Por: Redacción CRITERIO.HN
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Tegucigalpa. – La dirección de Asuntos Disciplinarios Policiales (Didadpol), informó hoy, que el caso de la estudiante de enfermería Keyla Martínez ya ha sido cerrado por parte de esta institución, y que le corresponde al Ministerio Público continuar el procedimiento contra los implicados en el hecho.
Allan Argueñal, titular de la Didadpol manifestó que se realizó audiencia de descargo a los dos agentes policiales que estaban a cargo de vigilar a Keyla Martínez que hasta el momento se desconocen los nombres.
La madre de Keyla Martínez lamenta este hecho y pide que se revele el nombre de los policías que fueron separados de la institución. “Queremos saber quiénes son los policías que fueron separados, si es el comisionado Melvin Alexander al cargo de la posta policial y el que mantenía las llaves de la celda, mi hija fue asesinada y no se suicidó, ellos deben pagar por ello y no andar libres” exigió la madre de Keyla Martínez, Norma Rodríguez.
Keyla Martínez fue arrestada el 7 de febrero del presente año, por irrespetar un toque de queda y bajo la custodia policial fue encontrada sin vida 8 de febrero en una celda de la Esperanza, Intibucá en el occidente de Honduras.
Después de que se conociera este hecho la Policía Nacional dijo que la joven universitaria se había suicidado en la celda, mintiendo a los familiares que siguen pidiendo justicia. El Ministerio Público por medio de su autopsia dijo que lo de Keyla Martínez fue un asesinato por asfixia mecánica.
Hasta el momento no se conoce el nombre de los dos policías a cargo de la vigilancia de la joven universitaria, tras haber pasado ya dos meses del asesinato de la joven de enfermería, nadie ha sido declarado culpable o puesto tras las rejas después que conocer que fue un asesinato o no un suicidio.
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Honduras (OACNUDH), manifestó el 10 de febrero que los hechos podrían ser constitutivos de una ejecución extrajudicial y que, por tanto, la investigación deberá llevarse a cabo de acuerdo con lo dispuesto en el Protocolo de Minnesota sobre la Investigación de Muertes Potencialmente Ilícitas.
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La imagen de la Policía Nacional de Honduras queda aún más manchada por este caso por no responsabilizar, investigar y culpar a los responsables de este hecho. Lo de Keyla Martínez es otro caso más de la impunidad que se vive en el país, ante la falta de investigación.
Un comentario
Espero que cuanto antes, pueda conformarse la unidad estratégica entre los diversos sectores populares. Y consiga adueñarse de los espacios públicos, en las ciudades y en el campo, protestando firme en contra del estatus quo, en favor de una nueva constituyente, lideres distintos, un nuevo modelo socioeconómico para Honduras fundado en el progreso de todxs. La tolerancia ha fracasado hace tiempo, yo creo.