El plan macabro de DESA para revictimizar las víctimas: Olivia Zúniga

Por: Redacción CRITERIO

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Tegucigalpa.- Desde la ciudad de Nueva Orleans y tras una invitación para realizar una gira por aquella ciudad para realizar una jornada de denuncia para visibilizar las políticas de terror que impone el Estado hondureño y las élites económicas que lo controlan, la hija de la asesinada ambientalista escribió en su muro de Facebook lo que ella denomina «El plan macabro de DESA para revictimizar las víctimas».

A continuación el escrito de Olivia Zúniga Cáceres

Escribe Olivia Zúniga Cáceres desde New Orleans EEUU.

28/10/2016

Mi madre, Berta Cáceres, interpuso la primera denuncia contra la empresa Desarrollos Energéticos S.A. en el año 2011 en el COFADEH por amenazas de muerte, desde ese año las amenazas no cesaron hasta que finalmente 5 años después es asesinada.

Dentro de 5 días se cumplirán 8 meses de ese hecho que cambio nuestras vidas para siempre, nunca más nuestras vidas podrán reponerse de este golpe, nada ni nadie nos devuelve a nuestra madre que nos protegía como una leona, que nos amaba, que nos educaba con su ejemplo, que aceleró su hacer de madre y abuela porque sabía que la vida se le iba, que sembró por todo el mundo una semilla de amor para que germinara para nosotros cuando ella ya no estuviera.

Cuando pienso en esto, recuerdo al Che que junto a su pueblo levantó una revolución y cuando él se marchó para continuar con otra escribió que sabía que de sus hijos la revolución cubana se haría cargo, porque al igual que todos los niños y niñas cubanas tendrían techo, educación y salud gratuita. Y así fué.

A 8 meses del asesinato de mi madre la organización Amigos de Nuestra América (ANA) me ha invitado a realizar una jornada de denuncia para visibilizar las políticas de terror con las que se impone el Estado hondureño y las élites económicas que lo controlan. Uno de los eventos más importantes y exitosos ha sido la conferencia en la universidad de Tulane en New Orleans patrocinada por el Stone Center de Estudios de América Latina de la Universidad de Tulane, por el Instituto Colegio Newcomb, el Programa de Estudios Ambientales y por la Oficina de Asuntos Multiculturales en la ciudad de New Orleans estado de Louisiana.

La conferencia se nutrió de una gran cantidad de personas y después de mi ponencia participaron haciendo reflexiones, dando sus muestras de solidaridad y haciendo preguntas acerca de los últimos acontecimientos en el caso de Bertha Cáceres, todos querían tomar la palabra, a la mayoría se les dio la palabra, también se le dio la palabra a un hombre que levantó la mano hasta el final de la conferencia (que no dio su nombre) era de facciones “turcas”, acompañado de un jovencito que grababa todo con su teléfono.

Su participación tenía la intención de defender al gobierno de Honduras y a las élites económicas que desde los años 50´s controlan el país, como también defender a las compañías bananeras, cuyos dueños viven en ésta ciudad de New Orleans, negando los hechos históricos de explotación y exterminio contra nuestro pueblo hondureño desde los años 50´s hasta hoy, se notaba que jamás en su vida había leído Prisión Verde y que era una persona enviada por los grupos de poder económico que han oprimido y ocupado nuestro país con bases militares, olía a azufre, a leguas se sentía que pertenecía a esa clase política y económica que nosotros denunciábamos, lo que él no se esperaba era la reacción de la gente que asistió a la conferencia y por supuesto mi respuesta, pero eso no fue lo que envió a los medios de comunicación hondureños, el solo envió su intervención y no la reacción de toda la sala, ni tampoco mi respuesta, tampoco dio su nombre, solo dijo que era “un hondureño”.

