Las agrupaciones campesinas piden al gobierno convertir en política pública el apoyo a la agricultura ecológica, con el fin de proteger el medio ambiente y crear soberanía alimentaria
Tegucigalpa, Honduras. – Las organizaciones campesinas reconocen el apoyo que el gobierno ha brindado al sector agrícola mediante el bono tecnológico productivo; sin embargo, critican que la medida no es integral, porque no se acopla a la producción sostenible que muchos están practicando.
De momento el apoyo que realiza el gobierno para incentivar la agricultura es a través de la entrega de insumos como: semillas, fertilizantes e insecticidas, lo que se conoce como “bono tecnológico”, todos hechos a base de productos químicos que contaminan el medio ambiente, denuncian las asociaciones agricultoras.
La coordinadora de la Vía Campesina en Honduras, Wendy Cruz, dice que es urgente que se apoye la creación de una verdadera soberanía alimentaria y, para ello es necesario impulsar el acceso a créditos, tierras y apoyo a nuevos modelos de producción como ser la agricultura sostenible.
“La agricultura convencional utiliza demasiados químicos, además, que nos impone las semillas genéticamente modificadas y eso le crea dependencia, pero también limita la soberanía de los pueblos para producir sus alimentos”, expresó Cruz en entrevista con Criterio.hn.
En cambio, el modelo sostenible tiene la ventaja que es integral porque se piensa primero en la producción familiar, luego en la comunitaria y finalmente los excedentes se destinan para un comercio departamental, apuntó.
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INTERESES DE LAS TRANSNACIONALES
La entrevistada crítica que en Honduras sólo se ha invertido en modelos que apoyan la compra de fertilizantes que contaminan el medio ambiente, en virtud de que no se cuenta con una ley marco que obligue a los gobiernos a invertir en iniciativas agro ecológicas.
La líder de la Vía Campesina cuestionó también que en Honduras se le apueste a un modelo de producción que sólo utilice químicos para seguir con los negocios financieros de las transnacionales, “los organismos internacionales nunca le van a apostar a la agricultura campesina sostenible, se les acabaría el negocio”, apuntó Cruz.
En virtud de los intereses económicos que hay alrededor de la producción agrícola, Cruz considera que en Honduras se ha visto el derecho a la alimentación como mercancía, por lo que pidió al gobierno que las iniciativas que han surgido de las organizaciones campesinas escalen y se conviertan en políticas públicas para tener impacto y que sean de obligatorio cumplimiento.
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AGRICULTURA ECOLÓGICA
Hablar de soberanía alimentaria y de nuevos modelos de producción no es aislado en Honduras debido a que en el plan de gobierno de la refundación 2023-2026, la presidenta Xiomara Castro, contempla en el capítulo 6, una serie de propuestas con el fin de apoyar el desarrollo agropecuario.
Entre las medidas promete: elaborar una estrategia contra la pobreza rural y por la soberanía alimentaria, además, de apoyar proyectos agrícolas que se quieran desarrollar en cualquier modalidad.
Para el director de la Asociación Nacional para el Fomento de la Agricultura Ecológica (Anafae), Octavio Sánchez, ya se han realizado esfuerzos por incrementar la agricultura ecológica, pero sólo por parte de las organizaciones de sociedad civil y no del gobierno.
El entrevistado refiere que ante este panorama desalentador, que sólo se le apuesta a la siembra con productos químicos, se le suma la emisión del Tratado de Libre Comercio, suscrito entre Estados Unidos y Centroamérica y del cual Honduras forma parte y que ha puesto a competir a los pequeños productores con los grandes, quienes sí cuentan con maquinaria y subsidios por parte del gobierno.
Octavio Sánchez, director de la Asociación Nacional para el Fomento de la Agricultura Ecológica (Anafae).
En este sentido apuntó que Honduras debe apostarle a la soberanía alimentaria que pasa por varios ejes entre los que citó el respeto a las leyes y convenios de protección de consumo nacional, además, que los campesinos tengan el control de la tierra y recursos como agua, territorio y semillas.
Asimismo, que los cultivos de los productores sean expuestos a mercados de cercanía, “se puede apoyar los mercados locales, mediante las ferias, además de brindarles un apoyo por parte del Estado”, acotó Sánchez en entrevista con Criterio.hn.
Finalmente, opinó que el gobierno debe establecer una política pública a favor de la producción nacional y no priorizar lo extranjero, “en sí sola no va a crecer la agricultura ecológica, tiene que haber una ley de agricultura familiar con enfoque ecológico, porque eso significa que habría apoyo financiero y capacitación, pero para ello se necesita la voluntad política”.
