Por: Carlos Zelaya Herrera
Tegucigalpa.- La pandemia del COVID19 en Honduras se extiende a la velocidad del grado de letalidad que la enfermedad muestra en Panamá, el más afectado de la región con 37 defunciones y mil 475 casos desde el 10 de marzo en que el Ministerio de salud del país canalero confirmó el primer caso en una mujer de 40 años de edad que regresó de España.
En Honduras en tres semanas el coronavirus ha dejado 15 muertos y 222 contagiados han confirmado el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos, SINAGER, y la Secretaría de Salud Pública.
Con 9,3 millones de habitantes el coronavirus está presente en 9 de los 18 departamentos del país, con Cortés y 132 positivos en apenas 26 días desde que el 9 de marzo ingresó una dama de España al aeropuerto de San Pedro Sula, con síntomas de la enfermedad.
Tras el anunció del primer fallecimiento, el 25 de marzo, el país registra 52 casos confirmados de coronavirus, a una tasa de muertes de 1.9%.
Pero apenas una semana después, la cantidad de casos se disparan a 222 y los fallecimientos llegan a 15 personas, según datos oficiales.
Esto da como resultado una tasa de muertes de 6.7%, casi cuatro veces más que hace una semana, lo que no da un indicio de lo rápido que la epidemia se extiende y de las devastaciones que podría provocar entre la población, aún con las medidas de cuarentena que se han implementado.
Estudios de infectólogos nacionales, apoyados en una plataforma virtual y 17 mil encuestas muestran que un 0.2 de personas ameritan trato crítico. En China, Francia e Italia pasó mes o mes y medio para alcanzar el pico más alto, aseveró Elsa Palau, infectóloga y ex Ministra de Salud.
Honduras reportó los primeros casos de COVID19 el 9 de marzo, un mes después es 9 de abril y 15 días después es alrededor del 15 de abril, por eso estimamos ese número de casos por esas fechas, explicó.
De estas unas 35 mil personas ameriten atención y más de 2 mil un trato en unidades críticas y necesitarían ser hospitalizadas.
Proyecciones de la OMS estiman en 50 mil infectados y dos mil personas en estado crítico cuando el país solo cuenta con 150 camas en unidades de cuidados intensivos con ventiladores mecánicos en los niveles público y privado, de llegar a 600 o 700 casos, las camas aun así serán insuficientes.
Las medidas preventivas permitirán un cuentagotas de pacientes para el espiro de los servicios de salud, que apenas superan los escases de equipo biomédico y mantiene una alarmante limitación de respiradores mecánicos.
El escenario menos malo sería llegar a tener más de 7 mil casos de UCI que si no encuentran un ventilador o una cama se pueden morir y el peor escenario es que todos los que meriten hospitalización se compliquen y si el estado de salud colapse colapsará el sistema de salud como colapsó en China, España e Italia, pues entonces llegaremos a tener un número mucho mayor de fallecidos, advirtió Palau.
Un comentario
Dios detendrá esa peste ,gracias Padre misericordioso !!????????