Tegucigalpa. – Honduras es un país con una dinámica migratoria fuerte, además de generar migración, también es un país de tránsito de migrantes que tienen como objetivo llegar hasta Estados Unidos, con la idea de mejorar su calidad de vida.
El Observatorio de las Migraciones Internacionales en Honduras (OMIH) de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), en 2022 registró 188 mil 508 migrantes en tránsito por Honduras.
Rolando Sierra, director de FLACSO Honduras, detalló que los migrantes son provenientes de 71 países del mundo. Los migrantes en tránsito por Honduras en su mayoría son de Cuba, le sigue Haití, Ecuador y Venezuela, además mencionó que hay un número considerable de migrantes extracontinentales, provenientes de África y Asia.
El OMIH señala que, en el 2019, se registraron 34 mil 26 personas que ingresaron al territorio de manera irregular, disminuyendo en 2020 a 8 mil 154 producto de la COVID-19.
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MIGRANTES EXTRANJEROS EN HONDURAS
Por las calles de Tegucigalpa y Comayagüela, especialmente las cercanas a las terminales de autobuses que viajan hacia el norte y occidente del país, es común observar a personas migrantes que aprovechan cuando el semáforo está en rojo para acercarse y ofrecer un dulce o una galleta a cambio de unos cuantos lempiras, que les servirán para comprar comida, ajustar una noche en un hotel o para completar el costo del pasaje y continuar su viaje a Guatemala.
“Algunos se quedan, ya sea porque tuvieron alguna limitación económica o algún problema en la documentación o las redes o contactos con las que venían migrando no le funcionaron”, expreso Rolando Sierra.
Además, refirió que el Estado de Honduras debe garantizar mecanismos de atención para los migrantes que pasan por Honduras, y que en muchas ocasiones van acompañados de su familia.
Atención que de acuerdo con Cesar Ramos, representante de la Comisión de Acción Social Menonita (CASM), es limitada. “Definitivamente la respuesta y atención que brindan las autoridades gubernamentales, son muy limitadas para garantizar los derechos humanos”.
También indicó que las condiciones en las que las personas migrantes vienen, especialmente mujeres y niños “son bastante difíciles”.
Honduras es firmante del Pacto Mundial de las Migraciones y el Pacto Mundial de los refugiados del año 2018, en donde se compromete a dar protección a todas las personas migrantes que pasen por el territorio hondureño.
Otro aspecto que destacó Sierra es el trabajo que debe hacer el Estado para fortalecer, la atención del gobierno a través de las instituciones pertinentes que abordan la migración, además agregó que se deben crear campañas a la ciudadanía eliminar todo tipo de xenofobia.
La Xenofobia hace referencia al odio, recelo, hostilidad y rechazo hacia los extranjeros, en este caso a los migrantes de paso.
De acuerdo con el director de FLACSO, Rolando Sierra, 37 mil 912 migrantes extranjeros se han quedado en Honduras.
La ruta es más difícil para los migrantes extranjeros, recorren un largo camino hasta llegar a Honduras, y ya se han enfrentado al terror del Tapón de Darién, la espesa selva que separa Colombia de Panamá, y que muchos catalogan como “el infierno Verde”.
Según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en 2022, se registró el paso de casi 250 mil migrantes y refugiados, que en comparación al 2021, representa un aumento de casi el doble, en el 2021 fueron 133 mil.
Cesar Ramos indicó a Criterio.hn que estas personas, debido a este cruce pasan por afectaciones psicológicas. “Tampoco hay servicios de apoyo en este sentido como para ayudar a estas personas a ser más resilientes, ante los maltratos, estigmatización y la criminalización que son víctimas en todo el trayecto”, señaló.
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HONDUREÑOS RETORNADOS
El Observatorio de las Migraciones Internacionales en Honduras (OMIH), destaca la dinámica migratoria en el país, que cada vez se vuelve más fuerte por el aumento anual de hondureños y hondureñas que intentan emigrar, especialmente hacia Estados Unidos.
Para el cierre del 2022, Honduras registró 88 mil 555 retornos de hondureños y hondureñas. El OMIH destaca que en el 2020 la disminución de las cifras sobre la población retornada fue de 66%, la misma aumentó el 45% en 2021 y un 67% en 2022.
Sierra, es de la opinión que este incremento en el retorno de los hondureños representan “un desafío para el país”, debido a que debe asegurar la reinserción socio-laboral y socio-educativa de todas las personas, que en su mayoría se van de Honduras para mejorar sus condiciones, y otros víctimas del desplazamiento forzado, ya sea por inseguridad o cambio climático.
