Por: Redacción CRITERIO
Tegucigalpa. Un nuevo abuso de autoridad y violación a las leyes nacionales se ha dado con el nombramiento de Catherine Yamileth Chang Carías, como directora del Banco Central de Honduras (BCH).
A pesar que fue nombrada el pasado jueves 14 de enero, los medios de comunicación se han llamado a un profundo silencio, sabiendo que es una franca violación a la ley.
La nueva directora del BCH es hija del Secretario de Gobernación, Rigoberto Chang Castillo que pronto dejará ese cargo para irse a manejar Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), según lo anunció el presidente Juan Hernández
Otro agravante es que Catherine Chang es la esposa del Fiscal General del Estado, Oscar Fernando Chinchilla.
La hija de Chang Castillo fue nombrada como titular del BCH sin cumplir los requisitos académicos y profesionales que exige el artículo 8 de la Ley del Banco Central de Honduras, y que reza así: «contar con una amplia experiencia en materias relacionadas con la economía general, el comercio internacional, la moneda, la banca, las finanzas públicas y privadas o el Derecho Económico».
Además el artículo 9 de la misma ley dice en la letra ch) que no podrán ser miembros del Directorio: «Los que sean cónyuges o parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad del Presidente de la República, de los designados a la Presidencia de la República o de los Secretarios de Estado».
El actual presidente tiene nombrada a su hermana Hilda Hernández, como Ministra de Comunicación y Estrategia. Y la familia del director del Banasupro Luis Colindres está nombrada toda en el engranaje gubernamental.
Igual situación ocurre con la familia de la directora del Instituto de Jubilaciones y Pensiones del Empleado Público (INJUPEMP) que también los ha nombrado a todos incluso en la misma institución.
