Más de 20 centros hospitalarios registraron egresos por abortos en niñas, jóvenes y adolescentes menores de 19 años.
Honduras se encuentra entre los tres países de Centroamérica con una prohibición absoluta del aborto.
Fuentes especializadas, consultadas por Criterio.hn, señalan que la integración de la educación sexual integral y los derechos sexuales reproductivos son la clave para frenar los abortos.
Tegucigalpa, Honduras. – En los primeros meses de 2024 la Secretaría de Salud de Honduras contabilizó 649 abortos de niñas, adolescentes y jóvenes en los diferentes centros hospitalarios públicos.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), destacó que un 3% de los países del mundo mantienen una prohibición absoluta del aborto, entre los que sobresale Honduras.
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CASOS DE LA SESAL
Rosa Marlen Flores, responsable del Plan Nacional de Reducción de la Mortalidad Materna de la Secretaría de Salud, informó a Criterio.hn que, de enero a la fecha, Honduras ha registrado 649 abortos en adolescentes en edades de 10 a 19 años.
Los datos brindados por Flores detallan que 45 corresponden a niñas entre las edades de 10 a 14 años, mientras que los 604 restantes corresponden a la población de adolescentes y jóvenes en las edades de 15 a 19 años.
Entre los departamentos que registran mayores cifras de abortos en adolescentes se encuentran: Cortés (120), Colón (52), Olancho (50) y Copán con 39.
Por otra parte, los departamentos que presentan mayores cifras de abortos en niñas de 10 a 14 años son: Atlántida, Cortés y Yoro con ocho casos cada uno.
De acuerdo con el área estadística de la Secretaría de Salud de Honduras, de enero a la fecha, los abortos en adolescentes se han registrado en 25 centros hospitalarios ubicados en los distintos departamentos del país, reportando cada uno más de dos casos.
Los datos precisan que los centros hospitalarios con el mayor número de casos son: el Hospital Mario Catarino Rivas, de San Pedro Sula (5); el Hospital Santa Teresa, de Comayagua y el Hospital Aníbal Murillo, de Yoro, con cuatro casos cada uno.
Criterio.hn intentó comunicarse con Lorena Calix y Yuri Mora, voceros del Ministerio Público, para conocer cuántos de estos casos habían sido denunciados como abortos inducidos y qué procedimiento realiza el ente acusador, sin embargo, hasta la publicación de este artículo no se obtuvo respuesta.
Por otro lado, la Secretaría de Salud, contabiliza entre enero a la fecha 6,914 partos en niñas, adolescentes y jóvenes, de los cuales 6,587 corresponden a adolescentes y jóvenes de 15 a 19 años y 327 a niñas de 10 a 14 años.
Asimismo, entre enero y octubre de 2022 la Secretaría de Salud, contabilizó 5,641 abortos y de estos, el 17% correspondían a niñas, adolescentes y jóvenes menores de edad, siendo 74 de estas, niñas entre las edades de 10 a 14 años, mientras que los 860 restantes corresponden a jóvenes y adolescentes entre los 15 y 19 años.
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LA REALIDAD MÉDICA
Pavlova Polanco, doctora en medicina y cirugía general, salud sexual reproductiva, y educación sexual integral, explicó a Criterio.hn que, en el caso de las niñas, adolescentes y jóvenes, estás tienen mayores probabilidades de sufrir pérdidas gestacionales que se derivan de la inmadurez hormonal y anatómica de sus cuerpos.
En ese sentido, Polanco expuso que existen tres tipos de abortos, los espontáneos, recurrentes e inducidos, señalando que es muy difícil que el personal de salud sepa con exactitud si es o no provocado, pues aseguró que no todos los médicos tienen la experiencia para determinar la causa.
La galena, expuso que en los casos en los que se logra determinar que es un aborto inducido, el centro hospitalario procede a realizar una denuncia a nivel institucional, como parte de un protocolo, sin embargo, apuntó que no es ético ni correcto que un profesional de salud criminalice o señale a un paciente.
