Tegucigalpa.- El Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL) hace un llamado junto a otras organizaciones para que el Congreso Nacional de Honduras promueva un proceso de selección transparente para la elección de la nueva Corte Suprema de Justicia (CSJ).
Asimismo, piden que tras el receso legislativo se asegure un dialogo informado y participativo con los actores sociales que impulsan el debate ciudadano en esta materia para incorporar salvaguardas de independencia, elección con base en méritos y capacidades, transparencia y publicidad, participación ciudadana, e igualdad y no discriminación, en el mecanismo de selección vigente.
Esto disminuirá los riesgos de que el proceso de nombramiento reproduzca las prácticas del pasado caracterizadas por favorecer la politización de la justicia, debilitar la independencia judicial y su eficacia en la lucha contra la corrupción, así como la garantía efectiva de los derechos humanos, dice el CEJIL en un comunicado.
Señala que en los últimos meses se han presentado hasta tres iniciativas legislativas para mejorar este proceso de selección y adecuarlo a estándares internacionales.
Entre ellas se encuentra la propuesta Ley especial de organización y funcionamiento de la junta nominadora para la proposición de candidatos a magistrados de la Corte Suprema de Justicia elaborada con el acompañamiento de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Honduras.
Sin embargo, no se ha demostrado ningún compromiso político ya que ninguna de las propuestas ha avanzado en su tramitación, no se han emitido dictámenes ni han sido socializadas con la ciudadanía hondureña.
La elección de los nuevos magistrados a la Corte Suprema de Justicia es una oportunidad para nombrar a personas íntegras, calificadas e independientes de los poderes políticos, que reconstruyan la confianza en la más alta corte del país.
Para ello es esencial la aprobación de una normativa acorde con los estándares internacionales y para avanzar en el proceso de renovación de los magistrados y magistradas de la Corte Suprema de Justicia de Honduras, en consonancia con las demandas ciudadanas y las recomendaciones de los organismos internacionales de derechos humanos.
La normativa debe enmarcarse en estos estándares con directrices claras para el funcionamiento de la Junta Nominadora en el proceso de selección de las magistraturas que debe comenzar el próximo julio, dándole herramientas para aumentar la transparencia, idoneidad, independencia, rendición de cuentas, o para alcanzar la paridad de género en la conformación de la Corte.
