Tegucigalpa, Honduras.- La emisión de licencias de conducir digitales no sólo ha provocado que La Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT) deje de percibir una cantidad millonaria de dinero, siendo los principales afectados, sino que ahora ha desencadenado una crisis en el rubro del transporte de carga pesada, porque no les permiten las circulación por otros países centroamericanos con el permiso digital, según han denunciado.
“Tenemos un gran problema en el sector de transporte de carga con el tema de las licencias. Nosotros tenemos que viajar fuera del país, pero prácticamente con esto (enseñó una licencia de conducir en un papel) estamos parados, no me puedo mover porque este tipo de licencias no vale, sólo aquí en el país”, denunció en medios de comunicación un transportista que se limitó a dar su nombre.
Agregó que “en Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Guatemala y El Salvador no nos sirve, esto no es una alternativa. Necesitamos que el gobierno nos atienda y nos dé respuestas, pero respuestas concretas, no que nos dejen en el aire como lo han venido haciendo”.
De acuerdo con la denuncia, la problemática, que podría haber sido provocada por un mega caso de corrupción en el interior de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte años atrás, está provocando que conductores de carga pesada extranjeros trabajen con plena libertad, mientras los hondureños están siendo afectados por sus propias autoridades que les han cerrado las puertas a los diálogos.
“Imagínese que por esa problemática que tenemos en el país hay una gran cantidad de extranjeros trabajando y nosotros nos mantenemos parados por el tema de las licencias, también porque hay tanta política; tanta ley que el gobierno está imponiendo”, mencionó.
Por lo anterior, desde el sector de transporte de carga pesada advierten que, en los próximos días, si no hay respuestas favorables desde las autoridades, se tendrán que manifestar en las calles “porque es la única manera de llamarles la atención”.
De igual manera, desde las redes sociales varios usuarios están denunciando que, como una respuesta viable, las autoridades de la DNVT están entregando las licencias en papel para que ellos después las plastifiquen.
Desde Criterio.hn se intentó dialogar con las autoridades de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte y del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre (IHTT) para conocer, por ejemplo, cómo están abordando el tema de las licencias y qué medidas implementarán para que los transportistas no se vean afectados en otros países, pero hasta la publicación de este artículo no respondieron ni mensajes ni llamadas.
De acuerdo con información que el equipo de investigación de Criterio.hn conoció, en los primeros seis meses de este 2023, por no tener material para imprimir las licencias de conducir, la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte, ha perdido casi 50 millones de lempiras, con relación a los ingresos del mismo periodo en 2022, que la institución era dirigida por el comisionado Roger Madariaga, que fue sustituido del cargo.
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De igual manera, entre enero y mayo de 2023, la DNVT sólo recaudó más de 12 millones de lempiras en el tema de renovación y emisión de licencias de conducir, sin embargo, durante el mismo periodo en 2022, se recaudaron más de L 61 millones, evidenciando el fracaso que han tenido las autoridades en el manejo de la DNVT.
Este déficit económico que atraviesa la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte es el más bajo que se ha registrado en los últimos años, superando por mucho al que se registró entre abril y mayo de 2020, que sólo se recaudaron 400 lempiras porque el país estaba enfrentando el golpe de la pandemia del Covid-19 y para ese entonces no se estaba atendiendo a la población.
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¿QUÉ PASÓ CON LA EMISIÓN DE LICENCIAS?
Una compra irregular de material para emitir licencias de conducir es lo que habría desencadenado la actual crisis que está atravesando la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte que, pese a ser los principales afectados, el efecto negativo está derivando en sectores de la sociedad, como lo denunció el rubro de transporte de carga pesada.
“Tenemos conocimiento que la Dirección de Asuntos Disciplinarios Policiales (Didadpol) y, por las diversas acciones que llevó a cabo la Secretaría de Seguridad a nivel administrativo, que hubo una compra de forma fraudulenta de material para la emisión de licencias el año pasado”, contó el abogado Kenneth Madrid a Criterio.hn.
El abogado explicó que esa compra no siguió los procedimientos que están establecidos en la Ley de Contratación del Estado porque se detectaron varías anomalías que le terminó costando el despido a la persona encargada de hacer dicha licitación que, hasta la fecha, ha empañado el desempeño de la presidenta hondureña Xiomara Castro.
Para Madrid esta crisis sólo pone en evidencia que la cúpula que está llevando las riendas de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte carece de capacidad administrativa porque, a su criterio, una institución debe estar dotada de insumos por si ocurre un imprevisto.
“¿Por qué aparte de ser un caso de corrupción, también es un caso de inoperancia administrativa?, porque deben saber que nunca de be faltar material para emitir licencias. El no poder responder a tiempo, los hace ver incapaces”, valoró Madrid.
Agregó que “cuando una institución como la DNVT es preventiva y capaz se nota por la forma de ejecución que tienen. Los implementos que necesitan para el 2023 se debieron hacer en el proceso de 2022. Y no esperar que pase un acto de corrupción para dejar sin soluciones a la población”.
Criterio.hn encontró que en noviembre de 2022 la Secretaría de Seguridad declaró fracasada la licitación pública No. SEDS-LPN- GA-2022-032 porque sólo una empresa, de las varias que se postularon, pasó las fases de evaluación legal, financiera y técnica, lo que pudo originar el desabastecimiento de materiales para este 2023, pero las autoridades de la institución armado nunca han dado declaraciones al respecto.
Desde la DNVT, a inicios de año que se destapó el caso de corrupción y la crisis, venían anunciando que comenzarían con la emisión de licencias en abril, pero no lo hicieron, después se excusaron y dijeron que, en mayo, y tampoco pasó, para finalmente reconocer que no tenían materiales para imprimir licencias y la salida más viable era entregarlas en papel o de manera digital.
Lo que comenzaron a hacer a mediados de junio, pero, hasta la fecha, todavía no han dicho cuándo comenzarán a entregar el documento tangible, como lo están exigiendo desde varios sectores de la sociedad.
