Tegucigalpa, Honduras.- Ante la falta de materiales para tramitar licencias de conducir y permiso de portar armas de fuego en el país, conflicto que se viene arrastrando desde inicios de 2023, los altos funcionarios de la Policía Nacional determinaron brindar estos documentos de manera digital, algo que, según expertos, es una salida temporal al inconveniente, pero no definitiva.
Por ejemplo, el coordinador de Justicia y Seguridad de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), Kenneth Madrid, es del criterio que es una alternativa que podría implementarse por un par de meses, pero no de manera definitiva, porque la población hondureña no va de la mano con los avances digitales.
“Es una salida momentánea, temporal, pero claramente eso no va a resolver el conflicto. Están buscando cómo salir del impasse, pero el problema no es ese. Primero es reconocer que nos gustaría, pero Honduras no va de la mano con la modernidad digital, ojalá fuera así”, mencionó Madrid.
Agregó que “Definitivamente hay que pensar un poco en cómo se va a implementar en las zonas rurales del país, en donde poseen un carro para trabajar, pero no un teléfono en el que puedan mantener el permiso digital, ¿cuál sería la solución en esa parte? o ¿ese tipo de licencia serviría a las personas que viven fuera del país?”.
De igual manera, Madrid aseguró que, hasta el momento, no se ha resuelto el caso de corrupción que desencadenó esta crisis en el interior de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT), algo que podría estar poniendo en evidencia que en realidad no se está luchando con el problema de manera frontal.
“Este caso de corrupción comenzó en el gobierno anterior (2018-2022 Juan Orlando Hernández). Los anteriores funcionarios hicieron una compra directa de PVC y tinta (materiales para hacer las licencias), algo hecho en el marco de la ilegalidad porque las compras directas sólo se hacían en emergencias y producto de eso desapareció el dinero”, contó.
“Después hubo una investigación fuerte, en la que descubrieron un tentáculo de ese caso de corrupción. Tengo entendido que pasaron los expedientes de algunos responsables al Ministerio Público, pero, por ese caso de corrupción del pasado, sumado a la actual inoperancia, ahora estamos pagando consecuencias”, añadió Madrid.
Y es que el pasado fin de semana el secretario de Seguridad, Gustavo Sánchez, que hace poco acaba de asumir el cargo tras la salida de Ramón Sabillón, notificó que la solución al problema de las licencias será entregarlas de manera digital.
Sin precisar en qué día o mes, Sánchez escribió en su cuenta de Twitter: “anunciamos que en los próximos días lanzaremos emisión digital de permiso de conducir y también la licencia de portación de arma de fuego. Con las medidas de seguridad correspondientes, como una forma más eficiente de atención a la ciudadanía”.
Criterio.hn trató de comunicarse con el departamento de prensa de la Policía Nacional para conocer cómo abarcarían a toda la población con la emisión de licencias digitales, pero hasta la publicación de este artículo no hubo respuesta.
COMPRA DE EMERGENCIA
Madrid planteó que una de las alternativas que puede utilizar la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte es pedir, a través de la Secretaría de Seguridad, al Congreso Nacional una compra directa sin necesidad de pasar por el proceso de licitación que podría durar, bien hecho, unos cuatro meses.
“¿Por qué la Secretaría de Seguridad no pide al Congreso un decreto de emergencia para hacer compras directas por el resto de año?, emiten decretos por otros temas que no son de emergencia nacional ni de Estado”, analizó.
“Lo que están haciendo es apagar un fuego, pero no de manera correcta. Ya prácticamente llevamos seis meses en esto, y seguramente vamos a terminar el resto del año de esta misma manera sin buscar solucione integrales”, agregó.
Sin embargo, lo planteado por Madrid, gracias a los antecedentes de otras instituciones del Estado, es algo que no se debe replicar. Por ejemplo, en la administración del actual ministro de Salud, José Manuel Matheu, se le facultó hacer compras directas, pero hasta la fecha los hospitales continúan desabastecidos.
Matheu, quien primero salió electo como diputado del Partido Salvador de Honduras (PSH) y después decidió ser ministro, enfrenta conflictos por no desarrollar los procesos de licitaciones que prevé la Ley de Contrataciones del Estado para asegurarse de la dotación de medicamentos, insumos y equipo sanitario.
Por lo anterior, el Poder Ejecutivo el 16 de enero de 2023 emitió el PCM-04-2023 que mantiene en emergencia sanitaria el país y con ello se faculta a la Secretaría de Salud hacer compras y contrataciones directas, medida que se mantendrá hasta el 31 diciembre de 2023.
Entonces, por el antecedente más cercano, y lo que podría suceder en la DNTV, Mirna Flores, investigadora en temas de seguridad, del Centro de Estudios para la Democracia (Cespad) considera que no sería adecuado buscar esa alternativa.
Nota relacionada: Corrupción e incapacidad: motivos por los que la DNVT no estaría emitiendo licencias de conducir
FRACASO EN LICITACIÓN
A mediados de abril del corriente año, las autoridades de la DNVT alardearon que, para mayo del mismo año arrancarían nuevamente con el proceso de emisión de licencias de conducir, bajo el argumento que estaba por terminar la licitación de los materiales.
Sin embargo, mostrando su ineficiencia, las autoridades de la institución armada, anunciaron que el proceso de licitación de los materiales para la emisión de licencias fracasó y se tendría iniciar uno nuevo, por lo que, sin más explicaciones, la crisis continuaría hasta finales de 2023.
La licencia de conducir se dejó de emitir a finales de enero de 2023, bajo el argumento que no contaban con los principales materiales para llevar a cabo la elaboración.
Para elaborar una licencia se necesitan láminas de pvc y tintas. El costo actual de un permiso de conducir es de 600 lempiras, sumado a los gastos de los exámenes médicos que andan en unos L 500.
De acuerdo con datos no oficiales, sólo en Francisco Morazán, se estaban emitiendo, más de 600 licencias de conducir diariamente, entre livianas (carros), pesadas (buses y camiones) y para motocicletas, y las pérdidas económicas para la institución son millonarias.
