Por: Redaccion CRITERIO.HN
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San Pedro Sula. El debate sobre el contenido del nuevo Código Penal sigue abierto después de que los diputados de oposición intentaran derogar el nuevo Código Penal por considerarlo dañino y violador de derechos humanos.
El profesional del derecho Celso Alvarado, experto en temas de seguridad y narcotráfico, dijo que “estamos ante un cuadro preocupante en temas de narcotráfico y corrupción”.
Es un hecho comprobado que algunos diputados hondureños han sido partícipes de la aprobación de leyes en materia de seguridad y al mismo tiempo estuvieron traficando drogas a EE. UU., por ejemplo, el exdiputado Tony Hernández -hermano del presidente Juan Hernández.
“Estos narcotraficantes han tenido que ser extraditados porque la justicia hondureña y el Ministerio Público no quieren investigar y no quieren acusar. El Poder Judicial tiene que hacer todo un trámite para extraditar, es a todas luces la materialización de una negación de sancionar. Y contrasta el nuevo Código Penal con el anterior. Eso es gravísimo, porque deberían ser las autoridades nacionales las que juzguen y sancionen. Si nosotros, hipotéticamente suprimimos esa serie de eslabones, el resultado que tenemos es impunidad. El concepto de impunidad es la negativa del Estado de investigar, sancionar, castigar y reparar a las víctimas”, sostiene.
Para el abogado Ramón Barrios “debe revisarse en un nuevo Código Penal, porque se debe mandar un mensaje contundente en el combate a la corrupción y narcotráfico. Y también debe revisarse los castigos referentes a la violencia contra las mujeres. Son dos escenarios y dos cuerpos de materias que deben revisarse”.
El sociólogo y analista nacional, Eugenio Sosa es del criterio que “en Honduras está creciendo la producción y el consumo de estupefacientes. De drogas. De cocaína en este caso. Eso es un primer elemento y que cuando una persona tiene un liderazgo político, podemos decir es que es reflejo de la degradación de la élite política en el país”.
