Tener más de 20 años de experiencia trabajando en el Ministerio Público y contar con más de 50 talleres, diplomados y seminarios relacionados con el derecho penal, pesaría más, para los diputados, que sugerir cerrar una investigación de un caso que provocó pérdidas millonarias al Estado
Marcio Cabañas Cadillo, de 47 años de edad, es el candidato más fuerte, hasta el momento, de quedarse ya sea como fiscal general o fiscal general adjunto del Ministerio Público.
Tegucigalpa, Honduras. – Marcio Cabañas Cadillo, el único de los cinco aspirantes a fiscal general y fiscal adjunto del Ministerio Público (MP) que figuró entre las dos mociones presentadas por los diputados en la sesión del martes en el Congreso Nacional, se encuentra envuelto en una irregularidad que podría ser causal para que no logre ostentar la titularidad de la fiscalía para el periodo 2023-2028.
Marcio Cabañas Cadillo, de 47 años, es originario de Tegucigalpa, Francisco Morazán. En 1999 egresó de la licenciatura en Ciencias Jurídicas en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y tres años después se tituló como abogado, pero desde antes de iniciar sus estudios universitarios ya se desempeñaba como litigador privado.
En la hoja de vida de Cabañas, colgada en el Portal de Transparencia de la Junta Proponente, se encontró que desde el 2000 comenzó a trabajar en el Ministerio Público, desempeñándose en un principio como procurador especial contra la corrupción hasta convertirse en fiscal titular III, en la Fiscalía especial contra delitos tributarios y conexos, cargo en el que continúa hasta la fecha.
Cabañas Cadillo actualmente devenga en el Ministerio Público un salario de 121, 350. 88 lempiras, distinto a la cifra que gozó mientras se desempeñaba como analista de investigación III, en la Secretaría de Seguridad, de un poco más de 7 mil lempiras, en este último puesto sólo trabajó seis meses, según establece su hoja de vida.
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IMPASSE DE CABAÑAS CADILLO
Desde 2004, en el último año de Roy Edmundo Orellana como titular de la fiscalía, hasta el uno de febrero de 2011, Cabañas Cadillo se desempeñó como asistente del fiscal general de la república, precisamente en los últimos años que ocupó ese cargo, figuró en una serie de irregularidades que podrían pasarle factura en su aspiración a ser una de las máximas autoridades del MP.
Mientras seguía en el cargo en 2009, haciendo uso de las facultades que gozaba, recomendó—, al entonces fiscal general, Leónidas Rosa Bautista (2005-2009), que renunció al cargo tras no soportar la presión, consecuencia de su mala administración—, desestimar o literalmente cerrar la investigación en el famoso caso de corrupción denominado “tráfico gris”, que representó una millonaria pérdida a la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel).
En un oficio del Ministerio Público emitido el 15 de abril de 2009, se lee cómo Cabañas Cadillo sugiere de manera literal el cierre de las investigaciones contra Mauricio Kattán Salen, abogado que, en ese entonces, era el representante legal de la empresa Inversiones Apolo Sociedad Anónima, que ocasionó un robo al Estado entre 2005 y 2008.
Esta empresa, mejor conocida como “Pronto” fue la encargada, de acuerdo con la investigación del Ministerio Público, de generar el contrabando de comunicaciones telefónicas internacionales hacia Honduras, con el objetivo de reducir el costo de terminación.
En palabras sencillas “Pronto”, en el caso “Tráfico Gris”, se encargó de apropiarse del poder y operatividad exclusiva que tenía la estatal telefónica hondureña y, de esa manera, se quedaba con gran parte de capital que no le correspondía, generando pérdidas a Hondutel, que en ese tiempo era administrado por Marcelo Chimirri, que oscilaban entre los 11.2 millones de lempiras.
Aunque Cabañas Cadillo no fue el orquestador de ese robo al Estado, tampoco era titular de la empresa, fue uno de los impulsadores para que se desestimara ese caso que, hasta la fecha, continúa en impunidad y seguramente así se mantendría, si lograra la titularidad del Ministerio Público durante los próximos cinco años.
