Por: Redacción CRITERIO
Tegucigalpa. – El Partido Libertad y Refundación (Libre) convocó esta tarde a sus bases y a la ciudadanía en general para que se trasladen de inmediato a la sede del Poder Ejecutivo para protestar de manera permanente y exigir la salida del poder del gobernante, Juan Hernández.
La convocatoria, formulada por el expresidente hondureño y coordinador del partido opositor, Manuel Zelaya Rosales, surgió luego de conocerse el fallo condenatorio contra Juan Antonio, alias “Tony” Hernández, hermano del jefe de gobierno.
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Las protestas fueron convocadas además en el interior del país donde, según, Zelaya Rosales la gente debe salir a protestar para que se constituya un gobierno democrático, un gobierno de reconciliación y se convoque a nuevas elecciones para “sacar a los narcos y a la corrupción”.
La protesta en Tegucigalpa ha sido convocada en el bulevar Juan Pablo II, donde se construye el ostentoso Centro Cívico Gubernamental.
Zelaya Rosales instó a la unidad del pueblo hondureño, pero aclaró que el equipo del régimen no debe dirigir la transición del poder porque” no creemos en los nacionalistas porque ellos son los culpables de los que se está viviendo en Honduras”,
Pese a que todas las fuerzas políticas de oposición urgen la salida de Hernández, hasta el momento no hay unidad en dicho propósito.
La culpabilidad de “Tony” Hernández pone en apuros al gobernante hondureño, pues en las conclusiones del juicio el fiscal Emil Bowe afirmó que, a partir del 2010, el acusado y su socio y hermano, Juan Hernández, actual gobernante de Honduras, han venido controlando el gobierno con el propósito de traficar droga.
Además de las afirmaciones de Bowe, en el marco del juicio, que inició el 2 de octubre el fiscal Jason Richman, dijo que “Tony” Hernández recibió personalmente del famoso narcotraficante mexicano, Joaquín Guzmán, más conocido como “El Chapo” Guzmán, un millón de dólares que, posteriormente, entregó a su hermano y actual presidente de Honduras, Juan Hernández, para que financiara su campaña política. Richman aseveró además que el gobernante hondureño recibió financiamiento político de otros capos de la droga.
Entre otros señalamientos surgidos desde la Fiscalía estadounidense, se atribuye que el golpe de Estado de 2009, que derrocó del poder al entonces presidente, Manuel Zelaya Rosales, fue el momento ideal para que en el país surgiera una narco-élite política que construyó una institucionalidad favorable para las actividades del crimen organizado.
«Tony» Hernández, fue encontrado culpable por los delitos de narcotráfico, tráfico de armas, conspiración para introducir droga a los Estados Unidos y falso testimonio. Para emitir la sentencia, el juez tiene hasta 90 días a partir de la fecha. Su condena podría variar de una pena mínima de 10 años hasta varias cadenas perpetuas.
