A 166 días el gobierno de Honduras está aplazado en manejo de pandemia: CMH

Compraron chatarra, desperdicios de conflictos bélicos, mascarillas no certificadas y la pandemia fue manejada por abogados, ingenieros, policías y militares: Colegio Médico de Honduras

Por: Redacción CRITERIO.HN

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Tegucigalpa, Honduras.- El Colegio Médico de Honduras (CMH) realizó una conferencia de prensa que retrata la realidad del sistema de salud a cinco meses de la llegada del Covid-19 al país. Durante el evento, el vicepresidente del CMH, Samuel Santos expresó cómo la precariedad, la corrupción y la mala administración han protagonizado el manejo de la pandemia por parte del gobierno.

De acuerdo al Colegio Médico de Honduras el gobierno está aplazado porque todas la decisiones, gestiones y lineamientos para atender la pandemia han sido desacertados y extemporáneos. Prometieron 94 hospitales y lo que se ha visto son toldos, dijo Elga Codina de la directiva del gremio médico.

La radiografía inició señalando la ausencia de compromiso por parte de la Secretaría de Salud para establecer una mesa de alta gerencia técnico científico para el control de la pandemia; señalando que se prefirió que el manejo fuese realizado por abogados, ingenieros, policías y militares, pero no por la academia. “Quienes dirigieron y siguen dirigiendo son personas que no saben nada de salud. No tienen ninguna idea de lo que están haciendo en el manejo de una pandemia”, apuntó.

Santos también indicó que a este error siguió la compra de ventiladores mecánicos que no eran adecuados para el tratamiento de pacientes con Covid-19 o con insuficiencia respiratoria aguda; y que, pese a que el Colegio Médico lo advirtió, no se hizo nada y tampoco se han deducido responsabilidades a quienes realizaron la compra.

El galeno lamentó que a este acto le acompañó la compra de equipo de protección personal que no era adecuado para el uso médico. “Nos entregaron mascarillas KN-95 que no estaban certificadas. Muchos de nuestros compañeros las utilizaron en la falsa creencia de que estaban siendo protegidos contra la enfermedad; desafortunadamente se infectaron y posteriormente murieron”.

Recordó que al pueblo se le prometieron 94 hospitales que se convirtieron en doce y finalmente en siete hospitales móviles; y que a cinco meses y medio solo han llegado dos hospitales de campaña. “No son hospitales móviles, son hospitales de campaña que han sido desarrollados para conflictos bélicos. Se fueron y compraron chatarra, desperdicios de conflictos bélicos que ya han terminado. Son hospitales que de ser nuevos tenían que haberse armado en tres días, llevamos más de un mes de tenerlos en Honduras y no se han armado porque venían en mal estado, oxidados, había que cambiarles partes importantes del piso de su estructura, tuvieron que contratar ingenieros, soldadores, pintores para presentarlo como si fuesen nuevos”, detalló.

El vicepresidente del CMH aclaró que los cinco hospitales faltantes vienen con deficiencias y son “una trampa mortal para el equipo médico que va a trabajar ahí. Estos hospitales no fueron diseñados para una enfermedad que es capaz de producir tanta infección cruzada entre pacientes. De tal manera que el Colegio Médico se vio obligado a ir a la Corte Suprema de Justicia [a interponer un recurso de amparo]. Creemos que se han violentado derechos humanos fundamentales a los médicos, a las enfermeras, a todo el personal de salud cuando no se nos dotó de equipo de protección personal adecuado, se violentó el derecho a la vida a nuestros queridos compañeros”.

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Santos recalcó que nunca se supo cuál era la realidad de la pandemia en Honduras debido a que nunca se contó con la cantidad suficiente de pruebas. “Nunca hemos llegado a hacer ni siquiera 3 mil pruebas diarias.  Necesitábamos hacer mínimo 5 mil pruebas diarias desde que comenzó la pandemia para saber en qué área estamos; sin embargo, nunca las hemos tenido.” Y que si bien, en estos momentos hay una desaceleración natural de la pandemia, eso no significa que la misma ya pasó, “al contrario debemos prepararnos [para la siguiente etapa]. No bajar la guardia y siempre mantener las medidas de bioseguridad porque no hay ninguna condición para evitarlo, aún no tenemos una vacuna o un tratamiento mágico”.

En relación con los tratamientos MAIZ y CATRACHO, el médico aclaró “muchos de nosotros vendimos la idea de que existía un tratamiento mágico capaz de curar el Covid–19 al estilo hondureño y ahí se dilapidaron más [de] mil millones de lempiras. En un tratamiento que fue anunciado con bombos y platillos como la salvación de Honduras. Nosotros no tenemos mil y cientos de muertos, tenemos más. Honduras tiene más de 5 mil defunciones por Covid-19 y si hubiéramos hecho la cantidad de pruebas suficientes, la cantidad de enfermos en Honduras andaría entre los 200 mil y 300 mil. Nos han estado mintiendo a través de las cadenas nacionales”, sentenció.

Santos evidenció que recientemente la cooperación internacional se comprometió en hacer un donativo en equipo técnico y reactivos, como lo ha hecho anteriormente a través de la OPS/OMS, “y llama la atención que en este momento quienes están manejando Invest-H están solicitando 240 millones de lempiras para la compra de ese equipo.  La pregunta que queda es ¿por qué si la cooperación va a traer ese equipo, están pidiendo 240 millones de lempiras?”.

El doctor también reclamó por las condiciones laborales en las que trabaja el personal de salud, a las que calificó como no adecuadas; “no solo por su equipo de bioseguridad, sino porque son trabajadores de la salud y ellos no han recibido el sagrado derecho a su salario mensualmente. Tenemos casos de colegas a quienes les deben 2, 3 y hasta 5 meses. Compañeros que ya no saben qué hacer porque no se les ha pagado”. En relación con este tema el CMH “exigió al gobierno que deje de hacer un mal manejo de los fondos del pueblo de Honduras […] y le cumpla a los trabajadores de la salud”.

Finalmente, la doctora Claudia Ramírez, de comunicaciones del CMH, reafirmó que la pregunta que hacen al gobierno es:  “¿Dónde está el dinero? Devuélvanlo, Honduras lo exige”. Asimismo, aclaró que contrario a lo que decían “el dinero no está en el rostro de nosotros los hondureños, no está en el rostro de los médicos y del personal de salud. Hay vidas que se han cobrado por el manejo inadecuado de la pandemia; podemos decir que es un gobierno aplazado en el manejo de una pandemia. […] Ellos no están preparados ni están preparados, solo vemos que se han preparado para hacer actos de corrupción”.