Los comisionados serán electos por mayoría calificada (86 votos) y se desempeñarán en el cargo por un periodo de seis años
Tegucigalpa, Honduras. – El Congreso Nacional ha iniciado el proceso de elección de los comisionados de la Unidad de Financiamiento, Transparencia y Fiscalización de Partidos Políticos y Candidatos (Política Limpia) para lo cual convocó a los interesados en integrar dicho órgano de fiscalización electoral presentar sus postulaciones ante la Secretaría del Poder Legislativo.
En el comunicado emitido por ese poder del Estado señala que los aspirantes tienen un plazo de 10 días hábiles para presentar sus postulaciones y acreditar los requisitos que establece la ley, pero hay que tener en cuenta que la Unidad de Política Limpia no cuenta con una normativa, ya que está supeditada a la Ley Electoral de Honduras específicamente al Consejo Nacional Electoral (CNE).
La Constitución de la República establece que para ser comisionado de la Unidad de Política Limpia son los mismos requisitos para ser consejero del CNE.
Estos requisitos implican que el postulante debe ser hondureño por nacimiento y ser mayor de 25 años, esta persona debe ser de reconocida honorabilidad e idoneidad para el cargo y estar en pleno ejercicio de sus derechos civiles.
No podrán ser electos los que estén nominados para ocupar u ostenten cargos de elección popular en los últimos 6 años; no haber ostentado cargo de autoridad partidaria en el mismo periodo de tiempo, entre otros.
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¿ES NECESARIA UNA LEY PARA EL FUNCIONAMIENTO DE LA UNIDAD DE POLÍTICA LIMPIA?
A criterio del director del Instituto Holandés para la Democracia Multipartidaria (NIMD, en inglés), Luis León la Unidad de Política Limpia debería contar con su propia ley para asegurar la independencia de dicho órgano de fiscalización electoral.
Está normativa debe ser sin sesgos ideológicos o políticos partidarios, y ser independiente, para que ellos puedan operar libremente sin importar que partido político esté en el poder.
En una entrevista con Criterio.hn declaró que desde el NIMD se ha dado apoyo para el desarrollo de una Ley para la Unidad de Financiamiento, Transparencia y Fiscalización de Partidos Políticos y Candidatos, pero es algo que requiere el acompañamiento del Congreso Nacional.
“Los políticos no tienen mucho interés en ser transparente pues a estas alturas, muchos políticos todavía no han presentado sus informes ante la Unidad de Política Limpia.
Entonces creo que darle una ley y presupuesto a esta unidad”, expuso.
A juicio del analista la Unidad de Política Limpia no ha sido para nada una organización exitosa, ya que lastimosamente el trabajo de ellos se centró en estar verificando facturas y no hacer una investigación seria. Parte del fracaso de este órgano fiscalizador es la falta de recurso financiero y humano, la cobertura institucional.
De igual manera, señala que la Unidad de Política Limpia es de esas instituciones que están coartadas por los políticos, “aquí tenemos al gato cuidando al ratón, y el ratón cuidando al queso, entonces son los mismos partidos políticos investigándose eso no va a funcionar nunca”.
En ese sentido, dijo que los partidos políticos no deberían ser los que nombren a los comisionados de la Unidad de Financiamiento, Transparencia y Fiscalización de Partidos Políticos y Candidatos.
León, aspira que Honduras tenga un órgano fiscalizador electoral independiente y con capacidad de investigación, pero paralelo eso debería haber un Ministerio Público y un sistema judicial capaz, que deben ser acompañados por una policía de investigación.
“Nuestro problema es estructural, tenemos una estructura de país realmente débil y eso no va a permitir ni que la Unidad de Política Limpia ni nada funcione. Estamos coartados por la política”, lamentó
Por último, pide dotar de recurso financiero, humano y logístico adecuado porque la Unidad de Política Limpia son 40 personas queriendo auditar 8.000 candidatos de elección popular en todo el país. Eso es imposible hacer, entonces se debe procurar dar las capacidades reales para que puedan operar.
Por su parte, el director de Gobernabilidad y Transparencia de la Asociación por una Sociedad más Justa (ASJ), Lester Ramírez no cree que una ley propia vaya a cambiar los resultados que da la Unidad de Política Limpia porque es una institución altamente politizada.
Durante una conversación con este medio digital Ramírez señala que ese órgano fiscalizador electoral tiene un fin muy particular, que es proteger los intereses de los candidatos y de los partidos políticos.
Sumado a ellos, expone que la Unidad de Política Limpia no un ente fiscalizador, supervisor y menos contralora, es todo lo contrario. Agregó que “una ley no le va a cambiar su naturaleza, porque los políticos le han impregnado esa naturaleza y al final son los políticos los que escogen quienes van a ser los comisionados de la Unidad de Política Limpia”.
Según el entrevistado, en Honduras tiene que pasar un escándalo de proporciones enormes en materia de financiamiento político, incluso más grandes que los expuesto por la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH) que demostró como la política es financiada de lo ilegal y en algunos casos con dinero proveniente del narcotráfico y de la criminalidad.
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CREACIÓN DE LA UNIDAD DE POLÍTICA LIMPIA
El 2 de noviembre de 2016 después de un amplio debate, el pleno del Congreso Nacional aprobó el decreto 137-2016 que contiene la Ley de Financiamiento, Transparencia y Fiscalización a Partidos Políticos y Candidatos (UFTF) con el objetivo de establecer las normas relativas al Sistema de Financiamiento, Transparencia y Fiscalización de los ingreso y egresos de los recursos de los Partidos Políticos, movimientos internos de los Partidos Políticos, sus candidatos y candidatas, Alianzas entre los Partidos Políticos y Candidaturas Independientes.
Este Decreto entra en vigencia a partir de su publicación en el Diario Oficial la Gaceta el 18 de enero 2017. La Unidad de Financiamiento, Transparencia y Fiscalización a Partidos Políticos y Candidatos surgió como una respuesta a los constantes señalamientos del sucio financiamiento que circula durante las campañas electorales en Honduras, sin embargo, únicamente se ha reducido a un órgano administrativo, caracterizado por la repartición de cuotas por parte de los tres partidos políticos principales, y que lejos de fiscalizar a los candidatos incumplidores, parece protegerlos.
En un trabajo realizado por Criterio.hn señala que la Unidad de Financiamiento, Transparencia y Fiscalización a Partidos Políticos y Candidatos (UFTF), se muestra incapaz de cumplir con la ley y sancionar a aquellos políticos que han incumplido con la presentación de los informes sobre el gasto y el financiamiento de sus campañas. Incluso sus actuaciones están dando muestras de colusión o encubrimiento.
La afirmación anterior se sustenta en un sondeo que hizo este medio de comunicación sobre la presentación de los informes por parte de los diputados y diputadas al Congreso Nacional que resultaron electos en el proceso electoral de 2021. De hecho, nos encontramos con actuaciones poco convincentes que generan suspicacia sobre los alcances de los mecanismos de fiscalización de partidos políticos y el seguimiento al cumplimiento de las sanciones.
