Tegucigalpa. – En su agresiva campaña electoral recién pasada, el oficialista Partido Nacional se valió de todas sus armas mostrando un evidente poder y control mediático, e incluso su estrategia se extendió hasta las redes sociales.
Una vez finalizado el periodo de campaña y en medio del silencio electoral, establecido en la ley de cinco días antes de las elecciones, el partido de Gobierno recurrió a las redes sociales ofreciendo 5,000 lempiras a “influencers” hondureños para compartir publicidad a favor de sus candidatos a la presidencia y alcaldía capitalina, Nasry “Tito” Asfura y David Chávez Madison, respectivamente.
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El modus operandi para contactar a las personas “influyentes” fue a través de un mensaje directo en la red social Instagram. El texto decía: “Por medio del Partido Nacional queremos hacerte una propuesta. Como sabes, las elecciones están próximas y jóvenes como tú que tienen influencia en redes sociales pueden concientizar a la población a votar por Honduras. Estamos ofreciendo 5,000 lempiras a cambio de que publiques 3 historias motivando a tus seguidores a votar por Papi a la orden (Nasry Asfura) Y David Chávez. Quedamos a la espera de tu respuesta. Saludos!”
La captura de la usuaria de la red social, identificada como Skarlin, se hizo viral en varias plataformas y como parte de un sondeo de esta verificación, Criterio.hn encontró que varios perfiles de personas ligadas a medios de comunicación estaban compartiendo imágenes y mensajes de los candidatos.
Entre los perfiles identificados figuran el de las presentadoras del canal Q´Hubo Tv, Alejandra Rubio (alejandra_rubio_hn), Mayra Tercero (mayratercerooficial), Brenda Moncada (brendajmoncada) y la presentadora del canal Hable como Habla (HCH) Génesis Verde(genesisverdehn). Cabe resaltar que Génesis después borró la publicación que tenía en su perfil de Instagram.
Criterio.hn no logró respuesta por parte de las figuras públicas antes descritas para que explicarán el por qué de sus publicaciones.
Lo ocurrido en Honduras durante la campaña electoral pasada fue similar a lo que sucedió en México en junio de 2021, previo al Proceso Electoral Federal 2020-2021, cuando se descubrió que el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) invirtió aproximadamente 20 millones de pesos para el pago de figuras públicas que divulgaron contenido a través de sus “stories” de Instagram, haciendo una campaña a favor de este partido al motivar a los electores con mensajes directos para que se movilizaran a votar.
Según medios mexicanos, el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) determinó multar al Partido Verde con 40.9 millones de pesos, por la promoción del voto a su favor que hizo un grupo de 104 influencers los días 5 y 6 de junio, en plena veda electoral.
¿QUÉ DICE LA LEY EN HONDURAS?
En Honduras existe un vacío legal en cuanto al manejo de campañas políticas a través de las redes sociales, ya que tanto la Ley Electoral, la Ley del Consejo Nacional Electoral como la Ley de Financiamiento, Transparencia y Fiscalización a Partidos Políticos y Candidatos, no las incluyen como medios de difusión.
Según el comisionado de la Unidad de Financiamiento, Transparencia y Fiscalización de Partidos Políticos y Candidatos, Germán Espinal, no hay elementos que regulan las redes sociales y por eso se habla de actualizar y hacer reformas a la ley del CNE, a la del Tribunal de Justicia Electoral (TJE) y a la de la Unidad de Política Limpia.
“La ley está incompleta y esto de las redes es un fenómeno nuevo y dentro hay todo un debate si coarta o limita la libertad de expresión”, dijo el funcionario electoral.
Para la abogada experta en derecho informático, Alicia Paz, debe existir sanciones para quienes violentan el silencio electoral, pero a la vez considera que esto no debe ser utilizado para vulnerar la libertad de expresión. La libertad de expresión tiene múltiples acotaciones, sostiene Paz.
“La libertad de expresión es un derecho humano que el pueblo debe tener en función de la veracidad de los datos que se dan, pero como tenemos un sistema de comunicación híbrido que, por un lado, tenemos las redes sociales y por otro los medios tradicionales. Se reprimió a los medios tradicionales y no tomaron en consideración las redes sociales”, apuntó.
