Reflexiones incómodas sobre el Covid-19

Reflexiones incómodas sobre el Covid-19, no aptas para ingenuos (4ta parte)

Por: Tomas Andino Mencía

 

4ª PARTE: ¿POR QUÉ  SOLO Covid-19 SE NOS VENDE COMO LA GRAN AMENAZA A LA HUMANIDAD?

¿Estas Usted alarmado por esta nueva cepa de coronavirus? Cuando lea lo que sigue vera las cosas de otra manera.

Si en el mundo hubiera objetividad, a la par de COVID19 los sistemas mundiales y nacionales de salud estarían poniendo atención a otras enfermedades que también son amenazas para amplios conglomerados humanos.

LA INFLUENZA: PRIMA-HERMANA DEL COVID19, SIMILAR DE MORTAL

Comencemos por el caso de la Gripe Estacional o Influenza (H1N1). La OMS reconoce que la Influenza y COVID-19 son enfermedades parecidas en muchísimos aspectos, casi indistinguibles en sus síntomas, salvo por diferencias muy puntuales, pero sorprende la enorme distancia que observamos entre la reacción al COVID19, y la que se tiene frente a la Influenza, que se presenta como epidemias con características muy, pero muy similares.

Sobre sus similitudes y diferencias, la OMS dice:

“El virus de la gripe tiene un periodo de incubación medio más corto (el tiempo que pasa desde la infección hasta la aparición de síntomas) y un intervalo de serie más corto (el tiempo transcurrido entre casos sucesivos) que el virus de la COVID-19. Se estima que el intervalo de serie del virus de la COVID-19 es de entre 5 y 6 días, mientras que en el caso del virus de la gripe es de 3 días. Esto significa que la gripe puede propagarse más rápidamente que la COVID-19. (…)  Se calcula que el número de infecciones secundarias generadas a partir de un individuo infectado es de entre 2 y 2,5 para COVID-19, mayor que para la influenza. Sin embargo, las estimaciones tanto para COVID-19 como para los virus de la gripe son muy específicas del contexto y el período de tiempo, lo que dificulta las comparaciones directas.[1]

En otras palabras, técnicamente las diferencias entre su velocidad de propagación y su capacidad de infección secundaria se compensan teniendo un efecto muy similar en ambas; lo único que las diferencia serían su comportamiento en diferentes contextos. Esta es la razón de por que anualmente se contagian de Gripe Estacional o Influenza entre 3 y 5 millones de personas y mueren entre 290 mil a 650 mil personas al año. ¡Sí, leyó bien! Contagia tantas personas como el COVID-19.

Las víctimas de la Influenza, de manera semejante a COVID-19, mueren de complicaciones como la neumonía, especialmente personas inmunodeprimidas, de la tercera edad o con enfermedades previas, como aquella, aunque también mata muchos jóvenes. Son tantos los casos que los sistemas de salud colapsan y no pueden atender adecuadamente a estas personas, como ocurre también con COVID-19, a pesar de que se les inoculan diferentes vacunas.

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EPIDEMIAS MINIMIZADAS, PERO PEOR DE MORTALES

Además de COVID-19 y de la Influenza (H1N1) hay enfermedades epidémicas que matan a muchas personas que, por no reunir el “detalle técnico” de ser pandemias, no ameritan una atención mediática ni solidaria especial. De algunas de estas, el público ni siquiera se entera que ocurren. Incluso para algunas hay vacunas para otras no, pero igualmente son muy peligrosas. Veamos algunos ejemplos.

  • El Dengue Grave o Hemorrágico tiene una incidencia de 500,000 casos anuales, hace sufrir a muchos niños y niñas, y mata por lo menos al 2.5% de los infectados, es decir, unas 12,500 personas a nivel global, especialmente regiones como Latinoamérica.
  • El sarampión tiene frecuentes brotes. El último en 2017 que contagió a 6.7 millones de personas y mató a 110,000 en todo el mundo.
  • El Cólera, una enfermedad infecciosa que puede causar la muerte en cuestión de horas, contamina anualmente entre 1.3 a 4 millones de personas, matando entre 21 mil y 143 mil personas al año, principalmente de países pobres.
  • La Malaria o Paludismo, una enfermedad que sin tratamiento mata en 24 horas, infecta anualmente a más de 200 millones de personas (228 millones solo en 2018) con una mortalidad de casi 1%, o sea a más de 400,000 personas. Solo entre 2016 y 2018 el número de fallecidos por esta causa fue de 1,275,000 principalmente en África.
  • La Hepatitis B, puede derivar en graves daños al hígado. La padecen 257 millones de personas en el mundo hoy día, y aunque hay vacuna mata anualmente alrededor de 600,000 personas (2017).

