Tegucigalpa. – La migración sigue siendo la válvula de escape de la pobreza a la que está sometida la sociedad hondureña, generada por la corrupción, la violencia en todos los sentidos, el desempleo y desigualdades sociales que cada día obligan a hombres y mujeres a buscar mejores oportunidades para sobrevivir.
En la ruta migratoria se observan mujeres con sus pequeños en brazos, otros que van de la mano junto a sus madres o sus hermanos y también se observan menores de edad que emprenden este camino solos, con la esperanza de reunirse con sus padres o algún familiar que los espera en los Estados Unidos.
Luis Mejía, jefe de migración de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (DINAF), informó que, del 1 de enero al 08 de febrero, 762 menores han sido retornados a Honduras.
Por su parte, Rolando Sierra, director de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (/FLACSO), expresó “la migración infantil está relacionada con los grandes temas de país, la falta de empleo y unido a las distintas violencias”.
De igual manera, el sociólogo mencionó “hay que ver los grandes factores que tienen que ver con la migración como la falta de empleo, la violencia, inseguridad e impacto del cambio climático”.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Honduras registra un 73% de pobreza y un 53% de pobreza extrema, razón por la cual, de acuerdo a estudios, los hondureños tienen en mente migrar y mejorar sus condiciones de vida.
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REUNIFICACIÓN FAMILIAR UN SUEÑO TRUNCADO
Dentro de las principales razones por las que un menor, ya sea solo o acompañado, toma la ruta migratoria hacia los Estados Unidos está la reunificación familiar.
Un sueño, que al ser detenidos por agentes de migración y ser retornados a Honduras, se ve truncado, y junto con ello, llega el temor y la desesperanza, pero también el volver a tomar el riesgo de emprender nuevamente ese camino sin importar los riesgos a los que se puede enfrentar.
“Al conversar con un niño, las causas de su viaje puede ser por la reunificación familiar” mencionó Mejía.
Por su parte, Sierra menciona que la migración infantil “es una situación que tiene que ver con la atención y las condiciones que se le da a la niñez en el país por parte del gobierno”.
Según datos de la DINAF, 300 menores en edades de 0 a 5 años, 166 de 6 a 12 años y 296 Adolescentes en edades de 12 a 17, han sido retornados al país en el 2023.
De igual manera, Mejía señaló que, una vez retornados los menores a Honduras, a través de la DINAF se les brinda atención psicológica y asistencia médica, tanto a infantes como a sus familiares.
En el caso de los menores que viajan solos, en este caso 269 entre niños y niñas, la DINAF se encarga de rastrear a sus familiares, una vez ubicados, el menor es entregado a sus familiares.
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VIOLENCIA CAUSA DE MIGRACIÓN INFANTIL
Honduras en el 2022 registró una tasa de homicidios de 35.8 % por cada 100 mil habitantes.
Pero la violencia no es exclusiva de un rango de edad especifico, y cada día se conoce de nuevos casos de menores que son víctimas de muertes violentas, el monitoreo de medios de comunicación que realiza la Red de Instituciones por los Derechos de la Niñez, Adolescencia y Juventud (Coiproden), señala que del 1 al 31 de enero del 2023 se registraron 57 víctimas de la violencia.
De acuerdo con Mejía, en la intervención a los menores retornado, resaltan los temas de inseguridad en el país, como otra razón para migrar hacia otro país, “además de la reunificación familiar, la persecución por grupos delictivos, que los han querido reclutar, y por la violencia en general son razones de migración que expresan los menores” destacó Mejía.
Según informes de Casa Alianza, desde el año 1998 hasta el 2022 se registran 14 mil 200 adolescentes y jóvenes que han sido víctimas de asesinato en Honduras.
Ante este panorama, Sierra en entrevista con Criterio.hn reiteró que el gobierno debe buscar políticas de generación de empleo, la disminución de inseguridad y violencia en el país y las condiciones en general de vulnerabilidad de derechos.
En el año 2022, Honduras cerró con más de 15,000 niñas, niños y adolescentes deportados de Estados Unidos, México y Guatemala.
En este sentido, Wilmer Vázquez, coordinador COIPRODEN, enfatizó el llamado a la presidenta Xiomara Castro, para implementar el Protocolo Nacional de Atención a la niñez migrante y la aprobación del Protocolo Binacional Honduras – Guatemala, de manera urgente.
“Nuestro llamado es a la presidencia de la república de Honduras, para que convoque urgentemente al Consejo del Sistema Integral de Garantía de Derechos de la Niñez y Adolescencia en Honduras (SIGADENAH)” esto según Velázquez, como parte de la responsabilidad del Estado como mecanismo para dar un seguimiento y una atención más comprometida a la población migrante.
De acuerdo al estudio del Barómetro de las América del 2021, el 54 % por ciento de los hondureños expresan el deseo de irse a vivir o trabajar al extranjero.
Honduras del 2014 al 2022 registró al menos 104 mil 757 niñas, niños y adolescentes retornados de Estados Unidos, México y Guatemala, de acuerdo al reporte de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (DINAF).