Para el diputado del partido Libertad y Refundación (Libre) Jari Dixon Herrera, es sorpresivo que Cabañas Cadillo haya pasado el filtro que realizó la Junta Proponente y, ahora, esté logrando la venia de los partidos políticos para que sea el próximo fiscal general, pese a tener manchas en su carrera en el ente investigador.
“Me resulta inadmisible verlo ahí de candidato a fiscal. Él cerró el caso de Pronto y está esperando ser apoyado para quedarse con la fiscalía general (…) ahí (MP) se engavetaron cualquier cantidad de casos y se cometieron cualquier cantidad de actos irregulares”, mencionó Herrera en medios de comunicación.
Jari Herrera conoció de cerca este caso porque, en aquél entonces, antes de incursionar al ruedo político, fungió como fiscal anticorrupción y, precisamente en el año 2008, junto a un grupo de fiscales, incluyendo al titular de la Unidad Fiscal Especializada Contra Redes de Corrupción (Uferco) Luis Javier Santos, emprendió una huelga de hambre por la corrupción que imperaba en la Fiscalía dirigida por Leónidas Bautista, que era asistido por Cabañas Cadillo.
Tener más de 50 diplomados, cursos y talleres ligados a la rama penal y procesal del derecho y contar con más de 20 años de trabajar en el MP, al parecer es suficiente para que Cabañas Cadillo sea electo por los diputados de las diferentes bancadas, pese a provocar el cierre de una investigación de un caso que perjudicó al Estado.
Para Julissa Villanueva, que fue directora de Medicina Forense del Ministerio Público desde 2013 hasta 2018 y actualmente es viceministra de Seguridad, aunque cualquier candidato cuente con el perfil idóneo para ostentar la titularidad de la fiscalía, si cometió errores en el pasado, es suficiente causal para no ser ni promovido por los diputados.
“No se debe promover ni apoyar a candidatos, para la Fiscalía, que han cometido graves errores en el pasado porque sería darle continuidad al trabajo que se viene haciendo. Queremos una Fiscalía que persiga el delito y los corruptos”, dijo Villanueva a Criterio.hn.
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CABAÑAS CADILLO, CON MÁS POSIBILIDADES
Hasta el momento desde el Congreso Nacional todavía no logran consensos para elegir al nuevo fiscal general y fiscal general adjunto del Ministerio Público, pero las bancadas mayoritarias de ese poder del Estado, están de acuerdo en que Marcio Cabañas Cadillo quede en uno de los cargos, ya sea fiscal general o adjunto.
Evidencia de lo anterior, es que en la sesión legislativa celebrada el pasado martes 29 de agosto, la bancada del partido Libertad y Refundación (Libre) presentó ante el pleno de diputados la moción nominativa que promovía a Johel Zelaya como fiscal general y a Marcio Cabañas Cadillo como adjunto, pero no fue valorada porque no alcanzó la mayoría calificada de votos (86).
Lo mismo pasó con la moción presentada por el Partido Salvador de Honduras (PSH), en consenso con las bancadas del Partido Nacional y Liberal, que dejaba a Marcio Cabañas Cadillo como fiscal general y a Jenny Gabriela Almendares como adjunta, pero no fue valorada, ya que sólo alcanzó 70 votos.
En la evaluación que hizo la Junta Proponente, Marcio Cabañas Cadillo obtuvo la tercera mejor calificación de la nómina de los mejores cinco, con 84.63% de 100, posicionándose debajo del abogado Mario Morazán y Jenny Gabriela Almendares, la mejor calificada por los proponentes.
En cambio, en la evaluación que realizó la comisión interpartidaria del Congreso Nacional, Cabañas Cadillo fue el segundo mejor calificado, con 84% de 100, únicamente superado por Johel Zelaya, el ungido del oficialismo, que logró el 90%.
Con o sin Cabañas Cadillo entre las opciones para llevar las riendas del Ministerio Público, el Congreso Nacional está obligado a elegir antes del uno de septiembre a las nuevas autoridades del Ministerio Público, que estarían en los cargos hasta septiembre de 2028, según dice la Ley Orgánica del ente investigador.
Actualmente la titularidad del Ministerio Público recae sobre el fiscal general Óscar Fernando Chinchilla y el adjunto Daniel Sabrián, ambos cuestionados por promover la impunidad y la corrupción durante el tiempo que estuvieron al mando de la Fiscalía.
