Félix Pacheco Reyes, dueño de Inversionistas Tecnológicos Unidos (Itusa) y Aviatsa, fue señalado como testaferro de los hermanos Hernández Alvarado, acumula acusaciones por lavado de activos, nexos con el Caso Pandora y vínculos con sociedades relacionadas al narcotráfico
El avión, con capacidad para 18 pasajeros, estará pintado de negro con logotipos de la Policía Nacional y su arrendamiento se pagará en siete cuotas mensuales de 3.7 millones de lempiras
Tegucigalpa, Honduras. -La Secretaría de Seguridad adjudicó un contrato de 24.8 millones de lempiras por el arrendamiento de un avión para uso de la Policial Nacional, a la empresa Inversionistas Tecnológicos Unidos S.A. de C.V. (ITUSA), cuyo dueño fue señalado en el Caso Pandora y vinculado a Juan Antonio y Juan Orlando Hernández Alvarado, en sus actividades en el narcotráfico.
El contrato, firmado el 7 de mayo de 2025, establece que la aeronave tiene capacidad para más de 18 pasajeros, estará pintado en negro con los logos de la Policía Nacional y se realizará entrega inmediata después de firmado el contrato hasta consumir las 420 horas de vuelo solicitadas.
Mientras que los pagos se realizarán en siete mensualidades de 3,727,552.50 lempiras a favor de ITUSA, hasta completar la suma total de 24.8 millones.
¿QUIEN ES FÉLIX PACHECO REYES?
Félix Francisco Pacheco Reyes, de 57 años, es un piloto hondureño que a lo largo de los años ha constituido al menos 11 empresas, de las cuales 11 se dedican al rubro de la aviación comercial.
De acuerdo a resoluciones de la Oficina Normativa de Contrataciones y Adquisiciones del Estado (ONCAE), Félix Francisco Pacheco Reyes, figura como dueño de Inversionistas Tecnológicos Unidos (ITUSA), Aviación Tecnológica S.A. de C.V. (Aviatsa) y otras sociedades mercantiles.
Mientras que investigaciones de medios de comunicación [nacionales e internacionales] identificaron a Pacheco Reyes como socio y testaferro de los hermanos Juan Antonio (exdiputado) y Juan Orlando Hernández Alvarado (expresidente de Honduras), ambos privados de libertad por delitos relacionados a la narcoactividad.
Una investigación de Expediente Público, publicado en septiembre de 2019, señaló que Pacheco Reyes habría fungido como testaferro de Juan Antonio “Tony” Hernández, exdiputado suplente por el Partido Nacional (2014-2018).
El informe detallaba que los aviones de la familia Hernández eran arrendados al Gobierno de Honduras para asuntos oficiales y que el dinero de esos contratos regresaba a través de intermediarios como Pacheco Reyes.
En ese mismo documento se explica que el costo del servicio aéreo podía oscilar entre mil y siete mil dólares por hora, según el modelo de aeronave, la ruta y los aeropuertos de salida y llegada. Esto implicaría que el entonces presidente Juan Orlando Hernández habría sido contratista del Estado a través de un esquema de triangulación.
El costo de los servicios de vuelo de este tipo de aeronaves oscila entre mil y siete mil dólares por hora, dependiendo del modelo, la ruta y la logística de operación. Otra de las empresas de Pacheco Reyes, Aviation Partners S. de R.L., fue vinculada a operaciones relacionadas al narcotráfico.
EMPRESAS LIGADAS A CASOS DE CORRUPCIÓN
En 2015, el Ministerio Público incluyó a Pacheco Reyes en el requerimiento fiscal del Caso Pandora, acusándolo de lavado de activos en la modalidad de encubrimiento, en perjuicio de la economía del Estado.
De acuerdo con la fiscalía, Pacheco habría recibido fondos de la Fundación Todos Somos Honduras. Aunque se le dictó auto de formal procesamiento, en 2020 una jueza le modificó las medidas cautelares sin audiencia previa, tras una solicitud de su defensa.
La decisión judicial se basó en que la Cancillería lo había contratado para el traslado de hondureños varados en Cuba, lo que fue interpretado como un servicio de interés público.

Además, Pacheco Reyes también fue acusado por encubrimiento en el caso de la sustracción de 282 millones de lempiras de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), mediante la empresa Aviación Tecnológica, S.A., AVIATSA, ahora Honduras Air
Aunque el contrato busca fortalecer la operatividad de la Policía Nacional, la sombra de las conexiones de Pacheco Reyes con los hermanos Hernández y con expedientes judiciales de alto impacto plantea serias dudas sobre la conveniencia de esta contratación.





