Por: Martha Alegría Reichmann
Roma 21 de febrero 2022.-No dejo de escribir públicamente porque sé que miles de personas leen mis artículos y este no resultará menos interesante que los anteriores.
El 21 de febrero de 2001 fue elevado al rango de cardenal, en El Vaticano, Monseñor Oscar Andrés Rodríguez Maradiaga. Fue un día de júbilo para la mayoría de los católicos hondureños y especialmente para sus parientes y amigos. Como ya he mencionado en ocasiones anteriores, fue mi esposo, Alejandro Emilio Valladares, quien tuvo la idea de emprender la tarea para lograr tal objetivo. Un día me dijo: «Voy a intentar que Honduras tenga un cardenal, tenemos el candidato ideal: Monseñor Rodríguez«.
También lea: Libro devela las “traiciones sagradas” del cardenal Óscar Rodríguez Maradiaga
Así comenzó todo. Paso a pasito, con mucha diplomacia fue avanzando como embajador que era de Honduras ante la Santa Sede. No caminó todo sobre rieles, le tomó varios años y encontró obstáculos. El cardenal sabe muy bien cómo fue todo. Cualquiera lo podría dudar, menos él. Seguramente recuerda los pormenores, pues Alejandro le informaba de todo lo que hacía.
Hay un detalle muy importante en todo esto que yo desconocía y lo supe hasta el año pasado que fui invitada a almorzar aquí en Roma, a la espléndida casa de quién fuera el embajador de Argentina en aquel entonces, el señor Esteban Juan Caselli. Él y su esposa Beatriz, viven entre Argentina y Roma, son mis amigos entrañables. Ese día, Esteban me relató algo que me dejó altamente sorprendida. Me dijo que Alejandro lo llamó por teléfono con urgencia el día que hubo consistorio en El Vaticano para nombrar varios cardenales y que se suponía que ahí iba a salir nombrado Rodríguez Maradiaga, pero que no había salido.
Como Alejandro y Esteban eran amigos, Alejandro le pidió que lo ayudara, pues sabía que Argentina estaba teniendo mucha influencia en El Vaticano. Me dijo que aceptó ayudarle y llamó inmediatamente al Cardenal Secretario de Estado, Ángelo Sodano. Este convocó para una nueva elección inmediata donde figuraban, para disimular, cinco candidatos, y ahí salió electo el de Honduras. Alejandro nunca me comentó eso y no sé si lo supo el cardenal.
Cuando Esteban me relató esto, se me salieron las lágrimas. Sentí profundo dolor ante una evidencia más de la incondicional y alta fidelidad y cariño que aquel hombre llamado Alejandro, le tenía a su «amigo».
Por otro lado, hace más de dos años, me fue a visitar una señora con su esposo a mi casa en Valle de Ángeles, no nos conocíamos, pero una común amiga nos puso en contacto porque después de saber mi historia, me querían conocer. Yo les comenté que lo que más me dolía era la traición del cardenal, porque si no hubiera sido por mi esposo, nunca hubiera sido cardenal.
Casi para despedirse, ella me dijo estás palabras: “Marthita, usted tiene que pedir perdón en nombre de don Alejandro porque él fue el impulsor de ese nombramiento«. Me sorprendí demasiado y le dije: ¿por qué? ¡si mi marido lo hizo con buena intención!”. Ella comenzó a explicarme algo sobre la energía cuántica, concluyendo que para cortar el vínculo negativo, había que pedir perdón. No tengo mucho conocimiento sobre energía cuántica, pero creo en ella y es por eso que quiero aprovechar esta ocasión para hacerlo.
Lea, además: Autora de libro acusa al cardenal hondureño de «traición» y «encubrimiento»
Pido perdón en nombre de mi esposo Alejandro Emilio Valladares, por haber sido el impulsor del nombramiento del Cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga. Pido perdón porque el nombramiento le sirvió al cardenal para cometer abusos, primero en su diócesis, aplastando a buenos sacerdotes solo por no haber aceptado la conducta vergonzosa y deplorable del obispo Juan José Pineda. Por haber sostenido y alimentado actos de perversidad sexual, por haber encubierto un asesinato que permanece impune. Por corrupción financiera, por abuso de poder en general.
Además, porque durante los últimos años ha trabajado en el Concejo de Cardenales en las reformas de la Iglesia que están hundiendo a la misma y la están dañando como nunca en su historia.
Porque ha terminado enlodando el nombre de nuestra patria pues abundan artículos internacionales sobre todo en Italia donde lo acusan, lo denuncian y lo tachan como lo peor y lo invitan a que «se aleje en retiro a tocar el saxofón en un circo«.