¿Por qué no se detiene la economía capitalista frente a estas epidemias graves, que matan a tanta gente? ¿Es por el detalle técnico de que no son consideradas “pandemias”? Este tecnicismo no es una explicación que digamos convincente, porque al final el saldo mortal es similar o peor.

PANDEMIAS IGNORADAS, PERO TAN O MÁS MORTALES QUE COVID-19

Por ejemplo, en ocasiones el virus de la influenza común sufre mutaciones y da lugar a pandemias terribles. La más conocida fue la “Gripe Española” de 1918 que mató entre el 1% al 3% de la población del mundo, la cual, por sí sola paró al mundo. Pero las sucesivas pandemias de Influenza fueron mucho menos letales: En 1957 surgió el virus H2N2 que mató a 1.1 millón de personas[2]; en 1968 hubo otra pandemia (el virus H3N2) que mató al 0,03 % de la población mundial, aproximadamente 1 millón de personas; y entre 2009 y 2010 se dio la última de esta familia (virus H1N1) pdm09, por la que murieron un máximo de 575,400 personas.

¿Se da Usted cuenta? Mientras ocurría el golpe de Estado en Honduras (2009), se desarrollaba una pandemia que mató medio millón de personas en el mundo; algo similar a lo que está ocurriendo en la actualidad y muy pocos se dieron cuenta en nuestro país, porque no hubo el mismo escándalo. De hecho, ninguna de las pandemias de la segunda mitad del siglo XX y de este siglo fue acompañada del mismo nivel de pánico ni de tan drásticas medidas como en el caso de la COVID19.

Y qué decir del VIH-SIDA. Esta es una pandemia crónica que contagia a más de 2 millones de personas cada año, matando a la mayoría. Ya nos acostumbramos a esta, pero los africanos no. El 75% de fallecimientos de VIH ocurre en países africanos, donde sus enfermos difícilmente pueden pagar por retrovirales, como en occidente.

Sumadas las víctimas mortales de todas estas enfermedades que no son COVID19, juntas matan más de 4,000,000 de personas cada año, en cifras redondas, diez veces más de lo hoy día estaría matando el COVID19. En su mayoría habitantes de países del llamado Tercer Mundo. En diez años sumarían casi 40 millones de personas, una cantidad de muertes similar a los caídos durante los seis años de la Segunda Guerra Mundial. Increíble ¿no?

Pero ¿oye Usted alguna alarma extraordinaria como la causada por el COVID-19 en los organismos internacionales y en los medios de prensa por estas otras enfermedades tan mortales? ¿Escucha Usted que hay decenas de laboratorios compitiendo por obtener una vacuna contra el Dengue que tanto azota a Latinoamérica? ¿Se movilizan tantos billones de dólares para rescatar a los países africanos del desastre económico que el paludismo, el VIH o el Colera trae a sus economías? Seguramente no. Salvo los especialistas de la salud, pocos se preocupan por ellos y la vida continúa normalmente en occidente y el Norte, porque el todo poderoso mercado indica que no es rentable invertir en los pobres del Sur.

¿UN SISTEMA DE SALUD PÚBLICA MUNDIAL SELECTIVO?

Es difícil entender qué sistema de salud existe en el mundo, el que con 4291 muertos de un país desarrollado la OMS declara una emergencia mundial por una pandemia y, en cambio, no parece ocurrir nada si el mismo organismo sabe que morirán 400,000 africanos por malaria el mismo año ¡93 mil veces más!

