Fotoreportaje: Fernando Destéphen
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Tegucigalpa.-A siete días de la cuarentena, en Honduras la vida sigue en medio de medidas de confinamiento. La gente no quiere cumplir las restricciones impuestas por un toque de queda. Las personas que viven del comercio informal alegan que la situación es sofocante porque no tienen que comer en sus casas y que la única salida es salir a trabajar. Otro sector justifica sus salidas a la calle para poder comprar víveres y medicamentos. Al final todos podrían tener justificación y arriesgar su vida contagiándose de Covid-19.
Así pasan las horas en Tegucigalpa….
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Me encanta desafiar el poder y escudriñar lo oculto para encender las luces en la oscuridad y mostrar la realidad. Desde ese escenario realizo el periodismo junto a un extraordinario equipo que conforma el medio de comunicación referente de Honduras para el mundo Ver todas las entradas