Polanco señaló que es necesario que se brinde información adecuada a la población para que esta conozca que no todos los abortos son causados, además aseguró que es necesario que las personas que sufren perdidas gestacionales reciban atención médica para determinar su estado de salud y si podrían tener consecuencias para concebir a futuro.
La galena remarcó que la clave principal para reducir este fenómeno es implementar una base en educación sexual reproductiva, con enfoque en derechos sexuales reproductivos, de ese modo habría personas más conscientes y conocedoras del tema.
HONDURAS EL ENEMIGO DEL DERECHO A DECIDIR
En 2021, el Congreso Nacional aprobó una reforma constitucional al artículo 67 que blindó la prohibición absoluta del aborto. Esta acción hizo que organizaciones de mujeres interpusieron un recurso de inconstitucionalidad, el cual fue declarado sin lugar por la Corte Suprema de Justicia, el 22 de marzo de 2023. En aquel entonces la Corte estaba presidida por Rolando Argueta.
Tras la integración de la nueva Corte Suprema de Justicia, presidida por Rebeca Raquel Obando, se prometió que trabajarían para reducir la violencia contra las mujeres, sin embargo, las organizaciones han catalogado dicho pronunciamiento como un doble discurso porque hasta la fecha las leyes siguen criminalizando a las mujeres.
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Lara Bohorquez, coordinadora de la Unidad de Investigación Feminista del Centro de Derechos de Mujeres, expreso a Criterio.hn que las organizaciones de mujeres y feministas esperaban que la Corte Suprema de Justicia, con la nueva filosofía de refundación, tuviera mayor vínculo con los derechos de las mujeres y niñas revirtiendo la decisión de la Corte anterior.
A criterio de Bohorquez, muchos de los representantes del Estado han puesto sus creencias religiosas por encima de los derechos de las mujeres, por lo que señala que no existe un Estado laico como lo ordena la Constitución de la República.
La feminista señaló que el gobierno sucumbe ante las decisiones de los antiderechos en contraposición de las organizaciones de mujeres y feministas que pelean por sus derechos, atribuyendo a los fundamentalistas el retroceso en materia de derechos sexuales reproductivos.
Finalmente, Bohorquez concluyó que las organizaciones continúan trabajando para que, en un futuro cercano, dicho derecho pueda ser garantizado.
LAS ETERNAS NEGOCIADAS
Cristina Alvarado, del Movimiento de Mujeres por la Paz «Visitación Padilla» explicó que es necesario que las personas reconozcan el aborto como una problemática de salud pública y que en tanto continúe invisibilizada dentro de mitos y tabúes se seguirá poniendo en riesgo la vida de jóvenes y adolescentes, pero particularmente de niñas.
Alvarado explicó que las niñas se ven enfrentadas a embarazos producto de la violencia sexual y que se debe tener claro que, mientras no exista la educación sexual integral, la problemática de abortos se va a continuar agravando.
La feminista recalcó que en Honduras se niega el reconocimiento de ciertos derechos a causa de la sociedad conservadora, y explicó que no importa el color de partido político, porque cuando se trata de aborto todos votan en contra, violando el derecho a decidir sobre los cuerpos.
Por su parte, Jenn Osorto, feminista e integrante de la plataforma Somos Muchas, señaló que la cantidad de casos registrados en lo que va de 2024 evidencia el panorama alarmante al que se enfrentan las niñas, adolescentes y mujeres.
Osorto, explicó que este tipo de casos son producto de abusos sexuales y estupro, en su mayoría perpetrados por personas que están dentro del núcleo familiar de la víctima.
La activista concuerda que para la despenalización del aborto hay un largo camino que recorrer, el cual comienza con la Ley de Educación Sexual Integral.
La feminista aseveró que las mujeres que enfrentan emergencias
obstétricas y las que se realizan abortos de manera clandestina, también poseen
una fe y espiritualidad, por lo que no deben ser juzgadas ni violentadas.
