Tegucigalpa. Más de 24 mil migrantes ingresaron de forma irregular a Honduras entre enero y abril de 2022. El 70% de estas personas son originarias de Cuba, seguidas por Nicaragua y Venezuela, según reportó la Dirección General de Operaciones Europeas de Protección Civil y Ayuda Humanitaria (ECHO, por sus siglas en inglés).
De acuerdo a la organización, en las últimas semanas este flujo irregular de migrantes en tránsito se ha incrementado significativamente en las municipalidades de Trojes y Danlí, en el oriental departamento de El Paraíso, donde en abril el promedio de personas que buscó refugio sobrepasó las 500 diarias, de las cuales el 15% eran menores de edad no acompañados, y estando la capacidad máxima limitada a 170 personas.
La ECHO remarcó que el aumento de la afluencia de migrantes está generando importantes desafíos humanitarios. Entre estos, destacó el acceso a alimentos y agua potable, servicios básicos de higiene y saneamiento, atención médica y psicosocial, albergues temporales, manejo de residuos sólidos, protección, restablecimiento del contacto familiar, así como difusión de información sobre trámites migratorios y acceso a oficinas del Instituto Nacional de Migración.
En su publicación, ECHO señaló que la ONU en Honduras está coordinando la evaluación de necesidades. Mientras que sus socios están proporcionando asistencia en la zona. Subrayando que “la situación humanitaria actual requiere una mejor coordinación e inclusión de la población local en la respuesta”.
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A inicios de mayo, la Cruz Roja instó a respetar y garantizar derechos y necesidades de los migrantes que transitan por Honduras. El llamado surgió luego que se denunciara que migrantes originarios de Haití, África, Cuba y Venezuela, se encontraban varados en los municipios de Danlí y Trojes en el departamento oriental de El Paraíso, fronterizo con Nicaragua, por no pagar una multa.
Las organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes refirieron que durante visitas realizadas entre enero y febrero en las fronteras sur-oriente y norte-occidente, para identificar las principales necesidades de asistencia y de protección de la población en tránsito, se constató que, a lo largo de la ruta, los migrantes enfrentan discriminación y violencia y carecen de servicios esenciales y mecanismos de protección.
Sumado a esto, los migrantes en tránsito por Honduras han denunciado cobros arbitrarios por parte de agentes de la Policía Nacional, así como sanciones administrativas establecidas en el artículo 104 numeral uno de la Ley de Migración y Extranjería. El costo de estas sanciones varía entre USD 220 hasta USD 800, según denuncias de los migrantes,
El alto costo de las multas implica que los migrantes en tránsito por Honduras queden varados principalmente en los departamentos fronterizos. Debido a estas y otras denuncias de serias violaciones a los derechos humanos de los migrantes en tránsito, el Congreso Nacional aprobó un proyecto para otorgar amnistía migratoria por tres meses y eximir del abusivo pago de multas o recargos a los migrantes que pasan por Honduras por parte de las autoridades migratorias.
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La iniciativa fue presentada por el diputado del Partido Salvador de Honduras (PSH), Osman Chávez, quien previamente ya había presentado el proyecto, pero este no fue aprobado hasta inicios de mayo, con una mayoría de 105 votos de 128.
El diputado Chávez por el PSH, previo a la entrega del proyecto humanitario, visitó Danlí, El Paraíso, para conocer de primera mano la situación de un gran número de migrantes varados provenientes de Haití, Brasil, Cuba, Venezuela, Egipto, Ghana, Senegal, Nigeria, Congo, Ecuador, Camerún, Angola y de otros países.
