Castro busca limpiar imagen de los militares

Gobierno de Honduras sigue potenciando a los militares, mientras escuelas y hospitales siguen deficientes

Fuentes consultadas por Criterio.hn coinciden en que Xiomara Castro ha cambiado su discurso y ahora está buscando “ganarse” a los uniformados para la toma de decisiones.

Daniel Girón

Tegucigalpa. – Mientras el desabastecimiento de medicamentos en los centros de salud y hospitales, la falta de maestros y problemas estructurales en las escuelas siguen siendo problemas sin solución, las Fuerzas Armadas de Honduras (FF.AA.) tendrán a su disposición seis helicópteros nuevos a un costo de 1,800 millones de lempiras.

Para tratar de quedar bien, el Gobierno de Xiomara Castro ha priorizado dotar de equipos a la institución armada, como un estandarte de poder, lo contrario a lo que sucede en la salud y en la educación, dicen analistas consultados por Criterio.hn.

“Considero que el gobierno de la presidenta Castro está tomando decisiones contradictorias: lo que antes prometió, ahora no lo cumple en el poder. Todo tiene que ver con el protagonismo que le dan a las Fuerzas Armadas en las tomas de decisiones que corresponden al sector civil”, dijo el analista político Raúl Pineda Alvarado.

El también abogado, estimó que el resultado de los primeros años de gestión de Castro son los mismos que se han visto en otros países de izquierda, como en México con Manuel López Obrador, Alberto Fernández, en Argentina o Gustavo Petro en Colombia.

“La izquierda llega al Gobierno, pero no llega al poder porque no tiene la conducción absoluta en el manejo de las armas y eso es lo que está buscando este gobierno”, expresó.

De igual manera, consideró que “está bien fortalecer las Fuerzas Armadas, pero no en este momento”, cuando hay un sistema de salud deficiente y un sector educativo que, con el paso de los días, miles de niños y niñas siguen sin estar matriculados.

Raúl Pineda Alvarado

La adquisición de las FF.AA. son seis helicópteros Airbud H 145, que cada uno tiene un valor de al menos 300 millones de lempiras, según una publicación de El Heraldo Plus. Y en las redes sociales, la FAH argumentó que la acción fue en respuesta a las promesas de campaña de Castro, así como para eficientar su lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico, que en promedio dejan al menos 11 homicidios, según las cifras oficiales.

Además de los nuevos helicópteros, se compraron seis más usados, se repararon los Bell 412 de acuerdo con el periódico antes mencionado, así como la repotenciación de los aviones de guerra F-5, informó la institución armada.

Las compras se hicieron a la empresa alemana Airbus Helicopters, y se estima que el tiempo de entrega será dos por año, según lo dicho por el general de la Fuerza Aérea Francisco Javier Serrano Alvarado al medio de comunicación en mención.

                                            

                                             “DECISIÓN ERRÓNEA”

Para el director legal de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), Kenneth Madrid, el hecho de repotenciar la flota de aviones F-5 y comprar helicópteros de uso militar es erróneo, pues Honduras está careciendo más en el sistema sanitario y educativo.

“Sin lugar a dudas que es una verdadera decisión errónea. Esa decisión no está basada en los más altos intereses de la población. Esa (compras y repotenciación) es una decisión que obedece meramente a los intereses individuales”, analizó.

Añadió que “estaría bien que se invierta en materia de defensa nacional, pero todo debe ser proporcional. Los servicios de salud y educación no están acordes a las necesidades del pueblo hondureño”.

Madrid también dijo que, “si las Fuerzas Armadas de Honduras están haciendo intercambio de bienes a cambio de estar a favor de los actuales gobernantes, cometen un gran error”.

Las cifras confirman la tesis de Madrid: con Castro el presupuesto de las Fuerzas Armadas aumentó en más de 1,500 millones de lempiras pasando de 9,300 millones en 2022 a más de 10,880 millones en 2023.

Además, el presupuesto de las Fuerzas Armadas continúa siendo el cuarto más alto entre los despachos del Estado, únicamente superado por Educación, con L38,109,509,221.00; Salud, con L26,638,801,518.00, y Energía, con L21,895,464,176.00.

Nota relacionada: Justicia de Honduras no castiga a traficantes de armas, aún con pruebas: Fausto Cálix

                               PRECARIA REALIDAD EN SALUD Y EDUCACIÓN

Las acciones del Gobierno sólo dejan ver la realidad, intenciones y prioridades de la agenda de la presidenta, en la cual, aparentemente, no está solucionar la problemática que afecta la educación y el sistema sanitario de la nación centroamericana, recalcaron los entrevistados por Criterio.hn.

Un ejemplo de la precaria realidad de la educación en Honduras está en un informe de la ASJ que muestra que, aunque el año escolar comenzó en febrero, a la fecha, el 25% de los centros educativos permanecen cerrados por la falta de docentes, mientras otros sólo están funcionando con uno o dos maestros por centro educativo.

En declaraciones a Criterio.hn, el subsecretario de Educación, Edwin Hernández, argumentó que la información de ASJ era especulación. “No tenemos información de que por lo menos un centro educativo esté cerrado a nivel nacional”.

Otra realidad que ratifica el mal en la educación hondureña, presidida por el secretario Daniel Esponda, es que varios maestros denunciaron que las plazas se estaban asignando “de dedo”, lo que ha provocado una inconformidad en el gremio, que lo ha expresado a través de protestas.

En consecuencia, la presidenta Castro pidió al secretario de Educación que se convirtiera en un ejemplo de diálogo, no de violencia y que se apegara a la ley del Estatuto del Docente, respetando el nombramiento de los docentes que estuvieran calificados.

Mientras tanto, en otro extremo, en el de salud, se encuentra el desabastecimiento de medicamentos en la mayoría de hospitales de Honduras, algo que el vigente gobierno no ha podido solucionar.

El 16 de enero de 2023, se publicó en el diario oficial La Gaceta el PCM-04-2023 que mantiene en estado de emergencia sanitaria en todo el sistema de salud público por el resto del año.

Esta normativa se implementó con la finalidad de asegurar la provisión de insumos, servicios, medicamentos y la atención médica oportuna a la población. No obstante, pese a la publicación de ese PCM, que facultó al sector Salud hacer compras directas, los centros hospitalarios permanecen desabastecidos, según denuncias del Colegio Médico de Honduras (CMH).

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