También afirmó que como muchos otros está a la espera de la audiencia oficial de sentencia de Roberto David Castillo, coautor convicto del asesinato de la ambientalista hondureña y activista indígena Berta Cáceres
Tegucigalpa. El senador estadounidense por el estado de Vermont, Patrick Leahy, expresó nuevamente preocupación «por el uso indebido del proceso judicial por parte del gobierno hondureño para silenciar la disidencia».
Leahy remarcó que existe una práctica de «presentar cargos sin pruebas creíbles y mantener en prisión a activistas sociales y otros críticos, y someterlos a largos procesos penales socavando el debido proceso y erosionando la confianza pública en la integridad de la policía y los tribunales».
Estas declaraciones fueron publicadas mediante un comunicado relacionado a la decisión del Tribunal de Sentencia de Jurisdicción Nacional en Honduras de absolver a los ciudadanos hondureños Edwin Espinal y Raúl Álvarez, quienes fueron recluidos por 19 meses en una cárcel de máxima seguridad, donde «fueron sometidos a duras condiciones, que incluían recibir solo dos horas de luz solar al mes».
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«Se descubrió que ambos hombres habían sido acusados falsamente de daños agravados a la propiedad, incendio agravado y uso de explosivos caseros, cargos por los cuales resultó que el gobierno no tenía pruebas creíbles», apuntó en el comunicado publicado en la página web del senador.
Leahy compartió que casos como el de Espinal y Álvarez, arrestados tras el proceso electoral de 2017, son utilizados como un medio para silenciar a los manifestantes y sofocar la discusión sobre el proceso democrático y la necesidad de elecciones transparentes.
«Edwin Espinal es un defensor de los derechos humanos que ha enfrentado persecución política desde 2009. No está solo. Muchos defensores de los derechos humanos y del medio ambiente, así como periodistas independientes en Honduras, han sufrido amenazas, arrestos arbitrarios, golpizas y asesinatos por parte de la policía hondureña u otras personas que actúan en su nombre», resaltó el legislador estadounidense.
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De igual forma, manifestó su preocupación por la ausencia del debido proceso en el caso de los ocho defensores del agua de Guapinol, cuyo encarcelamiento se ha prolongado durante años; y declaró que como muchos otros está a la espera de la audiencia oficial de sentencia de Roberto David Castillo, coautor convicto del asesinato de la ambientalista hondureña y activista indígena Berta Cáceres.
Leahy cerró el comunicado instando al gobierno hondureño a apoyar un proceso electoral libre y justo, así como la libertad de expresión, asociación y reunión para todos los ciudadanos hondureños. «Espero que los próximos líderes de Honduras rechacen las prácticas corruptas y la impunidad del pasado, y apoyen un poder judicial independiente, defiendan el estado de derecho, responsabilicen a la policía y otros funcionarios públicos cuando abusen de su autoridad y restauren la fe del pueblo hondureño en el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo».
