Tegucigalpa. – Directo desde Casa Presidencial, durante el gobierno de Juan Orlando Hernández, los padres de la capitán de infantería de las Fuerzas Armadas, Patricia Valladares, recibieron contundentes amenazas por pedir la investigación del supuesto accidente aéreo donde falleció Hilda Hernández, hermana del exgobernante y sus acompañantes.
Ese 16 de diciembre de 2017, fallecieron también los miembros de seguridad Nahún Lagos y Marcos Banegas; el teniente de aviación Iván Esaú Vásquez (piloto) y el subteniente Gerson Alcedín Díaz (copiloto).
Este caso mostró desde de su inicio una serie de inconstancias, puesto que se comprobó a través de una nota realizada en alianza entre Criterio.hn y Reporteros de Investigación que entres las irregularidades hubo control de los militares en la escena del crimen. Además, especialistas manifestaron que la aeronave estalló en el aire, el origen del estallido sigue en secreto y los documentos de autopsia están ocultos.
Los padres de Patricia Valladares, quedaron con un mal sabor de boca desde ese día, provocado por la forma en que acontecieron los fallecimientos y el hermetismo con que se manejó, ya que ni siquiera les confirmaron con pruebas que era su hija quien estaba dentro del féretro.
La madre de Patricia, Dora Rubio, reveló a un canal de televisión que se mantuvieron en silencio durante estos últimos cuatro años debido a amenazas directas desde la Casa Presidencial.
Un mes después de la muerte de su hija, Rubio intentó pedir celeridad al caso por medio de la madre del exmandatario, Elvira Alvarado Castillo, pero no tuvo respuesta. Sin embargo, por la noche recibió una llamada de un número extraño -según ella lo recuerda-.
“Mire, la estamos llamando de Casa Presidencial, queremos decirle, señora no hable, cierre la boca, usted no tiene nada de qué hablar, tiene cuatro miembros más en las Fuerzas Armadas y podría ser peligroso”, relata sobre el aviso que recibió.
Ante la incertidumbre que han vivido desde ese entonces, aprovecharon el inicio del nuevo gobierno para exigir una nueva investigación, pues aseguran que su hija “Paty” murió en un atentado donde ella no era el objetivo.
“Como muchas cosas que han sucedido en Honduras, como tantas muertes y asesinatos que ha habido, en este tiempo yo he escuchado muchas cosas”, dijo Rubio y señaló que ya es tiempo de hablar, además cree que el expresidente Hernández ordenó mantenerlos callarlos y no revelar ninguna información.
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EXIGEN NUEVA INVESTIGACIÓN
Cada fin de semana que visitan la tumba de su hija, su padre, Óscar Valladares, siente la frustración de no saber si esos son sus restos, pues solo se le confirmaron de palabra los resultados de la supuesta prueba de ADN, que terminó por llenarlos de dudas.
“No teníamos permiso de nada, ni de abrir el ataúd”, dijo Óscar Valladares.
Los padres recuerdan con tristeza que su hija llegaba de sus prácticas cuando estuvo en la Fuerza Aérea con moretes y golpes, lo cual ve como un esfuerzo desperdiciado, porque siente que la muerte de su hija quedó como un tema incierto.
Las versiones que se mantuvieron, tal como lo había informado en ese entonces las Fuerzas Aérea de Honduras en que el accidente se debió a desperfectos mecánicos, error del piloto o condiciones climáticas desfavorables.
Actualmente, el exmandatario ha sido sometido al proceso de extradición por solicitud de Estados Unidos. Hernández es imputado por tres delitos de narcotráfico: conspiración por poseer, importar, fabricar y distribuir una sustancia controlada a Estados Unidos; usar o portar armas de fuego o ayudar e instigar al uso, el porte y posesión de armas de fuego en apoyo a la conspiración de importación de narcóticos y conspiración para usar o portar armas de fuego incluyendo ametralladoras y dispositivos destructivos en apoyo de la conspiración de importación de narcóticos.
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TESTIMONIOS COINCIDEN EN VENGANZA DE LOS VALLE VALLE
En 2020 Criterio.hn y Reporteros de Investigación, consultaron a distintos sectores respecto a la muerte reportada de Hilda Hernández, lo cual dejó clara la alta secretividad del Estado, no existe acceso a documentación que respalde los trámites legales y den constancia de su muerte, razón por la que diversos sectores dudan de la veracidad de la muerte.
Po otra parte, los testimonios en San Pedro Sula y Copán, coincidían que el estallido del helicóptero en el aire pudo ser una venganza del Cártel de Sinaloa, a través de los Valle Valle, debido a la traición de Juan Orlando Hernández.
Ese día, Hilda Hernández se trasladaba desde Tegucigalpa hacia su residencia de la ciudad de Comayagua, en la zona central del país, ubicada a 85 kilómetros de Tegucigalpa. Según información de la Fuerza Área, el accidente ocurrió en una aeronave tipo Ecueriel AS 350 B-30, matrícula FAH-905, pero luego varios medios de comunicación informaron que la aeronave había sido incautada a integrantes del narcotráfico.
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Tengo algunos años de experiencia y me encanta practicar el periodismo incómodo que toque los tinglados del poder, buscando cambios en la forma de gobernar y procurar el combate a la corrupción, develando lo que el poder siempre quiere ocultar. Ver todas las entradas
Un comentario
Deseamos, esperamos y suplicamos al altisimo, que se lleven YA a JOH a New York, New York y le pongan la inyección y cante sin parar todo lo que sabe de todo, corrupcion, Hilda, narco, desvios, sobornos