Por: Redaccion CRITERIO.HN
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Tegucigalpa, Honduras.- Preocupación gira en torno a la situación educativa del país ante el impacto que genera la pandemia de la COVID-19, principalmente en el sector educativo. Hasta la fecha los colegios magisteriales han planteado al Gobierno, crear una mesa conjunta para poder realizar un plan de prevención y reintegración escolar, pero la iniciativa no se ha concretado por falta de voluntad política, denuncian maestros.
Los colegios magisteriales son del criterio que si no se toman acciones inmediatas hay dos flagelos que se incrementarán sustancialmente: la deserción escolar y el ausentismo de estudiantes en todos los niveles del sistema educativo nacional.
El presidente del Colegio de Profesores de Educación Media de Honduras, Fidel García dijo que la deserción y el ausentismo son problemas que se vienen agudizando incluso desde antes de la pandemia, por lo que con esta situación sanitaria es urgente poner ojo a ello.
Cifras de colegios magisteriales y de la Secretaría de Educación en Honduras, indican que en el 2019, hubo un total de 1 millón de niños ausentes del sistema educativo, por otra parte se habla que por la pandemia, al menos unos 600 mil niños no habrían recibido clases virtuales por falta de acceso a internet, lo cual desencadenará un incremento de la deserción.
El magisterio ha denunciado en los últimos meses que el Gobierno no ha demostrado que la educación pública sea una realidad, prueba de ello son los atrasos constantes a los pagos de salario y la incapacidad del Estado por entregar facilidades de acceso a internet a grupos de jóvenes que no tienen recursos económicos.
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“Con esta pandemia, teniendo en cuenta la pobreza que afecta a la población y las condiciones sociales generales, un aproximado de 600 mil jóvenes no han podido tener clases y esto es preocupante”, recalcó García.
El Colegio de Profesores de Educación Media, ha planteado junto a otros colegios magisteriales, la necesidad de instalar una mesa de diálogo que construya un plan de cara al cierre de año y del inicio del próximo el cual será bajo dinámicas similares a las del 2020 por la presencia de la pandemia.
“Esto debe llamarnos a establecer un programa de integración estudiantil”, dijo García quien instó a que el plan lo deben construir maestros, padres y madres y expertos en educación para que tratar de minimizar el impacto de la enfermedad en la educación pública nacional.
En ese sentido, García advirtió que si no se toman las acciones del caso, la deserción escolar perfectamente puede llegar a 300 mil niños y niñas al final del 2020.
“La deserción escolar en este año se elevará, las cifras antes de la pandemia andaba entre 50 y 60 mil, pero si ahora no se le pone mano al asunto, al cierre del año y con la enfermedad, el dato hasta puede llegar a más de 300 mil niños y niñas”, mencionó Fidel García.
Por ahora Honduras se prepara para el cierre del año 2020 y desde la perspectiva de los docentes, al Gobierno le ha quedado grande la responsabilidad de manejar la educación pública en tiempos de pandemia.
