Foto portada: Jorge Burgos/Criterio.hn
Tegucigalpa, Honduras. – La elección de las máximas autoridades del Ministerio Público ha dejado en evidencia la constante violencia política que viven las mujeres en Honduras. Los diputados y diputadas del congreso Nacional han dejado de lado a Jenny Almendares, única mujer que pasó el proceso de selección y la mejor calificada por la extinta Junta Proponente.
Para Jessica Sánchez, directora ejecutiva del Grupo Sociedad Civil (GSC), las mujeres en Honduras, a nivel general es muy difícil que tengan niveles de poder y una participación real debido a la constante violencia de género que traspasa del ámbito privado al público.
La Convención de Belém do Pará, sobre la Eliminación de toda forma de Discriminación contra la Mujer y de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, define a la violencia política como: “todas aquellas acciones y omisiones –incluida la tolerancia- que, basadas en elementos de género y dadas en el marco del ejercicio de derechos políticos-electorales, tengan por objeto o resultado menoscabar o anular el reconocimiento, goce y/o ejercicio de los derechos políticos o de las prerrogativas inherentes a un cargo público”.
En ese sentido, Migdonia Ayestas, coordinadora del Observatorio Nacional de la Violencia (ONV) de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), consideró que la violencia política hacia las mujeres, se acrecienta justo cuando las mujeres deciden participar en política o en cargo públicos.
ONU Mujeres señala que la violencia contra las mujeres en política constituye una de las principales barreras para el acceso y permanencia de las mujeres en espacios de liderazgo, representación y decisión política, limitando la igualdad de género y el empoderamiento de mujeres y niñas.
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PATRIARCADO VIGENTE
La violencia política, no sólo se ha manifestado em contra de Jenny Almendares, sino de diputadas, ministras e incluso la misma presidenta de la República, Xiomara Castro.
Durante su discurso de los 202 años de independencia patria, la mandataria reconoció la violencia que ha ejercido en contra de ella por su condición de mujer. “El amor a mi pueblo y mi inmensa tolerancia me sirven de respaldo para soportar insultos inmerecidos contra mi condición de mujer, de lideresa y de presidenta de la República”.
Sin embargo, las organizaciones de mujeres, lamentan que las autoridades gubernamentales no tomen acciones para contrarrestar las múltiples violencias de las que son víctimas.
“Este es un país bastante patriarcal y violento con las mujeres”, señaló Jessica Sánchez.
Además, indicó que la participación de la mujer en la política o en un cargo público, no se garantiza sólo con la cuota de género. En su análisis, Jessica Sánchez, menciona que, si una mujer llega a un puesto político y tiene a ocho hombres en esa institución, únicamente tendrá dos opciones: pactar con los ocho hombres o hacer sola su trabajo y propuestas.
Por su parte Migdonia Ayestas, consideró que la violencia política se ejerce desde el patriarcado porque, “son los hombres creyendo tener el control de instituciones o de las personas”.
ELECCIÓN DE FISCALES: JUEGO O NEGOCIACIÓN ENTRE PARTIDOS POLÍTICOS
Las mujeres en Honduras enfrentan una deuda judicial que sobrepasa el 95% de impunidad, por lo que exigen que Jenny Almendares sea la nueva fiscal general, por considera, además de la mejor calificada –95.55 %—, como una fiscal que puede responder a las necesidades de acceso a la justica de mujeres y niñas.
A más de un mes de fecha limite en la que Honduras debia tener nuevas autoridades del MP, dicha selección continúa entrampada en el Congreso Nacional, donde Jenny Almendares, únicamente figura en la nómina del Partido Salvador de Honduras, como fiscal adjunta.
Para Migdonia Ayestas, el hecho que no se tome en cuenta a Jenny Almendares, parte porque consideran que la única mujer del proceso de elección de fiscales no va a favorecer los intereses de la clase política.
“Necesitamos que favorezca a los intereses del país de la gran mayoría que es pobre y que requiere una justicia efectiva y que el Ministerio Público sea el que los represente” reafirmó Ayestas. De igual manera, agregó que la elección de fiscales “es un juego o una negociación entre partidos políticos”.
En el caso del Partido Libertad y Refundación (Libre), la candidata mejor evaluada, ni siquiera forma parte, una acción que han criticado las organizaciones de mujeres, ya que el partido oficialista tomó como bandera durante la campaña política, las necesidades de las mujeres.
Criterio.hn, consultó al diputado del Partido Libre y vicepresidente del Congreso Nacional, Rasel Tomé, la razón por la que Jenny Almendares no fue tomada en cuenta.
En ese sentido, el diputado Tomé respondió “fuimos elecciones en noviembre del 2021 y el partido que ganó las elecciones es el Partido Libre, a quien le toca proponer para fiscal general y adjunto, es al partido libre”.
Ante la evasiva del diputado Rasel Tomé, Criterio.hn, nuevamente consultó por qué no incluir a Jenny Almendares dentro de la nómina, sin embargo, el diputado señaló que era al Partido Libre quien le correspondía dicha selección; y agregó Libre presentó una propuesta –Johel Zelaya para fiscal general y Marcio Cabañas, para fiscal Adjunto—, de la cual “no hemos recibido ninguna contrapropuesta”.
Desde que se conoció la lista de los cinco candidatos, las organizaciones de mujeres exigen que se respeta la igualdad de género y la meritocracia de Jenny Almendarez y sea nombrada como fiscal general de la república.