Le ha faltado al respeto al Eminentísimo Cardenal Raymond Burke, por ser defensor de los principios morales de la iglesia.
Si mi esposo hubiera tenido la más mínima sospecha de que iba a usar su poder para hacer tanto daño, jamás hubiera movido un dedo, y estoy segura que el Papa San Juan Pablo II tampoco hubiera accedido.
Pido perdón, sobre todo, porque mi esposo no se resignó al saber que no había sido nombrado cardenal en su momento, si no que insistió y se movió para que saliera su nombramiento sin imaginarse que ese poder adquirido lo iba a usar contra su propia familia: su viuda y sus hijas, marginándolas para siempre, solo para no dar explicaciones sobre la estafa en que él mismo los metió con mentiras.
*Martha Alegría Reichmann (escritora y viuda de Alejandro Valladares, exembajador de honduras ante El Vaticano)
-
Me encanta desafiar el poder y escudriñar lo oculto para encender las luces en la oscuridad y mostrar la realidad. Desde ese escenario realizo el periodismo junto a un extraordinario equipo que conforma el medio de comunicación referente de Honduras para el mundo Ver todas las entradas
11 respuestas
Pedro. Ademas del polaco, tiene que proporcionar los nombres y apellidos de esos tres hondureños que usted menciona. Y si es posible más nombres , porque usted dice que por lo menos tres, dando a entender que son más.
Prepare todas las pruebas porque las va a necesitar.
No suelo leer los comentarios ni contestarlos pero me llamó una amiga para decirme que están escribiendo calumnias contra mi persona y acabo de chequear.
En efecto. Esa persona que se hace llamar
Pedro, seguramente no se llama Pedro y piensa que como el correo electrónico no sale publicado, puede sentirse a salvó.
Le advierto:. Al ser querellado, mi abogado, con una orden judicial, tendrá derecho a obtener su correo electronico para ser identificado y si no presenta las pruebas de lo que dice, puede ir a la cárcel por calumnia.
Tendrá que detallarlo todo con pruebas. Tendrá que decir nombre y apellidos de ese supuesto polaco.
Esta Carmen para no quedar en ridículo debería de saber que en más de dos evangelios de la biblia, se nos dice que lo que se planeó en el sótano debe de salir a la luz. Es palabra de Dios.
Con todos respeto debe ventilar esto en privado. No soy Católica pero usted señora esta llena de odio. Lea la Biblia, acepte a Cristo como su Salvador Personal. Soñó en Cristo hay esperanza. Es vergonzoso la manera en que se expresa. Eso les pasa por seguir hombres en vez de seguir a Cristo. La religión no salva.
Ella no tiene porqué tener vergüenza y está bien que lo díga, si el cardenal es un abusador y nosotros corrupto tenemos el derecho a saberlo, la felicito señora Martha porque estos sinvergüenzas deben ser expuestos
Ella no tiene porqué tener vergüenza y está bien que lo díga, si el cardenal es un abusador y corrupto nosotros tenemos el derecho a saberlo, la felicito señora Martha porque estos sinvergüenzas deben ser expuestos
Y porqué no cuenta esa señora que tiene una enfermedad psicológica de enamorarse y acostarse con sacerdotes. El ultimo en Roma fue un jovencito polaco. Una mujer despechada es capaz de todo. Los sacerdotes fieles guardan silencio. En Honduras se lió con pir lo menos tres. Siga acusando señora santa
Pedir perdon es obedecer a Dios. Es una decisión. Es un acto que trae paz interior, salud mental y emocional. Con el cariño que le tengo Martha, siga adelante! Dejese usar por el Señor! Tome fuerzas en EL. Solo asi se puede llegar hasta donde usted a llegado. Aun tiene mucho que hacer, siga…
El Dios que conozco es un Dios justo… asi que a dejar en manos de Dios a quienes han hecho daño..
Mi pregunta es: dónde esta DÍOS para este tipo de personas, a qué Dios es al que dicen ellos servir.
Yo tampoco se mucho de la energía cuantica pero se q errar es de humanos , Don Alejandro creyó en su amigo, lo creía una buena persona y por eso lucho ., yo personalmente no lo culpo de nada ya q actuó de buena fe y hay un Dios q todo lo ve y más temprano q tarde el recibirá su castigo divino
Excelente artículo Martha. Siempre hay que hablar con la verdad. Dios perdone a este hombre. Con el título de Cardenal.