Tegucigalpa. “A pesar que estamos a casi un año de la nueva administración estas condiciones de carácter social, económico, ambiental y político siguen siendo los factores de fondo que explican el porqué la gente decide migrar y abandonar el país”, cuestionó el coordinador de gestión e incidencia del programa migrantes de la Comisión de Acción Social Menonita (CASM), César Ramos.

Analistas señalan que la migración acelerada que presentan los niños, niñas y jóvenes hondureñas es un problema que difícilmente se podrá detener y que, además, esta población que es expulsada del país es debido a que muchos de ellos no ven un futuro alentador.

Especialistas en temas migratorios y quienes trabajan en derechos humanos de la población migrante señalan que en el país tampoco hay voluntad política para contrarrestar la crisis migratoria a la que se enfrentan principalmente los países centroamericanos.

Entre tanto, la cantidad de niñas, niños y jóvenes hondureños que abandonan el territorio cada día es mayor. Muchos de estos migrantes han perdido la vida en la ruta migratoria, otros han sido víctimas de múltiples violaciones a sus derechos humanos.

Expertos cuestionan que los gobiernos no han tenido estos temas como una problemática que afecta a gran parte de la población, tampoco trabajan para fomentar e incentivar la niñez y a los jóvenes para que no abandonen su país.

Cifras obtenidas por la Red Coordinadora de Instituciones Privadas Pro las Niñas, Niños, Adolescentes, Jóvenes y sus Derechos (COIPRODEN), revelan que de los hondureños menores retornados desde varios países desde el 1 de enero de 2022 hasta el 11 de diciembre del mismo año, registra que 13,700 niños y niñas fueron regresadas al país solo ese año.

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Solo desde México en este mismo tiempo, los niños retornados comprenden 3,048, mientras que las niñas 1,541, la cifra de menores retornados de Estados Unidos es mucho más alta, los niños comprenden 4,431; las niñas 4,476, mientras que de Guatemala la cifra de retornados es mínima, los niños son 122 y las niñas 77.

El analista en temas migratorios, Fernando Castro en conversación con Criterio.hn afirmó que la pobreza y pobreza extrema son algunos de los problemas estructurales que profundizan la migración de familias completas en los países de la región.

“Si no se combate la falta de empleo, la falta de oportunidades y si no se hace un pago de salario justo para quienes tienen un empleo, las cifras de migrantes van a aumentar porque la motivación de tratar de alcanzar un sueño no va a parar”, aseveró.

El analista guatemalteco, manifestó que los motivos migratorios cada día van cambiando, es por ello que los gobiernos de Honduras, El Salvador y Guatemala deberían crear programas orientados a incentivar a los jóvenes y menores a quedarse en sus países para erradicar o al menos disminuir estas cifras.

Agregó que la carencia de políticas públicas y migratorias también lleva a los jóvenes a la búsqueda de un empleo y la generación de ingresos, sin importar que esta sea fuera de sus fronteras.

“Yo veo una situación sumamente preocupante porque los números de gráficas migratorias de menores son impresionantes, los gobiernos deben preocuparse porque se les está escapando la mano de obra joven y la productividad”, alertó Castro.

Pese a que los y las hondureñas experimentaron un cambio de gobernante en las elecciones generales del 28 de noviembre de 2021 y que generó expectativas en muchos hogares hondureños, muchos problemas aún no han sido tocado de raíz.

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En materia de niñez, el plan de gobierno de Xiomara Castro propone crear una política pública con el objetivo de prevenir y reducir la migración de niñas y niños no acompañados, asegurando medidas de protección para las y los repatriados, reinserción social y generación de oportunidades para mejorar la calidad de vida.

Sin embargo, a tan solo días que se cumpla un año del gobierno de Castro, esta promesa no se ha echado a andar y Honduras continúa sin crear políticas públicas orientadas a frenar la migración.

En entrevista reciente con el coordinador de Coiproden, Wilmer Vázquez, solicitó a la presidenta Xiomara Castro, implementar el Protocolo Nacional de Atención a la niñez migrante y la aprobación del Protocolo Binacional Honduras – Guatemala, de manera urgente.

A juicio de Vázquez, Castro debe convocar de manera urgente al Consejo del Sistema Integral de Garantía de Derechos de la Niñez y Adolescencia en Honduras (SIGADENAH), para que el Estado tome su responsabilidad y de seguimiento y una atención más comprometida a la población migrante.

César Ramos de CASM en entrevista con Criterio.hn manifestó que los motivos que llevan a los jóvenes y niños a migrar siguen vigentes en el país. Aunque reconoce que la migración infantil hondureña muchas veces se da por la reunificación familiar, asegura que en el fondo la migración de los padres y madres que mandan a traer a sus hijos, salieron del país bajo las mismas condiciones que actualmente están migrando muchos hondureños.

Al tiempo que cuestionó que el discurso por parte de las autoridades sigue siendo el mismo, sin embargo, en la práctica nada de eso es cierto y las cifras de menores migrantes siguen aumentado.

“Yo no he visto que en Honduras se esté trabajando en materia de niñez, no tenemos nuevas políticas aparte de las que ya están y a las que no se les da cumplimiento”, resaltó Ramos.