Por: Redacción CRITERIO
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Tegucigalpa. – El Comité de Familiares de Detenidos y Desaparecidos en Honduras (COFADEH), denunció hoy martes los asesinatos perpetrados por las fuerzas públicas de seguridad tras la asunción de Juan Orlando Hernández a la presidencia en 2017, la mayoría en la impunidad.
De acuerdo al Cofadeh, unos 40 hondureños murieron en medio de la crisis postelectoral y durante las recientes protestas en contra de la privatización de la salud, sin embargo, solo dos casos han sido llevados a juicio.
Un informe presentado por la Oficina de Alto Comisionado de los Derechos Humanos de Naciones Unidas señala que la fuerza de seguridad hizo uso intencional y letal de las armas de fuego, más allá del propósito de disuadir o de defensa propia en las manifestaciones.
En el mismo se detallan las violaciones de derechos humanos ocurridas entre el día de la votación (26 de noviembre de 2017) y la toma de posesión del presidente (27 de enero de 2018), lo cual concluye que por lo menos 22 civiles y un agente de policía murieron durante las protestas.
El Ministerio Público, por su parte, denunció que las autoridades de la Unidad de Información e Investigación Criminal obstaculizan su trabajo, relacionado con las indagaciones de las muertes postelectorales.
La coordinadora del Cofadeh, Bertha Oliva destacó que el gobierno y Estado de Honduras tienen una deuda pendiente con estos casos.
A juicio de Oliva no existe verdadera voluntad política para resolver las investigaciones hechas por el Ministerio Público conforme al derecho, la verdad y la justicia.(Con información de: radiolaprimerisima.com)
