Carta de Salvador Zúniga para el encuentro internacional Berta Vive

Salvador Zúniga de la Coordinadora Indígena del Poder Popular
Salvador Zúniga de la Coordinadora Indígena del Poder Popular

Por: Salvador Zúniga

Hace más de un mes que las balas golpearon su pecho, el pecho de muchos y de muchas.

Compañeros y compañeras, desde lejos les escribo,  a ustedes que han sentido esta injusticia, que han sentido este dolor, para ustedes que han sentido las lágrimas frías rodar por su cara está dirigida esta carta.

Cuantos sueños nos han quedado, en algunos momentos hemos sentido que se nos quiebran, que se desvanecen, que se pierden lejos, hemos sentido que no tenemos la fuerza para hacerlos nuestros, somos más conscientes de lo grande que era nuestra compañera al pensar en la manera que ella podía llevar tanto, tanta esperanza, tanta entrega, sin vacilar a pesar de lo dureza de cargar estos sueños.

Es que estos sueños son grandes, y sí son pesados, llevarlos encima quizás signifique no tener la certeza de abrazar nuevamente a los que queremos profundamente, de quedarnos con las ganas de haber dado un paso más juntos y juntas, de no poder bañarnos una vez más en el río Gualcarque, de no sentir nuevamente el cafecito caliente de las comunidades  y de no darle la última regañadita a los y las compas.

Pero estos sueños que cargaba ella, no eran solo de ella, estos sueños ya hace bastantito que estaban, estos sueños los llevan nuestros niños, que sonrientes junto a la hornilla tienen presente su espíritu, las mujeres que madrugan y escuchan atentamente la radio del COPINH, los compañeros que cultivan el maíz colorido, que no son atravesados por la noticia de su muerte, sino que estuvieron y están atravesados por su vida, por la cotidianidad de la lucha, que no dudan en asistir al llamado de la compañera Bertita.

Ella nos transmite estos sueños y nos da la fuerza para seguir construyéndolos, aunque claro nos duele no sentirla y pensar en no verla más caminando a las comunidades aunque de vez en vez le diera malora por lo pesado del viaje, pero siempre llegando, de no escucharla más preguntando si hay capucas, de no verla con el megáfono convocándonos, de pensar en que ya no la podremos abrazar y decirle gracias compita…

Estos sueños son tan grandes  que llevarlos también significa llevar a la compañera Bertita, porque en estos sueños está su espíritu, están impregnados de rebeldía, de sabiduría ancestral, de la alegría y de esperanza.

Estos sueños son enriquecidos por ustedes, por nosotros y nosotras, que sabemos que Bertita está para convocarnos, que sabemos que su voz no se perdió, que estamos seguros y seguras que su corazón sigue latiendo porque lo sentimos, que también sentimos su sonrisa, su mirada firme, porque la vemos en cada compañero y compañera.

Estoy seguro que las balas nunca serán suficientes para la compañera Bertita, ya ella está en todos lados, su espíritu llega con el viento, con la lluvia, con el fuego, con nuestras voces y de tantas maneras más.

Es nuestro deber seguir adelante con esta lucha, porque es la única forma en que podremos decir con seguridad: Berta Vive!

Con la fuerza ancestral de Mota, Bertha, Etempica, Lempira, Icelaca y tantos que dieron su vida que seguirán presentes se levantan nuestras voces de vida, justicia, libertad y paz.

 

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Un comentario

  1. Espero que así se haya referido a la Madre de sus hijos cuando se enter de su muerte violenta, Bertita. Creo que le conocí x otro action ud y ahora solamente aparece en Google por Bertita. Creo que se lo merece, y no hable a los medios pero si a sus hijos.