FES y CPTRT conmemoran día contra la tortura

El CPTRT manifestó que la institución ha documentado 19 denuncias por tortura  en el periodo de julio de 2018 a mayo de 2019.

Por: Redacción CRITERIO

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Tegucigalpa.-La Fundación Friedrich Ebert y el Centro de Prevención, Tratamiento y Rehabilitación de Víctimas de Tortura y sus Familiares (CPTRT) conmemoraron hoy el día internacional en apoyo a las víctimas de tortura.

En el evento donde participaron un centenar de familiares de privados de libertad se denunció las torturas y vejámenes a que son sometidas las personas que estan privadas de su libertad en las diferentes cárceles de Honduras sean estas de máxima seguridad o no.  

Jennifer Erazo

Jennifer Erazo, coordinadora de la FES para Honduras dijo que Honduras vive momentos donde la tortura es pública como lo ocurrido el pasado lunes en la Universidad nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y en múltiples lugares donde el pueblo se manifiesta contra el régimen.

Y cuestionó si esos hacen frente al pueblo y frente a los medios de comunicación, ¿qué estarán haciendo en los centros penitenciarios donde nadie los ve?

Y vemos lo que ocurre en las comunidades más remotas del país, gracias a las redes sociales. Todo eso es tortura y violaciones a los derechos humanos, dijo Erazo.

Lucy Pavón

Lucy Pavón del CPTRT manifestó que la institución ha documentado 19 denuncias por tortura  en el periodo de julio de 2018 a mayo de 2019.

Las víctimas son 13 hombres y 3 mujeres y los perpetradores son: policía preventiva 7 casos, policía militar 6 casos, guardias de seguridad 5 casos y policía penitenciario 1 caso.

 Las agresiones a las víctimas sucedieron durante el momento de la detención y el traslado a las postas policiales.

Pavón explicó que los Métodos de Tortura son traumas contundentes en diferentes partes del cuerpo, causadas por la palma de las manos, pies, toletes, armas de reglamento. -Choques eléctricos, introducir el arma dentro de la boca, colocarla en la cabeza y cerrajear el arma.

Además, se usan diferentes amenazas como:  llevarlos a La Montañita o las cañeras y matarlos, encostalarlos, quemarlos vivos, mostrarles el combustible que utilizarían para quemarlos, causarle daño a la familia si denuncian.

También se usan Insultos, intimidación, desnudez, tocamientos en glúteos, senos, vagina, muslos a las mujeres, penetración vaginal y anal, Intoxicación con gases lacrimógenos, heridas por armas de fuego, disparos al aire y al piso.

Sabemos que existe una prohibición absoluta de la Tortura, escrita en muchos convenios y tratados de los cuales Honduras nuestro país es suscriptor. El Estado se ha comprometido a prevenir la tortura y a sancionar a quienes cometen estos abominables actos. Pero la pregunta es ¿cómo la sanciona?, si desde la máxima autoridad se dan órdenes continuamente para realizar dichos actos, agregó Pavón

Mas adelante señaló que,  «Vivimos en un Estado totalmente militarizado, dictatorial donde el derecho a la integridad física y psicológica de los hondureños es violentado por una Policía Nacional cuyo eslogan servir y proteger es una burla al pueblo y un ejército que no cumple con las funciones por las cuales existe: salvaguardar nuestras fronteras y velar porque se respete la alternavilidad en el poder. Al contrario, estas dos instituciones se han convertido en los verdugos de la dictadura».

Si los hondureños contaran con un Estado de derecho,  se debería deducir responsabilidades de índole penal, disciplinario a las personas que cometen tortura, pero esto no es posible en una dictadura que es avalada y sostenida por el imperio norteamericano cómplice de la vulneración de los derechos humanos fundamentales comenzando por el acceso a la salud y educación pública, al trabajo con una remuneración justa. De todos es conocida la forma sistemática en que es reprimida la población hondureña protagonista de la protesta social mediante el uso de gases tóxicos, disparos con munición letal, persecución, levantamientos de perfiles falsos y amenazas, puntualizó Pavón.