Tegucigalpa.- Todo apuntaba a que mientras en Tocoa, Colón, se enjuicia a los ocho defensores de Guapinol por su oposición a la instalación de la empresa minera Los Pinares en el Parque Nacional Carlos Escaleras, en Tegucigalpa se premiaría a Lenir Pérez con un cuestionado contrato energético.
La sesión legislativa inició a las 7:52 de la noche, con tres horas y 52 minutos de retraso puesto que fue programada para las 4:00 de la tarde. Sin embargo, al inicio de la sesión y en un comentario breve mientras se discutía otro tema, el diputado del Partido Nacional y secretario del Congreso Nacional, Tomás Zambrano, mencionó los fuertes cuestionamientos que habían recibido durante el día y afirmó que no se estarían tocando esa noche temas de contratos energéticos.
El convenio energético referido por el diputado del departamento de Valle es un dictamen que fue sacado a la luz por diputados opositores, en el que se otorgaba un millonario contrato a la compañía Puente Alto Energy, S.A. de C.V. (PAESA). De esta empresa, Lenir Pérez se identificó ante la Comisión Reguladora de Energía Eléctrica (CREE) en agosto de 2020 como representante legal y la misma forma parte del Grupo EMCO Holding, de la cual él es uno de los propietarios.
El dictamen de dicho contrato establecía como de interés nacional el proyecto de la «planta de generación de energía cuyo proceso incluye la importación, apilamiento y transporte de combustible carbón y petcoke en Puerto Cortés y Puente Alto y explotación de una cantera de caliza» cuyo titular es la sociedad mercantil Puente Alto Energy S.A. de C.V.
Sin embargo, el proceso de aprobación del proyecto eléctrico se estaba saltando a la Comisión Reguladora de Energía Eléctrica, así como el proceso de licitación y las respectivas licencias ambientales. Un hecho que fue señalado -sin mencionar nombres- por la Asociación Hondureña de Productores de Energía Eléctrica (AHPEE) en un comunicado, en el que instó al Congreso Nacional a desistir de brindar beneficios particulares en el sector eléctrico.
Insertar tuit: https://twitter.com/Ahpee_Honduras/status/1483894401109798914?t=eTWHgLeUQCMj3plIZae30g&s=19
La AHPEE no fue la única organización en advertir sobre dicho contrato, el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP) también reparó en la posible aprobación de dicho dictamen, señalando ilegalidades en las que incurriría el Congreso al aprobar dicha moción, entre los que destacan daño ambiental, competencia desleal y abuso de potestades, entre otros.
El propuesto proyecto energético del Grupo EMCO se encuentra ubicado en la comunidad de Puente Alto, Puerto Cortés, en el norte de Honduras; y de acuerdo con su página web, se trata de «un proyecto de generación de energía que planea producir más de 100 mega watts (MW) en su etapa inicial», y que estaría haciendo uso de combustibles fósiles, específicamente «carbón-petcoke».
RIESGOS DEL PETCOKE A LA SALUD Y AMBIENTE
Sobre el petcoke o coque de petróleo, la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de Estados Unidos refiere que es un material de carbono sólido que se parece al carbón y que es un producto de la refinación del petróleo. Entre los riesgos a la salud, EPA detalla que cantidades significativas de polvo fugitivo, como partículas que tienen un diámetro de 10 micrómetros o menos, pueden afectar el corazón y los pulmones y causar efectos graves en la salud.
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En un artículo del Consejo de Defensa de los Recursos Naturales (NRDC, por sus siglas en inglés) se simplificó el tema afirmando que «inhalar polvo de coque de petróleo es malo para los pulmones y el corazón». Citando estudios de EPA y del Departamento de Calidad Ambiental de Michigan (MDEQ, siglas en inglés) realizados en animales, que encontraron «efectos respiratorios irreversibles», específicamente inflamación crónica de los pulmones y aumento del peso de los pulmones, «en todas las concentraciones probadas».
Al deterioro de la salud, se agregan daños ambientales. En un testimonio de la abogada especializada en justicia ambiental, Meleah Geertsma, recogido por el NRDC, establece que «desde la perspectiva del cambio climático, quemar coque de petróleo genera más CO2 que la mayoría de las formas de carbón».
A esto se suma que el coque de petróleo dice la abogada Geertsma, «a menudo se quema en un tipo de caldera que produce una cantidad significativa de óxido nitroso o N2O, un contaminante climático muy potente con más de 300 veces el potencial de calentamiento del CO2». En resumen, «quemar coque de petróleo en estas centrales eléctricas puede ser peor para el calentamiento global que quemar carbón».
Sin embargo, EMCO Holding en su página del proyecto señala que «la empresa tiene un innovador concepto que será ejemplo al cumplir con los más exigentes estándares de calidad, seguridad y cuidado ambiental». Lo mismo dice de Inversiones Los Pinares, la cual especifica en su sitio web que cumple «con altos estándares de calidad, minería responsable y procesos responsables con el medioambiente.
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¿QUÉ EMPRESAS CONFORMAN EMCO HOLDING?
Lenir Pérez, junto a su esposa de Ana Facussé, hija del ya fallecido oligarca hondureño y empresario Miguel Facussé, son propietarios de Inversiones Los Pinares, la empresa minera que criminalizó a defensores y defensoras que se oponen a la instalación de una mina de óxido de hierro a cielo abierto en el Parque Nacional Carlos Escaleras y que atenta contra la seguridad del agua para consumo humano en los ríos Guapinol y San Pedro.
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Entre las divisiones que conforman a EMCO Holding se encuentran: la empresa Alutech (venta de techos y materiales de construcción); la empresa minera Inversiones Los Pinares e Inversiones Ecotek, involucrada en la construcción de la planta peletizadora de óxido de hierro que se localizaría también en el Parque Nacional Carlos Escaleras.
A nivel aeroportuario, el grupo cuenta con el Aeropuerto Internacional de Palmerola en el que el Estado de Honduras dio la mayor tajada de inversión, pero recibirá el menor porcentaje de ganancia. También tienen la operación del aeropuerto de Toncontín y la ampliación y administración de la terminal de carga del aeropuerto Internacional de Comalapa, en El Salvador; así como la terminal de carga del Aeropuerto Ramón Villeda Morales, a través de la empresa ADIMEX.
Recientemente, a Pérez también se le adjudicó por 13 años el contrato del proyecto de Rayos-X de Puerto Cortés a la empresa Alutech, subsidiaria del Grupo EMCO, por un monto de $25.7 millones. El otorgamiento fue realizado mediante decreto ejecutivo PCM-113-1021, con fecha 17 de diciembre de 2021 y publicado en el diario oficial La Gaceta el 27 de diciembre de 2021.
Un comentario
En definitiva, aprovecharse de los países pobres y con un sistema político deteriorado por dictaduras o casi dictaduras, con corrupción que provoca inseguridad jurídica y venta de país a costa de los ciudadanos y su salud o educación, pues un país con personas educadas (conocimientos adquiridos, capacidad de razonamiento lógico y visión global de la sociedad, con capacidad de análisis en base a información), es un lugar adecuado para contaminar y despreocuparse de la salud de sus ciudadanos, piensan quizás que nuestro país es el basural donde tirar su basura (quemar carbón contaminante) porque en otras parte les han puesto el NO-STOP a la contaminación y deterioro del medio ambiente y salud del pueblo.