En conmemoración del Día Internacional de la Lucha Campesina, pequeños productores del agro de diversas regiones de Honduras se congregaron en el Congreso Nacional para exigir el fin de la criminalización y desalojos violentos, así como un acceso genuino a la tierra.
Pese a su presencia, los diputados y diputadas no se acercaron a escuchar sus demandas, evidenciado la desidia de la clase política con este sector históricamente vulnerabilizado
Tegucigalpa, Honduras. – Desde diferentes puntos del país, campesinas y campesinos se trasladaron hasta Tegucigalpa, capital de Honduras en conmemoración del Día Internacional de la Lucha Campesina. El objetivo principal: exigir alto a la criminalización, desalojos violentos y acceso a la tierra.
Sandra Zulema Ochoa, líder campesina, que se trasladó desde El Triunfo, Choluteca, zona sur de Honduras, dialogó con Criterio.hn, mientras ofrecía huevos de gallina de patio, marañones y polvo de horchata para hacer refresco. Ochoa, contó que salió de su pueblo desde la una de la mañana, para poder participar y hacerse escuchar.
El informe sobre la Situación de los Derechos Humanos en Honduras 2023 de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (Oacnudh), señala que sólo en 2023, luego de la implementación de la Comisión de Seguridad Agraria y Acceso a la Tierra, se registraron al menos 37 desalojos, la mayoría en perjuicio de empresas campesinas y cooperativas agrarias, siendo los departamentos con mayor incidencia Colón (8), Atlántida (8) y Yoro (6).
El punto de reunión fue en los bajos del Congreso Nacional, como una estrategia de visibilización y concientización a los diputados y diputadas de los diferentes partidos políticos, con una exhibición y venta de alimentos, granos y hortalizas, sin embargo, lamentaron que ninguno de los congresistas se acercara a escuchar sus exigencias.
Para Yasmin López, coordinadora general del Consejo para el Desarrollo Integral de la Mujer Campesina (Codimca), la presencia de campesinas y campesinos en los bajos del Congreso Nacional forma parte de la recuperación de los espacios públicos, “esto significa recuperar lo que es del Estado, porque por muchos años este Congreso estuvo cerrado con láminas, donde no podíamos entrar “.
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ACCESO A LA TIERRA
Los problemas arraigados de desigualdad en Honduras quedan al descubierto con los altos niveles de pobreza y discriminación en las comunidades rurales, especialmente afectando a las mujeres campesinas.
El indicador de pobreza en 2021 fue de 73.6% y en el 2023 se situó en 64.1%. Mientras que la pobreza extrema en los hogares a nivel nacional, pasó de 53.7% en el 2021 a un 41.5% en el 2023, y, pese a la reducción que señala el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), la pobreza en los hogares rurales es de 64.1%
En la zona rural la mujer rural juega un papel importante en la producción agrícola, ya que muchas son campesinas que producen la tierra, pero enfrentan dificultades como el acceso a la tierra y falta de apoyo crediticio para la producción.
De acuerdo con el testimonio de Sandra Ochoa, la falta de acceso a la tierra agrava aún más la pobreza. La lideresa campesina, señaló que, para poder sembrar maíz, frijoles y hortalizas, ante la falta de tierras, se ve obligada a recurrir al alquiler de tierras cada vez que va a sembrar. Detalló que hace un pago mensual de L1,500 un aproximado de USD 60 por manzana de tierra durante el periodo de la cosecha.
Durante la exposición de productos, Criterio.hn conversó también con Higinia Méndez y María Ochoa, también del departamento de Choluteca, quienes se dedican a la alfarería, producción de granos básicos y elaboración de vinagre a base de piña y dulce de panela.
Las mujeres campesinas relataron que forman parte de un grupo que posee al menos siete vacas y un toro, y que se reparten las tareas de cuidado para obtener ganancias en común.
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EXIGEN APOYO DEL ESTADO
Abimelec Ortiz del departamento de La Paz, otro campesino que dejó sus labores en el campo para dar a conocer sus productos junto a sus compañeros de Tutule, Opatoro y zonas altas de ese departamento, expresó que uno de los principales problemas que enfrentan es la falta de apoyo del Estado para repotenciar el agro mediante la comercialización de sus productos.
De igual manera, Abimelec Ortiz señaló que la burocracia del Instituto Nacional Agrario (INA) los afecta debido a una serie de requisitos para acceder a apoyos financieros. Además, denunció que los precios de los insumos para la producción agrícola son muy elevados.
En conclusión, las organizaciones que integran la Vía Campesina en Honduras demandaron inversión del Gobierno para potenciar la producción campesina e indígena, razón por la cual solicitaron que al menos el 2% del presupuesto de la Secretaría de Agricultura Ganadería (SAG), que equivale a 60 millones de lempira, se oriente en apoyos para el sector campesino.
Además, exigieron al gobierno de la presidenta Xiomara Castro denunciar el Tratado de Libre Comercio (TLC –RD), pues consideran que los mecanismos de este tratado han destruido la agricultura nacional al permitir el ingreso de maíz y arroz a cero aranceles, así como el ingreso indiscriminado de leche en polvo, arroz, maíz, carne de cerdo y res, compitiendo de forma desleal y favoreciendo a un pequeño grupo de empresarios.
