Tegucigalpa.- “Muchos funcionarios se incomodaron porque se le puso rostro a la corrupción, además se cumplió un papel importante para identificar y develar las modalidades de corrupción que existen en el país”, expresó la exvocera de la desaparecida Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad de Honduras (MACCIH), Ana María Calderón.
Calderón señaló que el mecanismo de investigación realizado por los equipos integrados y de persecución penal de la MACCIH, así como de la Unidad Fiscal Especial Contra la Impunidad y la Corrupción (UFECIC), eran “una piedra en el zapato, para las elites corruptas”.
A la Corte Suprema de Justicia y al Congreso Nacional les incomodaba que se le pusiera nombre a los corruptos, por lo tanto, ellos fueron los que concertaron diversas estrategias para dificultar las actuaciones de la MACCIH y así terminaron con el convenio en enero del 2020.
Respecto al tema, quién fungió como vocero de la MACCIH en el 2016, Juan Jiménez Mayor, fue claro y contundente al afirmar que luego de la expulsión de la Misión, Honduras no logró avanzar en la lucha contra la corrupción e impunidad.
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La MACCIH se instaló en Honduras el 22 de febrero de 2016, luego que en el 2015 se denunciara el desfalco millonario al Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) y cerró sus operaciones el 19 de enero de 2020, en virtud que el Congreso Nacional, en colusión con el Poder Ejecutivo, se negó a extender su periodo de vigencia.
En su estadía acompañó a la también desmantelada Unidad Fiscal Especial Contra la Impunidad de la Corrupción (UFECIC) en el procesamiento de 133 personas y en la judicialización de 14 casos, entre ellos: Red de Diputados, Caja Chica de la Dama, Pacto de Impunidad, Caja Pandora, Bienes Pandora, Caja Chica del Hermano, Licitación Fraudulenta, Arca Abierta, Bienes Caja Chica de la Dama, Fraude sobre el Gualcarque, Patuca III y Corrupción sobre Ruedas.
Por su parte el enviado especial del Departamento de Estado para el Triángulo Norte, Ricardo Zúñiga, afirmó que «para Estados Unidos fue decepcionante ver la salida de la MACCIH y la CICIG», esto en referencia a la motivación para la creación de la Comisión de Combate a la Corrupción que funcionaría en Guatemala, Honduras y El Salvador
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González agregó que «el tema de la corrupción es algo que es endémico para Centroamérica» por lo que es un tema toral en la política de Biden, pues ven en la corrupción a uno de los principales expulsores de migrantes.
Por eso se ha creado el Centro Contra la Corrupción y la Impunidad en el Norte de Centroamérica (CCINOC), y a través de este centro, dijo González, se busca apoyar instituciones, fiscales y sociedad civil comprometidos en la lucha contra la corrupción y establecer un espacio de intercambio de ideas para mejores prácticas «de una forma colaborativa» y no algo «impuesto por Estados Unidos».
