frente a las masivas caravanas migrantes que huyen de la pobreza.
“El combate a la pobreza en Honduras ha significado prácticamente asesinar a los pobres, criminalizar a los pobres, se da eso de ver al pobre como el problema, como si fuera el enemigo. En lugar de combatir la pobreza, se combate a los pobres, se violentan sus derechos, son reprimidos, son víctimas de la violencia que ejerce el Estado”, argumentó el sociólogo.
-
Me encanta desafiar el poder y escudriñar lo oculto para encender las luces en la oscuridad y mostrar la realidad. Desde ese escenario realizo el periodismo junto a un extraordinario equipo que conforma el medio de comunicación referente de Honduras para el mundo Ver todas las entradas