Los medios desinformativos hondureños no cubrieron el evento, no hablaron de la solidaridad del pueblo norteamericano y de la comunidad hondureña y latinoamericana uniéndose al clamor por la justicia para mi madre y para todos los mártires en Honduras como José Ángel Flores, Margarita Murillo, Soad Nicolle y tantos más. No hablaron del repudio que siente éste pueblo por las políticas terroristas del Estado hondureño y las mafias políticas y económicas usadas contra nuestros pueblos indígenas y negros en Honduras.

Por eso yo he decidido hacer pública la respuesta que los medios de desinformación en mi país escondieron, estando consiente que todo esto obedece un PLAN MACABRO DE LA EMPRESA DESARROLLOS ENERGÉTICOS S.A. DEL ESTADO HONDUREÑO Y DE LAS INSTITUCIONES FINANCIERAS INTERNACIONALES QUE RESPALDAN ESTE PROYECTO DE MUERTE PARA CALLAR LA VERDAD Y PARA QUE EL ASESINATO DE MI MADRE QUEDE EN LA IMPUNIDAD, PARA QUE LAS ÉLITES ECONÓMICAS (que por primera vez en la historia se sienten amenazadas de que la justicia los toque) QUEDEN EN LA IMPUNIDAD.
Yo, que al igual que mi madre y demás familia, si doy la cara, que doy mi nombre, que doy la batalla aun después de que mi madre ha sido asesinada, estando consiente que en Honduras, un país donde prevalece la impunidad y la corrupción, no sería extraño que yo, mis herman@s y demás familia y los líderes de COPINH tuviésemos el mismo desenlace que ella.

Nosotros, que no servimos a intereses oscuros de las compañías bananeras, que no somos funcionarios públicos del Estado señalados por actos delictivos, que no tenemos la garganta tarifada, ni la dignidad en venta, nosotros, que no somos genocidas, que no nos hacemos multimillonarios con la sangre de todo un pueblo, nosotros los que no tenemos las armas, ni la inteligencia y contrainteligencia, ni los escuadrones de la muerte a nuestro servicio. Nosotros, los que no tenemos el dinero para pagar periodistas corruptos, NOSOTRAS Y NOSOTROS seguiremos dando esta batalla con la fuerza, la rebeldía, la dignidad, valentía y sabiduría de Lempira y de Bertha Cáceres sangre de nuestra sangre.

Seguiremos denunciando que ustedes: DESA, MULTINACIONALES Y ESTADO TERRORISTA HONDUREÑO quieren distraer la atención del pueblo hondureño sobre la impunidad y los intereses económicos que están detrás del asesinato político de mi madre hablando de nuestros viajes para exigir justicia, ustedes quieren que el pueblo hondureño deje de hacer presión sobre este caso, porque tienen miedo que se descubran todos los actos de corrupción y de ilegalidad que están detrás de éste proyecto de Agua Zarca, que descubran los grandes intereses multimillonarios que se mueven detrás del más grande negocio, después del narcotráfico, que implican los Mega proyectos energéticos mentirosamente llamados de “energía limpia” porque están llenos de sangre de nuestros pueblos negros e indígenas. Ustedes hablan de nuestros viajes por la justicia para nuestra madre porque no quieren que descubran que las mafias políticas y económicas corruptas de éste país se han aliado para obtener jugosos beneficios económicos, PARA ESO DIERON EL GOLPE DE ESTADO PARA CONSOLIDAR ESE MODELO EXTRACTIVISTA que haría emerger nuevas élites económicas en éste país poniendo al servicio de intereses económicos transnacionales la institucionalidad pública del Estado, porque ustedes también tendrían ganancias, por esas jugosas ganancias se deben imponer con políticas de terror irrespetando nuestros derechos humanos, irrespetando los marcos jurídicos internacionales como el convenio 169 de la OIT que establece el derecho a la consulta previa, libre e informada y de buena fe y el derecho al consentimiento y no consentimiento. Irrespetando el derecho a VIVIR.