El artículo 223 de la Ley Electoral establece que “dentro de los cinco días del calendario anteriores a las elecciones primarias y generales quedan prohibidas las manifestaciones públicas, toda propaganda política, la divulgación de resultados totales o parciales de encuestas o sondeos de opinión público, material impreso, audiovisual, electrónico, radiofónico magnético o de cualquier índole”.
Claro está que en la formulación de la Ley Electoral no se anticipó la figura de las redes sociales y, aprovechando este vacío en la ley, los nacionalistas hicieron uso de sus recursos para fomentar el voto y llenar de propaganda invasiva las redes sociales, a pesar que su propio candidato presidencial, Nasry Asfura, reconoció el periodo de silencio electoral y emitió un comunicado llamando a la reflexión del voto.
El silencio electoral inició el 23 de noviembre, mismo día que se comenzó a divulgar la campaña del Partido Nacional en redes sociales con mensajes divulgados por varias figuras públicas.
DESMESURADO GASTO EN PUBLICIDAD
Desde inicios de la campaña el Partido Nacional despilfarró incuantificables sumas de dinero en anuncios publicitarios difundidos en medios de comunicación impresos, radiales, televisivos y en vallas y rótulos colocados en las principales calles y carreteras del país. Asimismo, en propaganda en redes sociales para difundir campañas no solo violando el silencio electoral, si no también difamando y generando miedo y odio en la población.
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De acuerdo a los resultados obtenidos por Criterio.hn solo la página de Nasry “Tito” Asfura, en Facebook, experimentó un gasto de 2,228.146 lempiras. Muchos de los anuncios publicitarios han sido pagados por el Partido Nacional.
Uno de sus anuncios que estuvo activo dos días antes del proceso electoral, utilizó el hashtag #Votapapi y el importe gastado fue de casi 10 mil lempiras.
La página oficial del Partido Nacional contabilizó un aproximado de 985 mil 600 lempiras en anuncios y David Chávez Madison, unos 607, 438 lempiras.
Hasta el momento, el presidente del CNE, Kelvin Aguirre, no se ha pronunciado respecto al caso, pero se espera que se cumpla con la imposición de multas establecidas en la ley para quienes violentaron el silencio electoral y que se estipula en 40 salarios mínimos, equivalentes a 400, 881.6 lempiras, considerando que el salario mínimo promedio en Honduras es de 10,022.04 lempiras.
LAS ELECCIONES MÁS CARAS DE HONDURAS
Las recién pasadas elecciones en Honduras han tenido una erogación de 3,032 .51 millones de lempiras, como parte del presupuesto manejado por el Consejo Nacional Electoral (CNE), ente rector de los procesos electorales.
Un reciente informe del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) cuantificó que la campaña electoral ejercida por los partidos políticos y candidatos a cargos de elección popular registró un gasto de al menos 118 millones de lempiras.
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El organismo rector de la empresa privada estableció que en el nivel presidencial el mayor gasto fue registrado en la campaña del candidato del oficialista Partido Nacional, Nasry Asfura, con 37,865,843.50 lempiras.
En el nivel de alcaldías el mayor gasto ha sido atribuido al candidato nacionalista del Distritito Central, David Chávez con 14,711,760 lempiras y en el nivel de diputados el también candidato del Partido Nacional, Antonio Rivera Callejas con 3,366,876 lempiras.
Luego de la derrota sufrida en las urnas y por consiguiente cuatro años de llanura del Partido Nacional, la Asociación Nacional de Radiodifusoras de Honduras (Anarh) comenzó a divulgar un comunicado reclamando al partido de Gobierno, incluyendo al candidato presidencial, Nasry Asfura, la deuda por concepto de campaña publicitaria divulgada en sus medios asociados.
La Anarh dice en su mensaje, que es transmitido constantemente en los medios asociados, que los nacionalistas han quedado morosos. Curiosamente el reclamo se da después de la derrota y luego que esta asociación de medios tradicionales pactara con el Gobierno nacionalista el canje publicitario a cambio de no pagar ningún compromiso fiscal, sean estos impuestos, tasas cánones, etc. Asimismo, los servicios públicos, de los medios o cualquier empresa dedicada a otro rubro, siempre y cuando pertenezca a los conglomerados mediáticos.