No cabe en nuestro entendimiento que las hambrunas, guerras, pestes de todo tipo produzcan crisis económicas crónicas en los países más pobres del mundo, sin que merezca la atención solidaria de occidente (por el contrario el FMI se ensaña en ellos), mientras que cuando la OMS declara la pandemia por COVID-19 de inmediato la banca internacional (FMI, BM BID BCIE entre otros) pone a disposición de los gobiernos gigantescos recursos y la flexibilización de los regímenes de pago de la deuda, de los que se beneficiarán unos pocos multibillonarios, a nombre de “salvar la humanidad”. Abruma tanta “consideración” y “solidaridad” (sic).

Entonces vale hacerse la pregunta ¿Por qué esta conducta tan dispar y asimétrica de unos seres humanos respecto a otros? ¿Acaso las y los africanos, latinoamericanos y surasiáticos no son también seres humanos? ¿Será por los recursos económicos que están en juego en las grandes economías industrializadas? ¿O será porque estas afectan principalmente a personas negras, cobrizas y mestizas que vivimos en países del Sur, mientras que el COVID-19 afecta, por primera vez en muchas décadas, a hombres y mujeres blancas en los países del Norte?

Como que hay otras consideraciones que no tienen nada que ver con la salud, las que hacen la diferencia.

CITAS Y REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

(1)  OMS, PREGUNTAS Y RESPUESTAS: Similitudes y diferencias entre la COVID-19 y la gripe. Disponible en: https://www.who.int/es/news-room/q-a-detail/q-a-similarities-and-differences-covid-19-and-influenza

(2)  Ver: Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, “Pandemia de 1957-1958 (Virus H2N2)”.  Disponible en: https://espanol.cdc.gov/flu/pandemic-resources/1957-1958-pandemic.html

[1] OMS, PREGUNTAS Y RESPUESTAS: Similitudes y diferencias entre la COVID-19 y la gripe. Disponible en: https://www.who.int/es/news-room/q-a-detail/q-a-similarities-and-differences-covid-19-and-influenza

[2] Ver: Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, “Pandemia de 1957-1958 (Virus H2N2)”.  Disponible en: https://espanol.cdc.gov/flu/pandemic-resources/1957-1958-pandemic.html

  • Jorge Burgos
    Tengo algunos años de experiencia y me encanta practicar el periodismo incómodo que toque los tinglados del poder, buscando cambios en la forma de gobernar y procurar el combate a la corrupción, develando lo que el poder siempre quiere ocultar. jorgeburgos@criterio.hn

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4 comentarios

  1. aqui se esta cocinando algo mas grande, por eso paso pendiente de los grandes pensadores de la actualidad, para comparar opiniones y escuchar sus puntos de vista como es el casi de Alfredo Jalife entre otros,
    algo grande se cocina y nos vendieron el miedo para generar caos, los datos de los muertos no concuerdan, asi como dicen que es tan letal, un solo caso en una familia?, para mi es un dato ridiculo,
    asi que solo hay que estar pendientes de las estadisticas, escuchar a diferentes fuentes para no hacer alarma innecesaria,

    1. Sería más serio el artículista si en lugar de sólo sembrar dudas y resquemores, se adentrara en el terreno del compromiso, y nos planteara su hipótesis acerca del problema. Por ejemplo, afirmar claramente. «Este virus no tiene la peligrosidad que amerite que se declare un estado de alarma mundial por pandemia; los gobiernos que hoy dominan el mundo lo han hecho para proteger a sus ciudadanos, demostrando que, para ellos, son más importantes que los habitantes de los paises atrasados, por los cuales no muestran la misma preocupación. Es decir, que estamos ante el dominio de gobiernos xenofobos y racistas, para los cuales sólo sus ciudadanos merecen ser protegidos.» Sin embargo, tal afirmación dejaría sin explicación el por qué hay paises como Suecia, Dinamarca, Noruega o Nueva Zelanda, que no han optado por confinar a su población. O por qué gobiernos como el británico y el norteamericano se negaban a practicar un confinamiento, hasta que la dura realidad les obligó a asumirlo. O por que todos los asumieron el confinamiento son criticados por haberse decidido en esa vía de manera tardía e improvisada. En fin, que la cojetura racista y xenofoba no nos ofrece ninguna explicación que soporte la critica. Es que analizar estas cuestiones de amplio espectro social, sin alusión a las bases económicas del sistema capitalista y sin aludir a la dominación de clase burguesa imperialista, deja demasiados cabos sueltos.