Por: Oscar Miguel Marroquín
En horas de la madrugada del día 27 de noviembre, David Matamoros Batson con vos temblorosa dio a conocer un primer informe, el 57% de las urnas escrutadas daban como virtual ganador a Salvador Nasralla, posteriormente, apareció ante la prensa David Matamoros para declarar que a medida fueran llegando el resto de las maletas electorales serian procesadas.
Curiosamente, en esta segunda parte del escrutinio, los números comenzaron a favorecer a Juan Orlando Hernández.
El Tribunal Supremo Electoral TSE, ha dado un millón de escusas para hacer creer que el conteo de las actas se detuvo debido a múltiples razones, razones que por supuesto vemos que han favorecido al inconstitucional candidato-presidente Juan Orlando Hernández; los llamados de la comunidad internacional para que el conteo fuera expedito no fueron escuchados por David Matamoros.
Ahora resulta que, el Partido Nacional tiene prisa por que se conozcan de inmediato los resultados, mas claro no canta un gallo, el fraude ya esta consumado y, es por eso por lo que quieren que el TSE ya no detenga más el anuncio en favor de Juan Orlando Hernández.
Ya han declarado un toque de queda a su favor para detener cualquier tipo de protesta a sangre y fuego, las fuerzas armadas ya comenzaron a aterrorizar a la población con asesinatos y encarcelamientos, en otras palabras, las condiciones ya están dadas según el Partido Nacional para que el pueblo no proteste al momento en que el TSE de como ganador a Juan Orlando Hernández.
Las acciones de vandalismo fueron prefabricadas por el partido Nacional y los escuadrones de la muerte, a fin de preparar las condiciones represivas en contra de la movilización social que se opone al continuismo de un presidente impopular.
Nota relacionada TSE amplía puntos solicitados por la Alianza de Oposición para realizar el escrutinio de las actas
No cabe entonces ninguna duda que este día y en medio de un toque de queda Juan Orlando Hernández será declarado el nuevo presidente de Honduras.
El pueblo hondureño tiene la palabra.