A partir del 2011 se puso en marcha un macabro plan para acabar con la lucha en defensa de los bienes naturales comunes y a favor de la vida que lideraba mi madre desde el COPINH, intentaron el soborno, al constatar que no era posible, desataron una guerra jurídica de persecución y criminalización, como nuevamente fracasaron entonces desataron una guerra mediática de desprestigio y calumnias, la calavera de la muerte asomó su rostro porque los golpistas tomaron los micrófonos para pedirle a los organismos de Derechos Humanos internacionales de Europa, Estados Unidos y Canadá “que dejaran de proteger y financiar a Bertha Cáceres porque ella se oponía al desarrollo” pagaron gargantas y prohibían a las comunidades indígenas organizarse en COPINH, escribían artículos en los medios escritos satanizándola, calumniándola y como tampoco pudieron destruirla con eso ¡finalmente la asesinaron!.
Hoy están siguiendo los mismos pasos contra las victimas usando la mentira, la apología del odio, poniendo en estado de secretividad el caso para las víctimas, impidiendo que se incorpore al proceso investigativo una Comisión Internacional e Independiente de la CIDH y sobre todo PERMITIENDO QUE LA EMPRESA ASESINA SIGA OPERANDO Y OBTENIENDO JUGOSAS GANANCIAS A COSTA DEL AGUA, LA TIERRA Y LA SANGRE DEL PUEBLO LENCA. Impidiendo que LOS AUTORES INTELECTUALES SEAN CASTIGADOS CON TODO EL PESO DE LA LEY POR LOS MULTIPLES ACTOS DELICTIVOS QUE HAN COMETIDO.
Ahora pagan gargantas para detener nuestra lucha, están en la fase de la GUERRA MEDIÁTICA REVICTIMIZANDO A LAS VICTIMAS. No les bastó con asesinar a nuestra madre, ustedes tienen sed de dinero y no les importa cuantas vidas tengan que aniquilar.

Hace unas semanas toda la estructura criminal que asesinó a nuestra madre ha vuelto a la carga para atacarnos, han puesto a supuestos “indígenas” diciendo que ellos si están a favor de la construcción del megaproyecto energético Agua Zarca, han utilizado a un niño diciendo que el necesita del megaproyecto energético Agua Zarca para tener acceso a derechos que debería garantizarle el Estado de Honduras y que no los cumple para que la gente crea que es una empresa que se los debe de garantizar. Han llevado a todos los medios desinformativos a la señora Elsia Paz y a todo su personal de seguridad y administrativo para atacar al COPINH y “a las hijas de Bertha Cáceres”. ¿Por qué no hablan los accionistas? ¿Por qué los accionistas se han llamado al silencio?

Si analizamos,  esta vez,  su plan macabro se repite exactamente igual como se ejecutó contra mi madre, nada más que esta vez no son los ricos y poderosos de éste país los que dan la cara en los medios de comunicación, ellos están detrás maquinando todo el plan, esta vez echan ante los medios de comunicación a los pobres, a sus asalariados, ya no vemos a una Aline Flores haciendo reclamos a la comunidad internacional, ya no escuchamos al Cardenal Oscar Andrés Rodríguez,  prohibiéndole a la gente que se organice en el COPINH, ya no leemos a un Juan Ramón Martínez satanizando las luchas de Bertha Cáceres.

Hoy,  en éste nuevo Plan Macabro,  tiran a los pobres enajenados que resultan ser económicamente los menos beneficiados por este mega proyecto, porque no son los que se llevarán a sus bolsillos los billones de dólares que obtendrían con un proyecto energético ilegal de esta magnitud.

Ahora bien, yo pregunto ¿Cuál es el paso que le hace falta a la estructura criminal que asesinó a mi madre para completar su Plan Macabro contra las víctimas?

¡Alerta organismos defensores de Derechos Humanos en el mundo! ¡Alerta comunidad internacional!