Redacción: Viena Hernández
Tegucigalpa. – El alza del crimen que se ha mantenido en los últimos años ha causado estragos en la población hondureña, es un pueblo que vive amenazado, perseguido, flagelado y en peligro de ser asesinado y opta por el desplazamiento forzado, no hay quien detenga la violencia, la inseguridad hasta ahora ha ganado el combate.
El Global Initiative Against Transnational Organized Crime (GI-TOC, Iniciativa Global Contra el Crimen Organizado Transnacional por sus siglas en inglés), publicó el índice mundial de crimen organizado, en el cual figura Honduras en el décimo lugar con un 6,98%.
Asimismo, Honduras destaca en el puesto número 3 del mismo escalafón con respecto a los países con mayores actores criminales, los promedios son: un 8,25 de actores criminales; 8,5 de grupos de tipo mafioso, 8 en redes criminales y 8,5 en actores integrados en el Estado.
Cabe mencionar que, Honduras fue puesta ante los ojos del mundo luego que el Departamento de Justicia desnudara antes, durante y después de la extradición del exgobernante, Juan Orlando Hernández, que el país había sido convertido en un narcoestado, donde hubo colusión de los tanto los entes de justicia y de seguridad para permitir el narcotráfico a alta escala.
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En Honduras los agentes de justicia son asesinados, siendo está una forma de detener las investigaciones y un claro mensaje para obstaculizar el camino hacia la justicia. Las mujeres son asesinadas casi a diario y las numerosas formas de violaciones a los derechos humanos son la noticia de cada día.
Hace unos días fue asesinado el camarógrafo Ricardo Ávila, empleado de Metro TV en la ciudad de Choluteca de un disparo en la cabeza por delincuentes que cuando por la madrugada se dirigía de Marcovia a Choluteca.
El 28 de mayo fue asesinado a balazos en su casa de habitación, el presidente de la «Cooperativa Campesina 21 de Julio» y dirigente campesino en departamento de Colón, Marco Tulio Paredes Molina, en la comunidad de Marañones.
De igual forma, fue asesinada a disparos el 28 de mayo la fiscal del medio ambiente en el sur de Honduras, Karen Almendares, de 39 años, en la ciudad de Nacaóme, Valle.
En abril de 2022 hubo un alza del 10% en los homicidios debido a actos delictivos de estructuras criminales ligadas al narcotráfico, mencionó el abogado y criminólogo, Gonzalo Sánchez. Ese contexto, provocó el estado de excepción ordenado por la presidenta Xiomara Castro el 26 de abril.
En los departamentos de Colón, Olancho y El Paraíso es donde mayormente se desató esa ola de violencia. En Colón, ocurrió el asesinato de tres miembros de la Policía Nacional, de lo cual organizaciones populares y agrarias responsabilizaron al gobernador Adán Fúnez y el exdiputado Óscar Nájera de ser responsables de promover la violencia.
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NARCOTRÁFICO FLAGELA A LATINOAMÉRICA
En la clasificación también resaltan otros países de Latinoamérica como Colombia y México, es decir, países señalados reiteradamente por el dominio y las operaciones del narcotráfico.
Para realizar este informe, la Iniciativa Global procuró agrupar tres elementos al estudiar el crimen organizado en estos países, esto son: los mercados ilegales, la estructura e influencia de los actores criminales y, también, la resiliencia, la cual se define en el estudio como la capacidad del Estado de ejecutar políticas públicas, para crear interrupción contundente de las actividades delictivas.
Los puntajes de los países que se comparan y forman parte del estudio son los 193 Estados miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
De acuerdo a los resultados que revela el índice, los países con los niveles más altos de criminalidad son: República Democrática del Congo, con un puntaje de 7,75; luego sigue Colombia, con 7,66; después Myanmar, con 7,59; asimismo, México con 7,56 y el quinto es Nigeria con 7,15.
Seguidos por Irán (7,1), Afganistán (7,08), Irak (7,05), República Centroafricana (7,04) y Honduras (6,98).
Cabe mencionar que, Honduras aparece en un índice global donde también fueron incluidos países en constante guerra, conflictos e impunidad, países con exorbitante desigualdad, donde sus poblaciones viven en Estado fallido.
Según el informe, Colombia es uno de los países donde existen mayores centros de trata de personas, además, es el país que más cocaína exporta al mundo, por lo cual relacionan que esos factores están íntimamente ligados con las causas de la violencia y el conflicto en el país.
También hacen mención sobre que los países lamentablemente han “normalizado” la criminalidad. El estudio también concluyó que al menos el 80% de la población del mundo viven en países con alta criminalidad, a su vez, exponen que los países en conflicto y con Estados frágiles son los más vulnerables al crimen organizado.
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Al hacer énfasis a la problemática que enfrentan los países por el auge y control del narcotráfico, detallaron que Colombia recibe una calificación de 9,5 sobre 10 en el tráfico de cocaína, cuenta con un puntaje elevado en crímenes sobre recursos no renovables, con una calificación de 9,0, donde incluyen la minería ilegal, mientras que, por el tráfico de armas y de cannabis confieren 8,0 puntos en cada uno.
Al respecto, el director de GI-TOC, Mark Shaw, apuntó que, al observar la situación de Latinoamérica, es evidente el impacto que tiene el tráfico de drogas en toda la región, donde al desglosar los puntajes por subregión, también sobresalta el impacto en Centroamérica.
